La defensa del derecho de propiedad es la ley suprema de la burguesía. A fines de 1922, la Corte de Apelaciones del Distrito de Columbia (EEUU), al declarar la inconstitucionalidad de una ley que establecía el salario mínimo para las obreras, sostuvo: “De los tres principios fundamentales que sustentan el Estado y para los cuales el Estado existe –protección de la vida, de la propiedad y de la libertad– el más importante es la propiedad”.
02 de octubre de 2010