Comenzó recordando Vargas que nuestro Partido nació en 1968 luchando contra la dictadura de Onganía, "nunca fuimos un Partido para que un político hiciera carrera como concejal o diputado, ni fuimos teóricos de café", recordando que en estos años fuimos parte de importantes luchas de nuestro pueblo, y que tuvimos aciertos y cometimos errores, de los cuales tratamos de autocriticarnos, porque "no cometen errores los que no hacen nada, los que hacen se equivocan", y que en política los errores, tanto de izquierda como de derecha, "son como cuando uno va cruzando un puente y se cae. Puede ser por la derecha o por la izquierda, pero uno se cae igual".
Con relación a esto afirmó Vargas que "somos el único Partido, al menos que yo conozca, que está publicando todos los documentos que realizó en su historia. Ya vamos por el quinto tomo", destacando la importancia de que todos puedan conocer lo que dijo el PCR en cada momento de su historia.
El polvorín
Se refirió al que en el momento de la fundación, el general Perón había dado la orden de "desensillar hasta que aclare", y que muchos dirigentes sindicales habían desensillado. Con ellos polemizó el PCR, afirmando que esa "era la hora del proletariado", que "bajo los pies de la dictadura de Onganía, había un polvorín reseco y que nosotros íbamos a trabajar para que estalle". Polvorín que estalló con el Correntinazo, el Rosariazo y el Cordobazo, puebladas donde tuvo activa participación el PCR. "una de las principales columnas del Cordobazo la encabezó la Agrupación 1º de Mayo que había creado nuestro partido en Dinfia, y participaron compañeros nuestros del Smata y estudiantes". Vargas recordó que "bien se dijo en esa época que nada iba a ser igual en la Argentina luego del Cordobazo. El Cordobazo demostró que era la clase obrera la clase que estaba en condiciones de encabezar un proceso revolucionario en la Argentina".
La lucha antigolpista
Sobre el último gobierno de Perón, recordó que cuando las grandes masas cantaban "luche, luche, luche, no deje de luchar, por un gobierno obrero y popular", estaban pensando en un gobierno del general Perón. Describió la situación internacional de disputa entre las superpotencias (EEUU y URSS) en esos años, con el socialimperialismo ruso a la ofensiva internacionalmente, sus avances en el plano interno dentro de las clases dominantes y en el propio gobierno de Perón luego del 73. Recordó Vargas que por esos años el responsable sindical del PC, Vicente Marischi, le dijo al compañero René Salamanca, sobre el gobierno de Perón: "nosotros tenemos una gran parte del gobierno, y vamos por todo".
"Nosotros en el año 1974 vimos que la Argentina inexorablemente iba al golpe de Estado", afirmó destacando que en el contexto de la disputa imperialista, la Argentina "es fundamental por el control del paso entre los dos océanos". "En ese momento impulsamos la consigna "unirse, organizarse y armarse para impedir otro 55. El golpe no pasará. En ese camino si era necesario apoyábamos al gobierno de Isabel Perón. En esa lucha nos mataron muchos compañeros", detallando cómo la posición antigolpista "llenó el foso que había entre los comunistas y los peronistas lo que costó sangre a nuestro Partido". Y detalló como muchas fuerzas de izquierda "que apoyaron al golpe", nos acusaron de lopezreguistas para ocultar "la vergüenza de sus propias posiciones que ayudaron al golpe violo-videlista", cuando nosotros luchamos contra las medidas reaccionarias del gobierno de Isabel que ayudaban al golpe que se preparaba.
Cavamos trincheras para luchar
Con respecto al período de la lucha contra la dictadura de Videla, el camarada Otto resaltó que "cavamos trincheras para luchar, y nos quedamos en el país", enumerando la participación del PCR en las luchas obreras de esos años, como en mecánicos, ferroviarios y la huelga larga de la carne en Berisso "dirigida por compañeros del Partido"; el rol jugado en el movimiento de Madres de Plaza de Mayo "desde sus comienzos", y el destacado papel del Partido en la lucha contra la guerra fratricida con Chile "donde el Partido jugó un gran papel junto a las masas católicas, y fue el organizador, junto a lo que entonces se llamó la CGT Brasil, de una declaración conjunta con la CGT de Perú y de Bolivia contra la guerra".
Cuando se produjo Malvinas "nosotros inmediatamente apoyamos la recuperación", recordó Vargas, ayudados por el maoísmo y tomando como referencia lo que hicieron nuestros próceres ante las invasiones inglesas, "cuando ya conspiraban contra el colonialismo español, pero no se confundieron y organizaron las milicias contra los ingleses, porque no querían cambiar de amo". Planteamos que la dictadura no era garantía, que había que traer la guerra al territorio, nacionalizar las propiedades inglesas, etc. "Por eso hicimos lazos profundos con los veteranos y combatientes de Malvinas".
