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02 de octubre de 2010

En otro capítulo de la criminalización de la protesta social, Eduardo Delmonte fue citado esta semana por el juez Correccional de la 6ª Nominación de Rosario.

Criminalizan a Eduardo Delmonte

Hoy 1337 / Continúa el acampe de los desocupados en Rosario

Es imputado por el delito del Art. 194 del Código Penal, impedir o estorbar el normal funcionamiento de transportes.
El dato relevante es que el delito que se le atribuye a Delmonte –coordinador de los desocupados de la CCC de Rosario y zona– tiene como causa la marcha que el pueblo de Rosario realizó el miércoles 21 de septiembre de 2010 en solidaridad con los trabajadores de Paraná Metal.
La imputación marca un cambio importante en el gobierno municipal del intendente Lifschitz, quien se ha inclinado por judicializar la protesta social. Este funcionario es por demás de amable con la presidenta Kirchner cada vez que viene a Rosario a explayarse sobre las bondades de su “modelo”, y en los últimos días por medio de su secretario de Gobierno se ha dedicado a denostar la protesta de los desocupados.
Por otra parte el juez de la causa es famoso porque cada vez que hay una lucha social es de la tesis de aplicar la norma penal. “Cada vez que haya un corte de calles en mi turno, aplicaré la norma, por lo menos hasta que supriman el artículo del Código”, se ufanó ante Delmonte y sus abogados.
Delmonte también se encuentra imputado –ridículamente– por los hechos ocurridos en la sede de Atilra (Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera) durante el año 2008.
Otro hecho que marca la decisión estatal de perseguir a los que luchan con el Código Penal lo marca el hecho que desde el Juzgado Federal Penal Nº 4 de Rosario se sigue con las citaciones a indagatorias de numerosos estudiantes por haber protagonizado durante el año 2009 una lucha reclamando reformas edilicias en la Facultad de Psicología.
El acampe de los desocupados de la CCC, Originarios, Comedores Independientes y otras organizaciones entra en su tercera semana sin que los funcionarios municipales o nacionales den respuesta alguna sobre algo muy simple: ¿Por qué los planes de Argentina Trabaja no llegan a Santa Fe? Ese acampe muestra el verdadero rostro de Rosario: pobreza, indigencia y hambre para una gran parte de la población; millones de millones de dólares que salen por los puertos de la zona y que constituyen fabulosos negocios para los monopolios exportadores del cereal y los pooles de siembra.
Crece la indignación de los desocupados, se realizarán marchas durante la semana. La lucha continúa.