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19 de septiembre de 2012

Una resolución histórica del Consejo Académico de la Facultad de Humanidades demuestra la complicidad de la empresa Ledesma en el diseño y ejecución de delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura militar.

Condena académica a Blaquier por genocida

Hoy 1437 / Facultad de Humanidades de Jujuy

El martes 11 de septiembre, luego de un largo debate, el Consejo Académico de la Facultad de Humanidades de la Universidad Nacional de Jujuy, aprobó una resolución en la que repudia el carácter “científico” del libro de historia empresarial Ledesma, una empresa Centenaria, presentado por la defensa de Carlos Pedro Blaquier como prueba de su inocencia, en el marco de los juicios por crímenes de lesa humanidad que se están llevando adelante en la provincia.

El martes 11 de septiembre, luego de un largo debate, el Consejo Académico de la Facultad de Humanidades de la Universidad Nacional de Jujuy, aprobó una resolución en la que repudia el carácter “científico” del libro de historia empresarial Ledesma, una empresa Centenaria, presentado por la defensa de Carlos Pedro Blaquier como prueba de su inocencia, en el marco de los juicios por crímenes de lesa humanidad que se están llevando adelante en la provincia.


El fiscal de la causa, Pablo Pelazzo, presente en el debate, haciendo uso de la palabra expresó: “para nosotros es muy importante este debate, porque el libro del centenario es parte de las pruebas que presentó la defensa de la empresa para probar su inocencia”. La resolución del Consejo, reconoce que “existen testimonios orales y fuentes documentales aportadas, durante 36 años de lucha, por familiares de detenidos-desaparecidos y organizaciones de derechos humanos que demuestran la complicidad de la empresa Ledesma en el diseño y ejecución de delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura militar”.


Esta condena académica a Carlos Pedro Blaquier representa un compromiso social activo de los profesionales de la Facultad de Humanidades, sin precedentes en la historia de nuestra Universidad.


La resolución aprobada el martes 11 fue el producto de una resistida presentación realizada por agrupaciones estudiantiles de esa Facultad, que pedía nombrar persona no grata al Dr. Gustavo Paz, quien figura entre los créditos del libro que tergiversa la historia y fue aportado por Ledesma como prueba de su inocencia. La presentación fue defendida en el debate por el consejero académico estudiantil de la Corriente Estudiantil Popular Antiimperialista (CEPA).


“Esto demuestra que la lucha de ideas es esencial para la lucha de clases, y los profesionales que necesitamos son aquellos que pongan su práctica al servicio del pueblo argentino, y no que vendan sus capacidades intelectuales a los poderes de turno, convirtiéndose en sicarios intelectuales. Esto nos costó persecución en las aulas y ataques por parte de algunos docentes afines al gobierno y el secretario de Cultura de la Provincia, Jorge Noceti, que es abogado de la empresa y su esposa consejera docente de la agrupación del rectorado. El hecho de que una presentación nuestra en Consejo pueda constituirse en prueba de un juicio a un genocida y asesino, como Carlos Pedro Blaquier, demuestra la justeza de nuestro reclamo: pasamos de ser “terroristas” a protagonistas de la historia. Ahora tenemos que profundizar la lucha, y exigir justicia también por los cuatro muertos del año pasado en la toma de tierras que dirigió la CCC en Libertador: “esa también es sangre derramada que tiene que pagar Blaquier”, comentó el consejero académico de la CEPA, Juampi Sapito Alba.


Esta experiencia histórica afirma la justeza de la línea de la CEPA, que puede ponerse a la cabeza de grandes desafíos y lograr transformar la realidad en beneficio del pueblo, porque como lo afirmaba Mao Tsetung, la lucha de clases es el fundamento de las ciencias sociales.