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26 de abril de 2022

Columna semanal de Arnoldo Gómez

Contra la inflación son necesarias otras medidas

Medidas de fondo para frenar la inflación plantea Arnoldo Gómez en su columna de los viernes en Argentina “Ayer y Hoy”, programa con la conducción de M. A. De Renzis del 22 de abril 2022

El gobierno plantea que la inflación es multicausal, efectivamente lo es, el tema es que las principales pueden ser frenadas con medidas que tome el gobierno, y esto se oculta.

Hay una causa histórica de la inflación argentina, siempre ocultada, que es la renta terrateniente. El principal monopolio que existe en la Argentina es el de la tierra, las principales tierras están en manos de unas dos mil familias y algunas sociedades anónimas, que cobran una renta que por año suman 10 mil, 15 mil millones de dólares. Esta renta, que se suma a los costos reales de la producción, va incorporada en el precio de todos nuestros alimentos y de todas las materias primas que van a la industria, encareciendo los medios de vida del pueblo y de toda la producción nacional. Por ejemplo del año pasado a este año, aprovechándose de la guerra, la renta aumentó en un 123%.  Esta renta no vuelve a la producción, ni bien la cobran compran dólares y son un factor constante de la “fuga”, con lo cual debilitan nuestra moneda y actúan siempre a favor de su devaluación.

Esto tiene que ser atacado, en primer lugar, por el control del comercio exterior, como hizo Perón con el Instituto Argentino de Promoción del Intercambio (IAPI), camino en el cual se podría haber avanzado con Vicentin y con el control del Paraná. Pero el gobierno nacional no lo hizo. Hoy ante la guerra son necesarias las retenciones y tampoco se lo hace. Otra forma de limitar esta renta es aumentando los impuestos territoriales en las provincias y estamos lejos de ello.

El otro tema grueso para abaratar precios es la escala de producción expandiendo el mercado interno. La baja salarial producida durante el macrismo no fue revertida en estos 2 años y con  menor ritmo continuó. Los bonos y las medidas como los IFE achican las diferencias, pero no contrarrestan en la misma medida la pérdida del poder adquisitivo salarial.  Se  achica la escala de la producción interna, lo que eleva los costos de producción.  Por el contrario se benefician los productos primarios para la exportación como los granos y la carne, que sin retenciones empujan los precios internos al valor internacional, y no respetando sus costos de producción.

Hay una gran mentira instalada por el liberalismo de que el aumento salarial va a costo, no, el aumento salarial va contra la super ganancia de los monopolios que controlan esta producción. La suba salarial es un factor pro activo del mercado interno y de la escala de la producción. Pero el control de la distribución está en manos de 250 empresas monopolistas que hacen al revés, suben el precio pese a la baja de la producción y resisten la suba salarial.

Por lo tanto, acá hay dos medidas, que es la suba salarial y un control férreo de precios por parte del gobierno que obligue a esas empresas a que su margen de ganancias no esté dado por subir los precios sino por ampliar la escala de la producción. Medidas que no se ve que esté tomando el gobierno.

Otro tema es el de la infraestructura. ¿Qué estamos haciendo en la infraestructura ferroviaria, en la infraestructura de la producción de nuestra marina mercante, en las dragas para el Paraná? Todas estas medidas que no se toman por un presupuesto atado al acuerdo con el FMI, son necesarias para abaratar y ampliar la producción.

Al mismo tiempo, por ejemplo, tenemos un presupuesto que paga subsidios, este año vamos a pagar subsidios por 16 mil millones de dólares, entonces está el debate en si se aumenta la tarifa o si se paga el subsidio. Pero nadie pone en debate dónde va esa plata que es a grupos como Telefónica, Techint o Mindlin que han sido  grandes fugadores de dólares. Los de Telefónica se llevaron 1200 millones de dólares, o Mindlin 980 millones de dólares en el ciclo Macri. En vez de pagar esos subsidios, hay que volver a una política de estatización de las empresas de servicios que es la base que pueda permitir precios internos para una producción más barata, que si en todo caso generaran un déficit de esa magnitud sería  para subsidiar con tarifas baratas a las empresas de capital nacional y no a estos pulpos de intermediarios y grupos extranjeros.

Y la madre de todas las causas es la depreciación de nuestra moneda. Esa depreciación, como lo señala Giuliano y reiteramos en los desocultamientos, tiene una base que es la emisión de moneda para pagar intereses, como  las Lelic en el mercado interno o como son los intereses de una deuda fraudulenta respecto del FMI y los bonistas que se cerró el año pasado, esta emisión para pagar deuda es una emisión que no va a la producción y que deteriora nuestra moneda.

No es  el déficit presupuestario el causante de la depreciación de la moneda, como logró instalar el liberalismo, y ahora se sella con el acuerdo con el FMI, si el déficit presupuestario se lo cubre con una emisión de moneda nacional que va a la producción, eso que se emite son mayores bienes, mayor cantidad de infraestructura, eso entra en la circulación y no genera inflación.

Estos son los grandes mitos de nuestra inflación. Yo le diría al Presidente que si como él dijo “al carajo con que vamos a perder el próximo turno electoral” tendría que tomar medidas de fondo para frenar la inflación porque esto está acumulando una bronca muy grande en nuestro pueblo y no se va a resolver con esta política de atarse al FMI.

La lucha salarial y la lucha por defender nuestra soberanía son las grandes medidas para enfrentar a esa derecha que quiere volver, porque los grupos monopólicos que se benefician con esta inflación no van a dudar en apoyar el retorno de esa derecha, porque este gobierno no le sirve con su heterogeneidad y porque su base social que empuja para adelante les resulta peligrosa, ellos prefieren el gobierno de los amarillos. Entonces, solo enfrentando esta multicausalidad y los factores que son su base se va a poder frenar la inflación a favor del pueblo y la patria, y dejar de alimentar a los grupos económicos que no van a vacilar en empujar la vuelta de  esa derecha decidida a sostener esos privilegios.