La campaña tiene como uno de sus ejes centrales la protección del río Paraná y el rechazo a la re licitación y extranjerización del río impulsada por el gobierno de Javier Milei.
Serán 1200 kilómetros por el río Paraná que recorrerán los remeros durante 22 días, parando en 25 territorios donde se realizarán encuentros con cada comunidad.
Con el eco de la gesta que hace 28 años encabezaron Luis Cosita Romero, y Raúl Rocco poniéndole freno a la construcción de una gran represa en el Rio Paraná, hoy los remeros, abrazados por más de 170 organizaciones y acompañados por la red Justicia y Paz de la Patria Grande, salen para “defender al rio del nuevo ataque privatizador del gobierno”, como parte de una acción mayor que se desarrolla en coordinación con organizaciones de toda la Cuenca del Plata y el Caribe en defensa de los bienes comunes.
Durante todo el recorrido diferentes colectivos sociales, ambientales, sindicales, deportivos, culturales y políticos acompañarán tanto en el agua como en actos en tierra la épica travesía.
Un grupo de embarcaciones realiza, en condiciones climáticas agobiantes como la ola de calor que tiñó todo el arranque, la travesía completa uniendo nuestro litoral con el grito “la patria no se vende, el Paraná se defiende”.
Desde el arranque se lanzaron al agua Luis Cosita Romero, Francisco Paredes y Martha Arriola en una de las embarcaciones, Mariano Martínez y Nelson Yapura, en otra y Luciano Orellano, Arian Enriquez Montiel y Ernesto Javier “Tula” Nuñez, en una tercera. Las mismas son acompañadas por los kayakistas Elias Segura, Matias Postai y Luciano Salomone.
Con un acto multisectorial en Isla del Cerrito, Chaco, se dio inicio a la segunda fase de la travesía donde se sumaron decenas de kayaks de la escuela de canotaje de Barranqueras (Chaco). Al arranque se realizó una asamblea con la participación de fuerzas políticas, gremiales y ambientales de la zona, y una emotiva ceremonia religiosa.
Con las embarcaciones en el agua arrancó la remada que tuvo una parada en las playas de Corrientes capital y luego en la otra orilla del Paraná, en Barranqueras, Chaco.
“Salvemos el Paraná”
Una de las embarcaciones que realizará la travesía completa está tripulada por dos santafesinos y un entrerriano que viajaron para sumarse a esta forma de concientizar y denunciar el intento de entrega de nuestro recurso más preciado, el majestuoso Río Paraná.
A bordo de la embarcación “Salvemos al Paraná”, Luciano Orellano (referente del Foro por la Recuperación del Paraná y del Encuentro Federal por la Soberanía) acompañado del pescador Arian Enríquez Montiel (Referente de la cooperativa de pescadores “Sembrar” de Villa Gdor. Gálvez) y Ernesto Javier “Tula” Nuñez (Guía Turístico y Asesor de Islas en el Municipalidad de Victoria) enfrentan las primeras jornadas de remo en medio de una ola de calor intensa que hace todo mucho más difícil, pero que no frena las ganas de remar por la patria.
“Vengo a Chaco con los compañeros a pelear para que no nos roben el Paraná, nosotros nos dedicamos a la pesca y lo que quieren hacer por el Paraná destruye nuestras fuentes de trabajo y afecta a nuestras comunidades”, afirma Arian.
Por su parte “Tula”, cuenta que su ciudad, la entrerriana Victoria, el problema no es solo a futuro, sino que ya se palpa claramente.
“Desde hace años venimos advirtiendo de la situación que genera el dragado del Paraná y la sedimentación de las bocas en nuestro delta. Al punto que en Victoria hay emergencia hídrica porque la ciudad estuvo a punto de quedarse sin agua. Una ciudad de 35 mil habitantes que tomamos agua del rio y de una gran comunidad de pescadores que viven de la pesca, la apicultura y la ganadería en isla, y estos últimos tiempos se ha visto muy afectada por el dragado. Y ahora vemos que el gobierno abre una licitación, que aunque se cayó, tiene la intención de llevarlo a 44 pies”, comenta y explica con preocupación que “estamos desesperados porque no sabemos lo que puede pasar. Creemos que es la sentencia de muerte del humedal y de todo el Paraná”.
Luciano, autor de varios libros sobre la soberanía y la defensa del Paraná es claro en torno a la importancia de la remada. “Venimos a ponerle el cuero a las ideas y a la defensa de la patria. Como decía San Martín, cuando la patria está en peligro todo está permitido menos no defenderla”.
Una larga y dura travesía que une las luchas
A medida que comienza la travesía toda la planificación de meses va tomando cuerpo, y también empiezan a aparecer las dificultades y preocupaciones. El calor, la logística, la difusión de las noticias.
Más de 20 días en el río se transforma en un gran desafío organizativo, pero también personal, pero el convencimiento de que hay que defender lo propio es mayor.
“Yo no sé ni remar, pero sé que hay que defender la patria”, afirma Luciano que además de remar y participar de la travesía va presentando sus trabajos de investigación y una gigantesca muestra de infografías para hacer docencia patriótica.
