Familiares, sobrevivientes y amigos de víctimas de Cromañón se reunieron en el santuario ubicado en la intersección de Ecuador y Bartolomé Mitre para denunciar una operación de prensa llevada adelante por el gobierno de la Ciudad, quien afirmó que los padres "están de acuerdo con levantar el templo que recuerda a los muertos".
Los distintos oradores del acto hicieron sentir su malestar por las infundadas declaraciones del jefe de Gobierno, Mauricio Macri, y de la vicejefe, Gabriela Michetti, quienes confirmaron en distintos medios de prensa que la apertura al tránsito de la calle Bartolomé Mitre se había consensuado con los familiares de las víctimas de la tragedia del barrio de Once.
En este sentido Nilda Gómez de Benítez desestimó de manera absoluta el acuerdo con las autoridades de la ciudad de Buenos Aires y justificó el motivo de la reunión para "desmentir categóricamente al gobierno de Macri".
Por otra parte agregó que "no hay consenso con los padres para abrir la calle. No existe ningún consenso, ninguno de nosotros se reunió ni con Gabriela Michetti, ni con Mauricio Macri. Por eso es que estamos acá para desmentir" repitió, categóricamente.
A su turno, Diego Rozengardt recordó los ataques de los que son víctimas desde hace más de dos años los familiares como así también "la deslegitimación de la palabra y el enfrentamiento con el poder político".
En referencia al avance de la causa por el asesinato de 192 personas Rozengardt aclaró "tenemos hoy un juicio que no comienza, no tenemos a ningún acusado en la cárcel. Tenemos un destituido que fue restituido, no tenemos nada en las manos los familiares" y remarcó "lo único que tenemos es este lugar, este espacio", para dejar en claro que no piensan abandonar el lugar.
Otro de los representantes que tomó la palabra fue el doctor José Iglesias padre de una de las víctimas, quien se mostró sorprendido por las operaciones de prensa de las que "estamos siendo objeto con motivo de la calle, cada dos o tres semanas” refiriendo al reclamo de los vecinos y refiriendo a que los padres han acordado con el gobierno determinadas actitudes.
En consonancia con todos los presentes, afirmó que "este es el acuerdo de los padres, acá está el consenso y además, estamos muy por encima de una mera cuestión de tránsito. Se respeta el derecho de los vecinos y los derechos del tránsito", concluyó.
02 de octubre de 2010
