1. Se puede romper la trampa de las PASO
1. Se puede romper la trampa de las PASO
Con las fórmulas presidenciales del Frente para la Victoria y la Alianza PRO-UCR-CC, para las PASO, los grupos que manejan el poder han armado su trampa electoral: si estás harto del gobierno K votá a Macri-Michetti, y si no te bancás a Macri votá a Scioli-Zannini. Los monopolios de los medios de comunicación que manejan esos mismos grupos de poder, el K y el de Clarín, te van a machacar hasta las elecciones que no hay ningún otro voto útil. Nos quieren meter a todos adentro de ese corral.
No les va a resultar fácil. La histórica movilización de las mujeres, y el parazo nacional, mostraron que el pueblo no quiere retroceder, va por más, mira para adelante. Las mujeres y los trabajadores mostraron que hay condiciones para que la bronca popular también esté en las elecciones.Es posible parir una fuerza que tenga como protagonistas a los trabajadores, los campesinos, las mujeres y la juventud. Una fuerza que, en un proceso,pueda acabar con el poder que los condena al ajuste, la entrega, la corrupción, la inseguridad y la droga, y construir su propio poder.
Está naciendo esa herramienta con elFrente Popular, su programa, su fórmula presidencial, el Tano De Gennaro, un luchador del movimiento obrero, y Evangelina Codoni, una joven mujer, luchadora del movimiento estudiantil y agrario, con Juan Carlos Alderete y los demás candidatos.
2. Más ajuste, más entrega y más represión
Scioli y Macri tienen planes para achicar los salarios, aumentar las tarifas de energía y transporte, y devaluar el peso hachando sueldos, jubilaciones y planes sociales. El objetivo de los dos es dar prioridad a las inversiones que vengan de afuera, para lo que quieren “seducir”, con más entrega, a los prestamistas. Los dos se proponen endeudar el país, siguiendo la ruta del gobierno K con los acuerdos con el Club de Paris, YPF, el CIADI, los créditos de China y las emisiones internacionales de deuda. Los dos han conversado, en Estados Unidos, posibles arreglos con los buitres; arreglos exigidos para prestar dólares. Ninguno dice qué ofreció a cambio.
Los grandes capitales argentinos han fugado al exterior 300.000 millones de dólares, y presionan para acelerar el ajuste con la zanahoria de nuevas inversiones. Sus economistas, Broda, Melconian, Blejer, Lavagna, Frigerio, Bein, etc., hablan de eliminar las paritarias y bajar a la mitad el déficit fiscal.
Los dos tienen planes de profundizar la criminalización de la protesta, y una ley anti-piquete. Llevan a fondo lo que avanzó al gobierno K entregando el espionaje interno al represor de la dictadura Milani y la seguridad a Berni.
3. ¿Algo nuevo en la fórmula Scioli-Zannini?
Nada nuevo. “Soy inquebrantablemente fiel a la presidenta”, dijo Scioli.
A Scioli lo inventó Menem para derrotar al duhaldismo que manejaba el peronismo porteño. Menem lo hizo diputado, y secretario de deporte y turismo. Con Duhalde siguió en esa secretaría, cultivando buenas relaciones con empresarios del juego. Más tarde, el acuerdo de Duhalde-Kirchner para las elecciones del 2003, incluyó a Scioli de vice como garante de esa alianza que los llevó al gobierno. Dos años después Néstor se lo sacó de encima empujándolo a la gobernación bonaerense. Ya gobernador, Scioli le dio a Montoto todos los negocios que genera el aparato de seguridad; Montoto es representante de la empresa rusa Rosoboronexport, fabricante de armamentos, entre ellos los misiles que exporta a China.
Scioli fue menemista con Menem, duhaldista con Duhalde y kirchnerista con Néstor y Cristina.
Cristina le puso a Mariotto de comisario político en la gobernación, y ahora a Zannini. Llenó de funcionarios de La Cámpora las listas de diputados y senadores para garantizarse una fuerza poderosa en el Congreso. Manejará el aparato represivo con Milani, y gran parte del aparato judicial con Gils Carbó y jueces amigos.
