Como nos contaba en la concentración previa a la marcha la compañera Laura Kniznik, de CNEA, el motivo principal de la marcha es el ajuste y los despidos en el Conicet (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas): “Hubo una convocatoria a ingresos a la carrera de investigador, que es como el pase a planta permanente, en la que quedaron 2.100 personas afuera. Sólo entraron 450. Los despedidos son compañeros que han cumplido con creces su carrera académica, con evaluaciones excelentes. Esto tiene que ver con un recorte en los ingresos, que hace que cada vez haya menos gente investigando en el Conicet.
“Eso generó una movilización al Polo Científico hace diez días, y a esta marcha de antorchas, en las que convocamos todas las trabajadoras y trabajadores del sistema científico y tecnológico: Conicet, CNEA, INTI, INTA, Segemar, Citedef, Instituto Antártico, Servicio Meteorológico Nacional, universidades nacionales. El planteo es que no se sostiene un sistema científico-tecnológico con estos recortes, con expulsados, con desmantelamiento de áreas enteras del Conicet como de los diversos organismos. Yo vengo de la CNEA y ahí también tenemos ajuste. Tenemos parado el ingreso a planta permanente, y sectores con presupuesto cero. Al suspenderse la construcción de la cuarta central nuclear se habla de nuevos despidos. Con este gobierno se ve una declinación de la soberanía en ciencia y tecnología.
“Este recorte en los ingresos a la carrera del Conicet es general, pero en algunas áreas fue mayor, como en ciencias sociales y humanidades. Esto da cuenta de lo que este gobierno piensa del desarrollo científico al servicio de una historia a favor de nuestro pueblo o de entender mejor los procesos sociales que ocurren en nuestro pueblo. También se sintió mucho el recorte en biomédicas, porque se privilegia una ciencia al servicio de los grandes laboratorios y monopolios, y no para el desarrollo de vacunas o medicamentos al servicio del pueblo”.
En el documento leído en Plaza de Mayo las y los científicos denunciaron que “El gobierno de Mauricio Macri y del Fondo Monetario Internacional avanza en el desmantelamiento del sistema científico y tecnológico estatal”.
Cada año más postulantes para menos cargos
Por su parte, Belén, bióloga que trabaja en salud y es una de las 2100 despedidas, nos contaba que “trabajo en salud, con pacientes con inmunodeficiencia. Tengo posibilidad de continuidad laboral en la universidad, donde soy docente. Hay una política de ajuste que viene desde hace rato, con un achicamiento en todas las áreas, no sólo el Conicet. Como no hay ingresos a planta en INTI, INTA, etc., son muchos más los que se presentan al Conicet. Somos cada año más postulantes para cada vez menos cargos.
“Nosotros pedimos la continuidad laboral de todos los despedidos, con prórroga de las becas o reinserción para los que se les terminó la beca. Romper el techo de los despidos, y un aumento de cupos para el año que viene. Que como mínimo el cupo sea igual al del 2018, y de máxima los números planteados en Argentina innovadora 2020.
“La semana pasada nos dijeron que ‘no estábamos en agenda’, y ahora, con la movilización, conseguimos una entrevista para el 23, no sabemos con qué funcionarios del Ministerio de Educación, de donde dependemos ahora. Llamamos a movilizar al Polo Científico, donde va a ser la reunión.
“Los afectados por esta situación, que ya viene desde hace años, se organizaron en la Red Federal de Afectados, que tendría que pasar a llamarse red federal de despedidos, y tenemos el gremio que es ATE-Conicet, al que les llevamos nuestros reclamos”, nos decía Belén.
Hoy N° 1763 24/04/2019
