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09 de noviembre de 2012

Cristina en el camino de Martínez de Hoz

Hoy 1444 / Privilegia las deudas con legislación extranjera

 

 

“Cuando veo lo que pasó con la Fragata y lo que pasó con el fallo en Nueva York, pienso en decirle a quien quiera reestructurar su deuda que no cometa el error de ir a Nueva York”, dijo en un dejo autocrítico la presidenta Cristina Fernández. Sin embargo, a renglón seguido, afirmó: “El negocio [de algunos] es que no paguemos, pero les tengo una mala noticia: vamos a pagar con dólares”.
 
El ex presidente Duhalde se hizo famoso por su frase “el que depositó dólares recibirá dólares”. Ahora, Cristina Fernández pasará a la historia por discriminar contra los que tienen bonos en dólares bajo la legislación argentina, que no recibirán dólares por sus bonos, mientras que los que tienen bonos bajo legislación extranjera recibirán dólares. Así, quienes confiaron en los tribunales del país terminarán perdiendo parte de sus acreencias (recibirán $4,75 por cada dólar), mientras que quienes optaron por bonos bajo legislación extranjera verán aumentado su beneficio (cada dólar que reciban podrán cambiarlo por más de $6,50). Con lo que otra vez volverá a hacerse cierto, también por la negativa, aquel apotegma que hizo famoso a Lorenzo Sigaut, el sucesor de Martínez de Hoz en la dictadura: “el que apuesta al dólar pierde”.
 
Así, Cristina Fernández, al tiempo que dice estar en contra de la legislación imperialista impuesta por Videla y continuada por Menem (aunque en nueve años no se notó), discrimina en contra de los que se acogieron a la legislación argentina. La misma incongruencia manifiesta cuando dice que prefiere que la fragata Libertad quede en manos de los bonistas que no entraron en el canje, antes que someterse a esa legislación extranjera, que por otro lado afirma va a seguir honrando pagando religiosamente los bonos de la deuda externa ilegítima y fraudulenta que, en su momento, el gobierno kirchnerista canjeó sometiéndose precisamente en esa legislación extranjera. Hecho del que se agarran los fondos buitres para continuar litigando contra el país.