Zannini nunca fue maoísta, como lo perfuman. Cuando salió de la cárcel se instaló en Santa Cruz con un grupo de compañeros de Vanguardia Comunista (la organización a la que pertenecían). Ese grupo se sumó al de los Kircher (De Vido, Jaime, Lázaro Báez, Cristóbal López, etc.), para formar una unidad básica que, con el apoyo del sindicalista petrolero Diego Ibáñez, llevó a Néstor K a la gobernación, y a Zannini a altos cargos en Santa Cruz K. Fue un gobierno represor implacable de los cortes de ruta, jamás hizo un acto por el 24 de marzo, y apoyó abiertamente la privatización de YPF. En las presidencias de los K, Zannini siempre fue su mano derecha; y un “amigo” de Zannini, Ferreyra, es el mayor ganador de las licitaciones de obras públicas nacionales.
4. Macri-Michetti, nada nuevo
No se recuerda en nuestra historia una fórmula presidencial de dos porteños, Macri y Michetti, hegemonizando un frente que hace gala de ser puramente gorila. Estuvo a punto de tener una fórmula bonaerense trasplantando a Vidal y Ritondo de la Capital a la provincia. Reutemann es otro invento de Menem reciclado por Macri.
En Santa Fe, Macri inventó a Del Sel, un reaccionario total, fracasó. La derecha radical le alquiló a Macri el aparato nacional sin el cual no podría soñar con ser presidente. Además de la UCR, Macri hizo acuerdos en varias provincias con el Frente Renovador y el Gen.
¡Cómo va a ser Macri la opción al gobierno K si tienen innumerables negocios conjuntos en las obras públicas de la Capital Federal y otros lugares, y comparten plenamente la política de entrega a los imperialismos chino y ruso! Macri ya anunció que seguirá en su cargo, Galuccio, presidente de YPF, a la que está vaciando.
Cristina suprimió la interna para cohesionar a su fuerza, busca que Scioli y Zannini ganen en la primera vuelta. Macri apuesta a la segunda vuelta, cuando confía en hacer alianzas para atraer todo el voto anti-K.
5. Romper la trampa con 500.000 votos
Después de la jornada histórica de las mujeres y el parazo nacional se le achicó la cancha a la trampa electoral de los de arriba. Cristina K pateó Randazzo para evitar la interna K, y Macri debió cambiar su fórmula a la gobernación de Buenos Aires. Quedó en claro que las mujeres, los trabajadores, los campesinos, la juventud, reclaman cosas de las que no hablan los candidatos presidenciales del sistema.
Las PASO, mal llamadas “internas abiertas”, se demuestra que no son más que una trampa para proscribir a fuerzas opositoras populares y polarizar las elecciones. Las verdaderas fórmulas y listas de los K y el macrismo, las armaron a dedo Cristina y Macri.
Stolbizer salió a buscar candidato sin mucha suerte, y la izquierda testimonial (la dirección del FIT), perfuma a las PASO controladas por el Estado oligárquico-imperialista, al avalarlas como la forma de resolver su interna.
El Frente Popular decidió su candidatura presidencial en un plenario nacional, y la ratificó en su 1° Congreso. Y las juventudes de las fuerzas que conforman el FP decidieron democráticamente, en un plenario nacional, la candidata a vicepresidenta, Evangelina Codoni.
Inscriptas la fórmula presidencial De Gennaro-Codoni, Juan Carlos Alderete y los demás candidatos, está abierta la batalla política por ganar los 500.000 votos para romper la trampa de las PASO. Una batalla que exige nuevos esfuerzos a los ya realizados por militantes y amigos. Una batalla que se gana en cada fábrica y lugar de trabajo, en los barrios y en cada pueblo agrario, en los colegios y las universidades, trabajando junto a los artistas, los intelectuales, los profesionales y demás sectores populares.
Una campaña que va unida a seguir encabezando las luchas, como el paro del transporte y las paritarias en curso. Y preparando un nuevo paro nacional para enfrentar el ajuste y la entrega K, y para preparar al movimiento obrero, campesino y popular para seguir la pelea contra los nuevos ajustes que planean los candidatos del sistema.
Como resume un “analista” de los de arriba: “el verdadero problema no radica en quién será el ganador, sino cómo enfrentará el turbulento escenario económico-social en ciernes”.