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04 de enero de 2017

A fines del año pasado, mediante telegramas y llamados telefónicos fueron despedidos 400 trabajadores de distintos programas del Ministerio de Educación y Deportes, elevando a 3000 la cifra de personal dado de baja, por el levantamiento de áreas. El ministro de Educación, Esteban Bullrich, “está de vacaciones”.

Despidos en el Ministerio de Educación

Ciudad de Buenos Aires

Tras conocerse los despidos en el Ministerio, se realizaron asambleas y se organizó una permanencia en las oficinas, hasta el 31 de diciembre. Al querer ingresar el 2 de enero, los trabajadores se encontraron con todos los accesos vallados y con la policía federal ocupando puertas y pasillos. Los trabajadores fueron golpeados al intentar entrar, incluso delegados gremiales y personal que aún continúa en funciones.

Tras conocerse los despidos en el Ministerio, se realizaron asambleas y se organizó una permanencia en las oficinas, hasta el 31 de diciembre. Al querer ingresar el 2 de enero, los trabajadores se encontraron con todos los accesos vallados y con la policía federal ocupando puertas y pasillos. Los trabajadores fueron golpeados al intentar entrar, incluso delegados gremiales y personal que aún continúa en funciones.

Además de los despidos, los trabajadores denuncian que el macrismo quiere cerrar el Programa de Nacional de Formación Permanente “Nuestra Escuela”, favoreciendo institutos de formación privados.

El martes 3 se organizó un acto y un abrazo frente al Ministerio, convocado desde ATE Capital, CTERA y Suteba. La Junta Interna de ATE Educación responde a la Verde y Blanca que dirige el secretario general de ATE Capital, Daniel Catalano.

El acto se transformó en un desfile de ex funcionarios kirchneristas (estuvieron hasta el ex ministro de Educación Sileoni y el responsable de Cromañon Aníbal Ibarra) y los protagonistas del conflicto, los trabajadores despedidos, quedaron secundarizados a un costado del palco.

La respuesta a la convocatoria del abrazo fue masiva, pese a la fecha y la amenaza de lluvia, lo que muestra la voluntad de lucha por la reincorporación de los despedidos, y para impedir que se profundice el ajuste que está llevando adelante en el Estado el gobierno de Macri.