En Francia, el Nuevo Frente Popular (NFP) dio un batacazo al ganar el balotaje en las elecciones parlamentarias a la Asamblea Nacional el domingo 7/7. El partido de Macron salió segundo, y el de la ultraderechista Marine Le Pen bajó al tercer lugar, tras haber ganado la primera vuelta la semana pasada. Ninguna de las fuerzas tiene mayoría como para designar al primer ministro.
El Nuevo Frente Popular es una alianza conformada tras las elecciones al Parlamento Europeo por La Francia Insumisa (LFI), el Partido Socialista (PS), el Partido Europa Ecología Los Verdes (EELV), el Partido Comunista (PCF) y otras organizaciones de izquierda.
En París y otras ciudades francesas, tras conocerse la victoria del NFP, se realizaron grandes manifestaciones callejeras de festejos populares. En algunas, como en la que participó Jean-Luc Mélenchon, el líder de Francia Insumisa, la multitud cantó el himno de los trabajadores de todo el mundo, La Internacional.
La preocupación en grandes masas por el triunfo en primera vuelta del partido de Le Pen, con posiciones fascistas contra los derechos de los inmigrantes, el colectivo LGTB y las conquistas democráticas, volcó a estas elecciones a millones de personas, con una participación sin precedentes para Francia, del 63%.
En la Asamblea Nacional, el parlamento francés, el Nuevo Frente Popular obtuvo 182 escaños, mientras que Ensemble, del presidente Emmanuel Macron logró 163 bancas. El Reagrupamiento Nacional de Marine Le Pen quedó tercero, con 143 parlamentarios.
Con este resultado, se abre un período de inestabilidad, ya que vendrán las negociaciones para un nuevo primer ministro. Por ahora, Macron ratificó al actual, de su partido, que había presentado la renuncia.
Para esta derrota de la ultraderecha fue fundamental el acuerdo del recientemente conformado NFP con el partido de Macron en algunos distritos, en el que ambas fuerzas bajaron al candidato que había salido segundo en la primera vuelta, para reforzar al que había ganado.
En la campaña electoral para esta segunda vuelta se realizaron grandes movilizaciones antifascistas en toda Francia, y se pronunciaron por el NFP gremios, organizaciones estudiantiles, sociales, y muchas personalidades del ámbito de la cultura y el deporte. Kylian Mbappé, tras el triunfo de la ultraderecha en la primera vuelta, había convocado a “concurrir masivamente a votar”, porque “No podemos dejar el país en manos de esta gente”.
Entre los puntos programáticos del NFP está revertir una serie de medidas tomadas por el gobierno de Macron, como las reformas de las pensiones y para la inmigración, favoreciendo la legalización de estos últimos y bajando la edad de jubilación. También plantea aumentos del salario mínimo y poner límites a los precios de los productos básicos.
El triunfo del NFP causó alegría en los sectores populares en todo el mundo, y desmiente la afirmación hecha por Milei del avance de la ultraderecha en toda Europa.
hoy N° 2017 10/07/2024