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28 de octubre de 2015

 Aumenta los ritmos de producción a límites insoportables, con el agravante de haber “establecido” 10 horas de trabajo, contra toda la legislación laboral.

¿Crisis en el frigorífico JBS (Swift)?

La voracidad de un monopolio

 
Nuevamente vamos a hablar de JBS Swift. Y lo tenemos que hacer porque es el mayor frigorífico de la República Argentina. Pero además se ha transformado en un gigante mundial en carnes vacuna, aviar y porcina.

 
Nuevamente vamos a hablar de JBS Swift. Y lo tenemos que hacer porque es el mayor frigorífico de la República Argentina. Pero además se ha transformado en un gigante mundial en carnes vacuna, aviar y porcina.
 Hace pocas semanas el diario Clarín, en su página económica publicaba la noticia de que JBS compraba el 100% de las acciones del Grupo Moy Park Holdings Europe Ltd. Este grupo, originario de Irlanda del Norte, cría pollos y pavos en el Reino Unido, Irlanda, Holanda y Francia. En el 2014 tuvo una facturación de unos 1.190 millones de euros. A ello hay que agregar que ya en el 2013 JBS se había convertido en un gigante de la carne aviar, tras comprar a otro gigante Tyson en México y Brasil, Seara (filial agrícola de Marfrig en Brasil) y de Frangosul (filial brasileña del conglomerado francés Doux).
En 2013, JBS Argentina facturó $1.670 millones y en el 2014 $3.405, es decir el 100% más (fuente Revista Mercado). Este año aumentó sus exportaciones en un 26% y se pasó de una matanza de 1.200 a 1.800 animales por día, aumentando los ritmos de producción a límites insoportables, con el agravante de haber “establecido” 10 horas de trabajo, contraviniendo toda la legislación laboral argentina. Todos estos datos nos conducen a decir que JBS se ha transformado en el monopolio de carnes más grande del mundo.
Ahora bien, si estamos dando todas estas cifras que demuestran la voracidad y el crecimiento de este monopolio, ¿por qué encabezamos el artículo con una pregunta sobre la crisis?
Mediante una maniobra especulativa, JBS reduce el trabajo a 160 hs mensuales. Con esto ¿qué obtiene? En primer lugar el procedimiento preventivo de crisis mediante el cual el Estado le subsidia una parte del salario ($1.000). Como los obreros tienen que salir de la fábrica para cobrar este subsidio (se paga en el Banco Nación), le descuentan la hora que no trabajan. A su vez la empresa, con la misma cantidad de personal que trabajaban 9 horas por día, matando 1.400 animales, ahora pretende hacerlo en 8 horas, con lo cual aumenta su ganancia.
 El Gobierno “nacional y popular”, que “se preocupa” por los trabajadores y nos machaca casi diariamente con cadenas nacionales, hablándonos de que lo conseguido es lo mejor que se pudo, ¿qué hace ante semejante situación? Calla, concede y otorga que se mienta infamemente en función de los negocios que tiene con este sector empresario de la carne. Avala la estafa que se le hace al Estado argentino y a los trabajadores a través del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social. Triste papel de los funcionarios, que una vez más se comportan como gerentes de las empresas multinacionales, típico de una país dependiente como el nuestro. Esta historia la hemos vivido en su momento con los imperialistas ingleses, con los rusos y ahora con los chinos y con cuanto imperialismo dispute nuestro país. 
“Tenemos buenas expectativas para el año próximo”, le dijo al diario La Capital de Rosario el 4 de octubre, un empresario del sector cárnico. Claro, si las commodities bajaron un 50% y la carne lo hizo tan solo en un 18%, sigue siendo un gran negocio. Tan es así que se está preparando la planta para una matanza de 2000 animales diarios. 
Queda palmariamente demostrado que no hay ninguna crisis. Dado que la hacienda argentina es más cara porque el gobierno no devaluó (en función electoral) como nuestros vecinos, la empresa compra en el exterior ya que los precios les resultan favorables. En todo caso lo que hace JBS es descargar sobre las espalda de los trabajadores el ajuste que, por anticipado, gane quien gane en las próximas elecciones, les quieren hacer pagar a los que generan la verdadera riqueza.