Noticias

27 de febrero de 2013


 

Docentes: un gran paso adelante

Masivo paro nacional garantizó el no inicio

El 25 de febrero los trabajadores de la educación realizaron un masivo paro nacional en un no inicio por 24 horas en todo nuestro país. Paro al que adhirió ATE a nivel nacional y fue acompañado por una importante movilización de docentes y estatales en la Capital Federal convocada por la CTA de la provincia de Buenos Aires, que realizó un combativo acto frente a la Casa de dicha provincia.

El 25 de febrero los trabajadores de la educación realizaron un masivo paro nacional en un no inicio por 24 horas en todo nuestro país. Paro al que adhirió ATE a nivel nacional y fue acompañado por una importante movilización de docentes y estatales en la Capital Federal convocada por la CTA de la provincia de Buenos Aires, que realizó un combativo acto frente a la Casa de dicha provincia.
Es el segundo paro nacional docente realizado contra la política salarial del gobierno de Cristina Kirchner, y el primero que arranca con un plan de lucha desde el primer día de clases.
Esta lucha es una nueva manifestación de la férrea y creciente voluntad de las mayorías populares de enfrentar la decisión política del gobierno nacional y los provinciales de descargar la crisis sobre las espaldas de los trabajadores y el pueblo. Sin lugar a dudas las luchas del 2012 estimularon la continuidad de las acciones que alcanzaron un punto culminante con el parazo nacional del 20 de noviembre y marcaron el profundo descontento que se expresa en los más variados sectores sociales, entre ellos los docentes que vieron muy devaluados sus salarios y se prepararon para luchar.
Esa voluntad pudo más que las maniobras del gobierno nacional y de las direcciones sindicales asociadas a su política, como la dirección de Ctera. Su dirección planificó sus acciones para evitar la lucha nacional y provincializar los conflictos salariales de acuerdo con las necesidades políticas del kirchnerismo para hostigar y subordinar a algunos gobiernos provinciales. Esperó a hasta último momento la convocatoria al paro nacional, porque recién tomó la decisión en el Congreso Nacional del sábado 23. De hecho limitó las posibilidades de un paro exitoso en las provincias que habían cerrado la negociación o no la habían concluido.
Señalamos que existían condiciones en los trabajadores que hartos del robo inflacionario, de los impuestos, del aumento de los servicios, del impuesto a los salarios, etc., se preparaban para el no inicio. Así fue y derrotaron las maniobras. Un gran paso adelante.
Las medidas continuaron al día siguiente en Buenos Aires, Santa Fe, Mendoza, Neuquén, Catamarca, Tierra del Fuego, Chaco, Misiones, Entre Ríos, Corrientes y Santiago del Estero.
En Misiones la UDPM, gremio cuya secretaria general es diputada nacional del kirchnerismo, no adhirió al paro convocado por la Ctera, pero llamaron al paro el MPL, COBA y Udnam. Además los otros gremios docentes –Sadop, Uda y Amet–acompañarán la medida de fuerza.
Una gran batalla se desatará en la provincia de Buenos Aires por la situación creada entre el gobierno de Cristina y el de Scioli. Los trabajadores estatales: docentes, auxiliares, trabajadores de la salud, municipales, la CTA de Micheli, los gremios de la CGT como Udocba y Soeme, la FEB, entre otros, continuarán las medidas de fuerza. Debemos lograr que éstas se realicen en el más amplio marco de unidad de acción para evitar cualquier posibilidad de maniobra de las derechas, que expresan tanto Scioli como Cristina.
La clave del triunfo, como ocurrió con la derrota del intento de fraccionar el aguinaldo, está en el protagonismo de las masas estatales, en el marco de la amplia unidad y la mayor democracia desde las bases con asambleas en los lugares de trabajo, cuerpos de delegados que garanticen la continuidad de la lucha.
Esta lucha debe ganar el corazón de la comunidad, tanto educativa como la que depende de la salud pública y la asistencia social. A ello contribuirá la marcha del 14 de marzo al Ministerio de Trabajo convocada por la CTA Micheli y la Multisectorial, CGT Moyano y CGT Azul y Blanca, y sobre todo marchar a un paro nacional de 36 horas como propone la Corriente Clasista y Combativa. Único camino para que la crisis no la paguen los trabajadores.
Avanzar en la lucha por resolver las necesidades inmediatas de nuestro pueblo, lograr paritarias libres sin techo y salarios acorde con el valor de la canasta familiar para los trabajadores ocupados, jubilados y desocupados.