Y asegura que “vengo junto a compañeros como Cosita, y Martha, como Yapura y Mariano, y las decenas de patriotas que se van sumando en cada tramo a defender la patria y a aprender de nuestra gente.”
Ernesto, el “Tula”, también se unió a esta pelea “en la búsqueda de hacer algo para unirnos, y eso es la remada contracorriente”, y asegura que a pesar de que “es complicado por el trabajo, las familias y eso, es una patriada que vale la pena para tratar de que la gente tome conciencia y se despierte todo el litoral para que frenemos esta locura, y podamos recuperar nuestros recursos. Le pedimos a la gente que se sume”.
Algo similar nos cuenta Arian, un joven pescador de Villa Gobernador Gálvez que acompaña a Luciano y el “Tula”. “Vengo de un trabajo que vivo día a día, y fue complicado organizar para venir, pero hay que estar porque hay que unirse en una lucha larga, y hay que pelear para que no nos quiten lo que es nuestro”, comenta convencido.
Corrientes y Chaco, dos orillas, la misma lucha
Van llegando las embarcaciones a las playas de la capital correntina y allí los esperan decenas de compañeros y gente de la zona con banderas argentinas. Cada parada es emocionante y única, y se tiñe de la historia de la zona.
Allí con la muestra soberana montada, en la escuelita itinerante de la patria llamada “Vuelta de Obligado/Punta Quebracho” se realizó otro de los actos multisectoriales que convocan a las fuerzas sociales y políticas que se van uniendo a esta lucha.
“Estamos haciendo esto con el espíritu de los que dejaron su sangre en la defensa de la patria como los héroes de Malvinas. Estos son los grandes temas, la segunda emancipación que necesita esta cuenca, que nos enseñaron aquellos que en la guerra del Paraná, ocultada por la historia oficial, enfrentaron a las flotas anglofrancesas y donde los gauchos, las mujeres, los criollos y pueblos originarios dejaron su sangre para que este río sea nuestro”, arranca Luciano su participación en el acto.
“No podemos tolerar que tengamos dragas ocultadas, oxidadas y hundidas para abrirle paso a las empresas extranjeras a que se queden con todo. Queremos la industria naval para generar empleo genuino. Basta de que los pueblos del litoral tengan la ñata contra el vidrio de ver como desfila la riqueza por el río pero no producimos una sola barcaza en Argentina, ni los barcos ni sus tripulantes son nuestros”, explica en torno a lo que hay en juego en esta pelea.
Y finaliza asegurando que “nunca vamos a encontrar la felicidad de espaldas al río, tenemos que estar de frente al río y defenderlo, venimos a jurar liberar la Cuenca del Plata, a liberar los ríos y luchar por justicia e igualdad, pero eso es imposible sin soberanía”.
“Viva la virgen y viva la patria”, gritó el cura Carlitos Gómez, de los Curas de Opción por los Pobres, recibiendo el grito de ¡viva! de los compañeros y compañeras que a pesar del calor acompañaron el acto.
Luego de la lectura de un documento multisectorial en el acto tomó la palabra Martha Arriola, una de las promotoras de la remada, de la Red Eclesial Justicia y Paz en la Patria Grande y coordinadora nacional del Movimiento Cuidadores de la Casa Común (MCCC) del Papa Francisco, para recordar la importancia del protagonismo de la gente en esta cruzada, y especialmente de las mujeres.
Por su parte, los pescadores Luis “Cosita” Romero y Nelson Yapura, remeros de las embarcaciones principales, “la Yaguarona” y “la del Zurdo” recordaron la gesta del 96 que inspiró la actual remada “si fue posible hace 28 años porqué no ahora”. Refiriéndose a la gesta que protagonizaron junto al pueblo de Entre Ríos para frenar la instalación de una represa en el Paraná medio.
Mientras los remeros volvían a la playa para continuar a Barranqueras, Chaco, donde culminó la jornada, músicos locales acompañaron con una batucada y la postal de una bandera argentina de más de 60 metros, aportada por el Foro por la Recuperación del Paraná, daban marco al final de esta etapa. Unas 20 embarcaciones partieron hacia la otra orilla a eso de las 18 horas donde culminó la jornada con un festival cultural acompañado de organizaciones y gente de la zona.
En el Parque Recreativo del Club Náutico de Barranqueras, se montó un escenario donde pasaron músicos locales mientras artistas plásticos pintaban en vivo. Compartieron la palabra con los presentes Luis “Cosita” Romero, Martha Arriola, Luciano Orellano y Cristina Magnano, referenta chaqueña de la campaña y del CIET (Centro Interdisciplinario de Estudios Territoriales), quienes contaron el sentido de la campaña y agradecieron el hermoso recibimiento. Se vivió una verdadera fiesta en la tarde noche en Barranqueras. Al día siguiente, el grupo de remeros, cada vez más numeroso, partió para la ciudad de Empedrado, Corrientes.
Toda la información de la travesía se puede encontrar en la web https://remarcontracorriente.org/ donde puede seguirse los próximos puntos de la travesía, así como las actividades y las opciones para participar y aportar a esta patriada.
La remada recién empieza, la lucha sigue.