Los días 8, 9 y 10 de octubre se calcula que más de 60 mil mujeres colmarán la plaza hotelera rosarina y poblarán las decenas de escuelas destinadas a alojarlas para desarrollar durante los tres días una inédita experiencia de debate y talleres referidos a cuestiones de género.
Los días 8, 9 y 10 de octubre se calcula que más de 60 mil mujeres colmarán la plaza hotelera rosarina y poblarán las decenas de escuelas destinadas a alojarlas para desarrollar durante los tres días una inédita experiencia de debate y talleres referidos a cuestiones de género.
Mercedes Meier es diputada provincial santafesina, está a punto de ser madre por primera vez y como hace 11 años volverá a participar de la experiencia que, como suelen decir las mujeres que asisten “algo cambia para siempre en cada mujer que participa. El ENM se convirtió en un fenómeno único en el mundo: miles de mujeres, distintas como somos, nos encontramos cada año para compartir nuestras experiencias, conocernos, cuestionarnos, e ir entendiendo por qué nos pasan ciertas cosas a nosotras. Es un encuentro, no un congreso, es decir que no hay una mujer que “nos explica” cómo es serlo, o qué tenemos que hacer”, aclara Meier quien en la última sesión tras anunciar su licencia por maternidad invitó a sus pares a vivir la experiencia de participar de un Encuentro.
Sobre el desarrollo del Encuentro, desde la organización explican que su funcionamiento “horizontal, autogestionado, autoconvocado y autofinanciado”, ya que desde todo el país en los meses previos las mujeres se organizan y juntan los fondos necesarios para viajar. Además aclaran tiene un carácter federal y que su espíritu central es la democracia.
Según consigna la web del Encuentro: “Los talleres rompen con lo que nos acostumbran a ver, donde algunos hablan y otros solo escuchamos en silencio. Los talleres son soberanos, lo que se discute pertenece solo a las mujeres que participan del mismo. Tienen como modalidad el consenso, para garantizar que todas podamos expresarnos, no se vota”.
En cada encuentro hay más 250 talleres, con más de 70 temas vinculados a las cuestiones de género. Hay talleres sobre mujer y violencia, mujer y trabajo, joven mujer, sexualidad, lucha contra la droga, trata de personas, anticoncepción y aborto, mujer originaria entre otros. Desde la web del encuentro se puede acceder a la lista de los talleres.
“Cada una elige uno donde comparte varias jornadas. En los últimos encuentros los más concurridos fueron los de Violencia y los de Trata. Evidentemente son los temas que más nos preocupan, atraviesan y convocan”, cuenta la compañera de banca de Carlos Del Frade que repite lo que muchas asistentes históricas a los encuentros o “encuentreras” como se definen suelen decir: “algo cambia en cada mujer que participa. Digamos que cuando volvés de un Encuentro, en tu casa o trabajo los problemas siguen, pero nos volvemos con herramientas que nos ayudan a mirarlos de otra manera para resolverlos”.
El impacto social de los Encuentros
Con respecto al impacto social y político que este encuentro tiene en la sociedad argentina la diputada del Frente Social y Popular asegura que así como “el encuentro nos transforma a nosotras mismas, también va transformando la realidad. Se convirtió en el hecho político más importante del momento, y creció de manera agigantada en los últimos años, al ritmo de nuestros sufrimientos como mujeres. No es casualidad que en la Argentina se haya dado semejante movilización el 3 de junio de 2015 bajo la consigna de “Ni una menos”. Una movilización masiva, en cada plaza de la Argentina donde pudimos hacer visible una de las cosas que más nos atraviesa: la violencia hacia las mujeres”, explica Meier.
Con respecto a su rol como legisladora y al debate de la legislación con perspectiva de género en la Argentina asegura que se avanzó con la sanción de normas como la Ley de Divorcio, Ley contra la violencia familiar, Ley de Salud Sexual y Reproductiva, Ley de Ligadura de Trompas, Ley de Protección Integral para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia hacia las Mujeres, Ley de Trata, inclusión de la figura del femicidio en el Código Penal, etc. “Estas leyes no son otra cosa más que consecuencia del avance del movimiento de mujeres, que se expresa cada año en los Encuentros. Desde ya que, garantizar que esas leyes no queden en letra muerta también es un desafío, que no lo lograremos sin luchar”, afirma.
Un encuentro teñido de la situación del país
Cada encuentro tiene, como cualquier hecho político masivo y de tanta relevancia, un tinte vinculado al momento que atraviesa el país. En este caso Mercedes Meier asegura que “se da en un marco donde los sufrimientos de las mujeres se agudizan. Hace unos días dieron a conocer la altísima cantidad de pobres que hay en nuestro país. La desocupación, el ajuste, los tarifazos, hacen que cada vez cueste más llegar a fin de mes, llevar un plato de comida a casa. Todas esas cosas las sufrimos varones y mujeres, pero sobre nosotras caen de otra manera.
“Es muy bueno que el Encuentro se haga este año en Rosario, porque lo va a acercar a muchas mujeres que aún no lo conocen. Además en nuestra provincia tenemos casos emblemáticos como el de Paula Perassi o Chiara Páez que ya son de trascendencia nacional. Los puertos privados instalados en el Paraná, la mayoría en manos de empresas extrajeras, sin los controles suficientes generan un contexto favorable para la prostitución, el tráfico de drogas y de personas, por lo que la presencia de miles de mujeres el fin de semana nos puede ayudar a visibilizar esa situación para poder revertirla”, concluye Meier.