ATE Quilmes viene reclamando de manera urgente la incorporación del gremio a las negociaciones paritarias desde principios de 2016. Por eso el lunes 6 se resolvió, mediante asamblea de cuerpo de delegados de municipales, realizar una permanencia de manera pacífica en el palacio municipal. La medida fue votada de manera unánime, como venían pidiendo los trabajadores a lo largo del conflicto.
ATE Quilmes viene reclamando de manera urgente la incorporación del gremio a las negociaciones paritarias desde principios de 2016. Por eso el lunes 6 se resolvió, mediante asamblea de cuerpo de delegados de municipales, realizar una permanencia de manera pacífica en el palacio municipal. La medida fue votada de manera unánime, como venían pidiendo los trabajadores a lo largo del conflicto.
El objetivo era que los reclamos fueran escuchados por el gobierno local encabezado por Martiniano Molina que, con presupuestos millonarios sólo ajusta las condiciones laborales de los trabajadores y sigue con la intención de mantener a sus empleados con contratos basura, que apenas alcanzan para cubrir las condiciones básicas de subsistencia. Recordemos que a principios del año se han dado de baja cientos de contratos municipales extremadamente precarizados, como así también despidos de delegados alegando cuestiones sindicales, desconociendo la Ley de Asociaciones Sindicales. Gracias a la lucha estos delegados fueron reincorporados en su inmensa mayoría.
Esta medida se llevó a la práctica el día siguiente (martes 7). Con el correr de la mañana el secretario general de la ATE local fue recibido por un funcionario encargado de las relaciones gremiales del municipio, el cual no logró dar una respuesta favorable al conflicto, ya que el intendente sólo acepta en la mesa de negociación paritaria al STMQ (Sindicato de Trabajadores Municipales de Quilmes). Por la tarde, se resolvió en asamblea hacer noche en el palacio municipal en donde varios compañeros hicieron el aguante.
Entrado el miércoles se decidió cortar la calle principal para que el conflicto fuera más visible, con adhesiones y solidaridad, frente a un gobierno ajustador al servicio de los poderosos. Arribó el secretario general de ATE provincia de Buenos Aires y de la CTA-Autónoma, Oscar de Isasi.
Luego de arduas negociaciones los funcionarios cedieron al pedido de los trabajadores, consiguiendo que en un comunicado de prensa la Municipalidad acepte la solicitud de ATE. De esta manera, se resuelve que el órgano competente para dar respuesta al pedido de incorporación en paritarias, conforme a la Ley Provincial 14.656, sea el Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires, y así poder sentar precedente en toda la provincia.
Por lo pronto seguiremos exigiendo de manera ineludible que ningún trabajador esté por debajo de la línea de la pobreza, lo cual el mismísimo gobierno se cansa de mostrar en sus índices para medir el nivel de vida que necesita un trabajador. Los empleados municipales llevan a sus hogares entre 6.000 y 6.900 pesos de bolsillo. También rechazamos el techo del 18% en cuotas que plantea el gobierno nacional en todos sus estamentos para todas las paritarias, sea del orden privado o estatal, impidiendo claramente equiparar los salarios acorde al ritmo inflacionario, ya que el 2016 fue a la baja, perdiendo un alto porcentual de nuestros haberes.
