Mediante la resolución 1103/2020, se deja sin efecto lo establecido en el artículo 3 de la resolución del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social 207/20. Esta medida es inadecuada y resulta un retroceso que atenta contra el cuidado de la salud de la población, pues la situación sanitaria no se ha modificado en cuanto a cantidad de contagios y posibles brotes, porque con esta medida somos las mujeres las más perjudicadas ya que después de la jornada laboral somos nosotras las que debemos atender a nuestras niñas y niños, y porque al no funcionar escuelas ni guarderías nos desprotege y obliga a que cada cual resuelva como puede.
Al iniciarse la pandemia la resolución 207/20 posibilitó a uno de los progenitores no asistir al trabajo para quedarse al cuidado de hijas e hijos menores, lo que significa un avance sobre la idea respecto a quien corresponde la crianza y cuidado de los mismos.
La mayoría de las licencias fue solicitada por mujeres, quienes en contexto de pandemia, extremaron los cuidados de salud, trabajaron en las tareas escolares con sus niñas y niños, en la contención emocional de la familia y realizaron ellas mismas teletrabajo desde el hogar, entre otras tareas.
Como venimos analizando el trabajo doméstico, pilar de desigualdad que sufrimos las mujeres históricamente, aún recae sobre nosotras y se vio sobrecargado y sobre exigido en estas circunstancias.
Esta pandemia, indudablemente, puso al descubierto lo que ya existía y se agravó aún más : 1) el contexto socio económico que aumentó las condiciones de desigualdad. 2) el alto porcentaje de hogares a cargo de mujeres, algunas con magros salarios y la mayoría con trabajos informales que no perciben ingresos durante este periodo y que a su vez tienen a su cargo el cuidado de sus familias reforzando y reproduciendo la división sexual del trabajo y 3) se demostró que el hogar es el lugar más seguro para enfrentar el Covid 19 pero no lo es para las mujeres víctimas de violencia.
Pero hoy la realidad muestra que la crisis sanitaria continúa, crecen los contagios por el Covid y desde el gobierno se evalúa tomar medidas restrictivas de la circulación para evitar que el rebrote se convierta en la segunda ola que es mucho más brava y nos agarra en una situación económica más comprometida ya que el gobierno suspendió ayudas como el IFE y ATP.
Por lo tanto, esta decisión de dar de baja a las licencias por cuidados de hijas e hijos menores de edad se torna muy problemática a la hora de pensar dónde dejar a las y los niños ya que no se han previsto opciones públicas o estatales, lo que implica que las familias deberán destinar dinero de los ya magros salarios para pagar ese servicio.
Estamos en el medio de la batalla sanitaria, que las mujeres no seamos quienes tengamos que decidir entre trabajo y salud, en esta contradicción, lo principal es la salud, por lo tanto sería un retroceso dar de baja esta licencia que demostró ser una herramienta muy importante a la hora de cuidar y cuidarnos.
Comisión Nacional de Mujeres
Hoy N° 1849 27/01/2021
