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25 de junio de 2014

Conversamos con Ernesto “Rulo” Rajneri de la CCC y flamante secretario de la Juventud de la CTA nacional, recientemente elegido en las elecciones del 29 de mayo, quien nos cuenta sobre la situación de los jóvenes y el trabajo desde la Secretaría para enfrentar la política de ajuste y despidos.

Con los jóvenes al frente de las luchas

Juventud de la CTA

Al comenzar nuestra charla, Rulo cuenta que el martes pasado se realizó la primera reunión de comisión de la CTA nacional y que, por lo tanto, “todavía tenemos pendiente conversar con Pablo Micheli (secretario general de la CTA nacional) qué vamos a trabajar y cómo”.

Al comenzar nuestra charla, Rulo cuenta que el martes pasado se realizó la primera reunión de comisión de la CTA nacional y que, por lo tanto, “todavía tenemos pendiente conversar con Pablo Micheli (secretario general de la CTA nacional) qué vamos a trabajar y cómo”.
A continuación, explica: “Nuestra idea es trabajar fundamentalmente con ocupados y después con el movimiento juvenil en general: en el barrio, con los estudiantes, con la juventud campesina. Si bien la juventud de la CTA viene teniendo trabajo barrial, con la niñez, lo que ahora queremos es construir desde los ocupados.
“Desde ya que nos planteamos un trabajo más específico en algunos lugares más concentrados, que nos permita ir abarcando más. Por provincia hay un secretario de la Juventud de la CTA, con ellos haremos mesas nacionales.
“Hoy, en las empresas automotrices, el 70 por ciento está compuesto por jóvenes. Ahora se ve el problema de los despidos y suspensiones que hoy llegan a 12 mil. Con lo cual, este problema de los despidos y suspensiones afecta principalmente a la juventud. Ya vimos la lucha de Gestamp. La pelea es para que la crisis no la paguen los trabajadores y el pueblo.” 
 
La pelea contra la precarización laboral
 
Más adelante, Rajneri dice: “Hay 8 millones y medio de jóvenes precarizados, con contratos desfavorables, tercerizados y contratos basura, y de esos ocho millones y medio, la mitad están en negro. Esto es en general, no sólo en las automotrices. Por eso, nuestra pelea más fuerte es ir contra la precarización laboral. Porque afecta principalmente a la juventud.
“Lo de las automotrices tiene una consonancia internacional porque gran parte de los autos que se ensamblan acá en Argentina se exportan a Brasil pero ha disminuido considerablemente la compra, lo cual afecta directamente con despidos y suspensiones. En otras fábricas, lo que se ve es la superexplotación laboral con altos ritmos de producción que aceleran los ritmos y ves compañeros lesionados con un montón de problemas físicos que les van afectando y de la mano de eso viene muchas veces la droga para poder superar o tolerar esos ritmos.
     “En la década kirchnerista ha avanzado el narcotráfico, de un país de tránsito se ha convertido en país que elabora la droga, que ha sacado la gendarmería de las fronteras y tampoco hay radares, con lo cual la droga pasa como si nada. Hay aeropuertos clandestinos. La droga es la anestesia a nuestra rebeldía frente a los problemas que sufrimos todos los días los jóvenes. Nosotros planteamos que debe haber cárcel para los narcos, no para los pibes; que tiene que haber deporte, cultura, educación y trabajo para la juventud, camino a erradicar la droga en la Argentina por centros de rehabilitación y programas preventivos.”
 
Avanzar en la construcción de una CTA de masas
“Pablo Micheli plantea construir una CTA de 3 o 4 millones, para eso, nosotros creemos que es fundamental apostar a la juventud que es la que viene organizándose y siendo protagonista de los distintos paros, por eso es fundamental pasar a tener base en las grandes fábricas, en los trabajadores precarizados, y en la construcción de un gran movimiento nacional en contra de la droga.
“En la zona norte de GBA hay una concentración muy grande de obreros fabriles, arranca en el Puerto de la Ciudad de Buenos Aires y llega hasta Córdoba. En todo ese cordón industrial hay una cantidad de trabajadoras y trabajadores que no están sindicalizados, una concentración de ciento de miles de trabajadores, con una composición fuerte de jóvenes, con lo cual vamos a tener que jugar un papel. 
“También tendremos que trabajar en la Capital Federal, en sus distintas composiciones juveniles que tiene; en el NOA, donde están los Ingenios azucareros; con los trabajadores del petróleo en el Sur. 
“Hay mucho para trabajar, y para organizar a la juventud obrera y popular y, como primera iniciativa, queremos armar un torneo de fútbol nacional en contra de la droga y contra precarización laboral. La idea es organizar torneos en todas las localidades del país donde está la Juventud de la CTA y, al mismo tiempo, con los ganadores de esos torneos locales, hacer un gran torneo nacional con festival de bandas y distintas actividades culturales, recreativas, que nos permita juntarnos y abordar todas estas problemáticas.
“El otro problema que tenemos es que hoy 900 mil jóvenes no estudian ni trabajan, con lo cual la pelea diaria es que sean incluidos, porque son los que hoy están condenados a la pobreza, a la desocupación, a que el paco en dos o tres meses les rompa la cabeza…
 
Por un parazo de 36 horas
“En lo que ha sido el paro del 20 de noviembre de 2012 como en el paro del 10 de abril y en la preparación de un gran parazo de 36 horas que nosotros empujamos, la juventud viene jugando un gran papel de rebelión, de organización y sobre todo de un montón de pibes que pasan a tener un rol decisivo: se organizan en las fábricas, pasan a ser delegados, disputan comisiones internas contra la burocracia y los jerarcas sindicales.
“Luego de la reactivación económica después del Argentinazo, donde un montón de jóvenes entraron a las fábricas y han conseguido distintos puestos de trabajo, no se está en las mejores condiciones: al que más gana le afecta el impuesto a las ganancias y, en el otro extremo están precarizados. Porque de fondo este gobierno no ha resuelto el problema de la Argentina, si bien ha habido una reactivación económica, no ha sido en función de los intereses nacionales de desarrollar una industria nacional, de distribuir la tierra en Argentina, que hoy está concentrada en pocas manos y, en relación a eso, los que sufrimos las consecuencias somos el pueblo y en éste la juventud.
“Hoy, con la crisis y la inflación, los pibes tienen miedo adónde va la Argentina: antes, para acceder a un bien material te endeudabas con la tarjeta, veías la forma, te comprabas la moto o el auto; hoy hay una situación de un parate, pero frente a eso, como lo demuestran los trabajadores de Gestamp, si no te organizás, si no luchás, tanto la empresa como el gobierno, y el sindicato (que organiza la patota carnereando la lucha de los trabajadores), se unen con un mismo fin para hacer que los trabajadores paguen la crisis.
“Por eso es que hoy es necesario impulsar con fuerza desde abajo y desde cada lugar de trabajo, para que sea un hecho el paro de 36 horas. 
“Ahora desde la CTA se está organizando la marcha de los Chicos del Pueblo, el hambre es un crimen, que recorre toda la Argentina, que arranca desde Misiones y dura unas dos semanas, va recorriendo distintos puntos del país con marchas, actos en cada ciudad capital y cerraría en CABA. Nosotros vamos a participar activamente con la CCC desde la CTA y en las distintas ciudades donde va a pasar la marcha que probablemente sea en septiembre.”