La profundidad del Argentinazo
"En determinado momento nosotros comprendimos que con esta democracia representativa no íbamos a terminar con los gobiernos entreguistas… y que el camino era el de las puebladas de Cutralcó, Tartagal, Libertador, era el camino del Argentinazo", afirmó para detallar luego en qué condiciones se dio el Argentinazo "no las que nosotros hubiéramos querido por eso no pudimos coronar con un gobierno de unidad popular". Pero a la vez advirtió que no "había que tirar el chico con el agua de la bañera" y ver qué tuvo el Argentinazo, destacando lo profundo que está latiendo en el pueblo argentino, dando ejemplos de los sectores "de Flores o Caballito" que despotrican contra los piqueteros pero que cortan las calles cuando se quedan sin luz o sin agua, y con el otro ejemplo que se ha vuelto a mostrar en las últimas elecciones presidenciales con la vigencia del "voto bronca", que ha hecho decir a un medio como Ambito Financiero "el gran ganador fue el no voto".
Las banderas del clasismo
Otro aspecto que destacó Vargas, es que el PCR fue el centro del poderosos movimientos sociales y políticos, en primer lugar rescatando el clasismo, que la dirección del PC había abandonado, y enumeró algunas de las experiencias en las que participó el PCR, desde la lucha en Petroquímica Sudamericana (hoy Mafissa) y Destilería de La Plata en los inicios del Partido, Perdriel, la recuperación del Smata Córdoba, la huelga larga de la carne del Swift de Berisso, la histórica toma de Ford, el papel de los municipales jujeños durante el menemismo, y cómo sostenemos esas banderas hoy tanto en Terrabusi, Astillero Río Santiago, Renacer, petroleros, trabajadores de la pesca, docentes, estatales y en los nuevos contingentes en lucha.
Desarrolló cómo fue la organización del poderoso movimiento de desocupados clasista "una originalidad del proceso social argentino", y del movimiento de jubilados "otro destacamento del proletariado". Luego hizo un rápido repaso del trabajo partidario en otras áreas, como el crecimiento en el campesinado pobre y la participación en la principal corriente opositora en la Federación Agraria y el Movimiento de Mujeres en Lucha, en el movimiento estudiantil universitario y secundario, en el desarrollo de los Encuentros Nacionales de Mujeres y las luchas por las reivindicaciones de clase y de género. Entre los originarios y los ambientalistas, en los movimientos por las libertades públicas, en defensa del petróleo, y en los movimientos culturales.
Terminó esta enumeración resaltando que fuimos durante varios años parte de los organizadores de los aniversarios de la gesta de Malvinas, anudando relaciones con sectores patrióticos y democráticos de las fuerzas armadas, "porque somos leninistas y sabemos que para triunfar una revolución debe derribar el Estado de las clases dominantes, que el principal instrumento de ese Estado son las fuerzas represivas, y que una revolución para triunfar debe ganar a una parte de las fuerzas armadas, y neutralizar a otra".
Con la brújula del maoísmo
"Nosotros cuando fundamos el Partido y durante varios años, estábamos en la lucha pero andábamos sin rumbo. Nosotros veíamos que la URSS no era más socialista. Los obreros, que habían tomado el poder en la tercera parte de la Tierra, lo habían perdido", reflexionó sobre el final el camarada Vargas, y relató cómo "anduvimos perdidos" buscando una explicación a esto, "hasta que encontramos la teoría de la continuación de la revolución bajo las condiciones de la dictadura del proletariado que formuló Mao Tsetung, encontramos la teoría de Mao de porqué el socialismo había sido derrotado, y conocimos la Gran Revolución Cultural Proletaria China, tal vez la movilización revolucionaria más grande en la historia de la humanidad".
Nosotros adherimos al maoísmo. Somos marxistas-leninistas-maoístas, que es un desarrollo del marxismo, que puede explicarle a la clase obrera qué pasó, y cómo avanzar para adelante… No vamos a construir el socialismo en el Siglo 21 sin saber porqué fue derrotado el socialismo en el Siglo 20".
"Nosotros no tenemos muchas certezas, pero estamos seguros que si queremos avanzar hoy, el camino está trazado. Por ahora, mientras se mantengan estas condiciones, nosotros tenemos que avanzar por ese camino que abrió el Argentinazo. No es que la revolución la vamos a hacer con una pueblada, pero esas puebladas van a abrir el camino, para que sobre la base del papel dirigente de la clase obrera y de la unidad de las fuerzas populares, triunfe la revolución. Esa es nuestra certeza", y finalizó asegurando que las nuevas generaciones, los nuevos combatientes deberán buscar y encontrar nuevos caminos, pero "para no equivocarse, tendrán que tener la brújula del marxismo-leninismo-maoísmo".
