En 1920 se desarrolló un debate entre la dirección del Partido Socialista, y el Consejo Federal de la Federación Obrera Región Argentina hegemonizada por la corriente sindicalista. El Comité Ejecutivo del PS pidió a la FORA que encararan en conjunto una campaña destinada a “apresurar la sanción por el senado de leyes sobre el azúcar y los alquileres baratos”. La dirección de FORA se negó argumentando prescindencia política, diciendo que iba a pasar el tema a los sindicatos federados.
El Comité Ejecutivo del PS envió una furibunda carta dirigida al “ciudadano secretario general” de la FORA el 17/9/1920, en la que entre otras cosas le decía que “es hora de romper abiertamente con una fórmula vieja y equívoca, que no dudamos que es evidentemente engañosa y altamente perjudicial para la clase obrera agremiada”, y luego defendía su postura como “político en el sentido de una política de clase”. En otro párrafo, luego de poner como ejemplos casos de colaboración entre centrales sindicales y partidos socialistas en Alemania, Inglaterra, España y otros países, la carta firmada por Alfredo Spinetto, como secretario del PS, lanza su estocada: “en el Consejo Federal hay políticos e ideólogos. Políticos que no desdeñan gestionar sus asuntos en los ministerios. Ideólogos de ideologías discutibles, gallardos ante la masa, complacientes ante el poder político burgués”. El PS hacía referencia así a la creciente colaboración entre connotados dirigentes de la FORA y el gobierno de Hipólito Yrigoyen.
A los pocos días, el Consejo Federal de la FORA contestaba con otra carta, firmada por su secretario Sebastián Marotta. Allí decían que “nada justifica” el “tono de agria admonición”. Luego le recriminaba al PS esas “solicitudes inoportunas… que repugnan a la naturaleza de la organización obrera”. Para los sin- dicalistas “salir de la prescindencia” era perjudicial a la clase obrera organizada, y hacía balance que “es desde que se afirmó colectivamente su propósito de desarrollarse autónomamente y prescindir de los partidos y sectas cuando pudo la FORA ofrecer el magnífico espectáculo de su extraordinario desarrollo”. Luego dicen que así como la FORA también realiza “una política de clase”, “no es desconocido para nadie que en el seno de la FORA existen muchos y valiosos elementos que discuten y aún le desconocen a ese partido aquel carácter”. Obvia referencia al recientemente creado Partido Socialista Internacional, que ese mismo año cambió su nombre por el de Partido Comunista, y al escindido Partido Socialista Argentino de Alfredo Palacios, ambos con presencia en el Consejo Federal de FORA.