Desde mediados de enero los metalúrgicos de Río Bravo Industrial (RBI) estamos ocupando la fábrica en defensa de nuestros derechos y nuestro trabajo.
La patronal de Río Bravo Industrial, encabezada por el economista Pablo Carlos Espartaco Rojo, después de abandonar la planta, dejar de pagar nuestros salarios y entregarla a un testaferro o tercero interesado, para lo único que se ha presentado ha sido con la intención de retirar máquinas y equipos y culminar con sus maniobras de vaciamiento.
Desde mediados de enero los metalúrgicos de Río Bravo Industrial (RBI) estamos ocupando la fábrica en defensa de nuestros derechos y nuestro trabajo.
La patronal de Río Bravo Industrial, encabezada por el economista Pablo Carlos Espartaco Rojo, después de abandonar la planta, dejar de pagar nuestros salarios y entregarla a un testaferro o tercero interesado, para lo único que se ha presentado ha sido con la intención de retirar máquinas y equipos y culminar con sus maniobras de vaciamiento.
Fuimos acusados de usurpadores, agredidos por una patota, con la energía cortada por falta de pago, sin cobrar desde febrero y ahora se nos ha terminado el Repro.
En estas circunstancias un grupo de trabajadores hemos decidido conformar una cooperativa para recuperar nuestra fuente de trabajo, denominada Mecanizados Progreso.
A partir de ese momento se abrió para nosotros otro panorama con perspectiva de futuro.
Recibimos el apoyo de la Intendencia de San Martín, de distintas dependencias de la misma y concejales de nuestro distrito. Otras cooperativas de la zona se solidarizaron con nosotros, el INTI nos ofreció su ayuda para el proceso de autogestión, diversas fuerzas gremiales, sociales y políticas nos acercaron su solidaridad, la Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires le dio media sanción a nuestro proyecto de expropiación de la planta que ahora está analizando el Senado de la provincia y se va a tratar en la Cámara de Diputados de la nación una declaración de apoyo a nuestros esfuerzos.
Hemos empezado conversaciones con las autoridades de la escuela técnica Emilio Mitre para elaborar en forma conjunta un plan de capacitación de sus alumnos en los Centros de Control Numérico que hay en la planta y ofrecimos nuestra colaboración con la pequeña y mediana empresa para certificar la calidad de los calibres, necesarios para garantizar la producción.
Y ya nos ha llegado una propuesta de trabajo.
Frente a estas posibilidades la patronal de RBI y su director Pablo Rojo, quien fuera responsable de la privatización del Banco Hipotecario, pretende retirar las máquinas y concluir sus maniobras de vaciamiento, como ya lo ha intentado a pesar de la “medida de no innovar” que prohíbe el retiro de cualquier elemento de la fábrica, dictada por el Tribunal de Trabajo N° 2 de San Martín.
Por estas razones los trabajadores reclamamos nuestro derecho a permanecer en RBI, (ex – Bosch), a defender nuestro trabajo y recuperar la producción para ponerla al servicio de los trabajadores, de la comunidad de San Martín y de la economía nacional.
No vamos a permitir que se pretenda transformar un conflicto laboral en una causa judicial donde se pretenda colocar a los trabajadores en el banquillo de los acusados, cuando hemos sido y seguimos siendo víctimas de maniobras fraudulentas, violaciones a nuestros derechos más elementales por parte de una patronal que mostrando su verdadera cara, hace pocos días atrás cuando llego a Argelite, otra fábrica del mismo grupo, con guardaespaldas que agredieron físicamente a un delegado del personal y terminaron rompiéndole el automóvil.
Por todas estas razones alertamos a la opinión pública de las nuevas maniobras que se están realizando en nuestra contra. Llevamos adelante una lucha pacífica pero con la firmeza y la convicción de su justeza.
Luchamos por recuperar el más elemental de los derechos, el de trabajar dignamente para ganarnos nuestro sustento y mantener a nuestras familias, de aportar nuestro esfuerzo en estos momentos donde nuevamente la crisis mundial afecta a nuestra economía y ayudar a nuestra comunidad contra los que han vaciado a una de las más importantes fuentes de trabajo de nuestra zona y pretenden terminar de destruirla.
Seguimos adelante con la firme convicción de obtener en la Cámara de Senadores el apoyo que necesitamos para volver a poner en marcha la fábrica y convocamos a todos, autoridades municipales, provinciales y nacionales, legislativas, organizaciones sindicales, sociales y políticas, que nos vienen dando su apoyo desde el inicio de nuestra lucha a seguir acompañando nuestros esfuerzos.
San Martín, 4 de septiembre del 2012.