Secundarios
Los secundarios marcaron un camino y contagiaron a todos. A pesar de los aprietes y las amenazas del macrismo (ahora dicen que las clases van hasta el 30 de diciembre) ya empezaron a arrancar soluciones concretas. Por ejemplo $8 millones para el Colegio Mariano Acosta. En el colegio Cornelio Saavedra se logró, con el protagonismo de la mayoría de los estudiantes mediante el cuerpo de delegados con mandato, una respuesta a casi todos los reclamos. Esto es la asignación de más de $4 millones para infraestructura (estufas, bancos, aulas nuevas, etc.), material didáctico, más de 500 becas y viandas. La organización de los estudiantes con el Cuerpo de Delegados es la garantía para seguir el inicio de las obras y si no se cumple volver a tomar medidas.
Bullrich, el ministro de Educación de la Ciudad declaró que el conflicto tenía los días contados, pero los estudiantes, con el impulso de los triunfos siguen adelante, con un acampe frente al Ministerio de Educación esta semana, y con tomas en algunos lugares por una respuesta a todas las demandas y por una salida popular a la crisis política de la Capital Federal.
En el IUNA
Los consejeros vinculados al kirchnerismo fueron en las asambleas a proponer que se levanten las tomas con el argumento de que se estaba haciendo política y no se buscaba una solución, pero en la mayoría de las sedes las medidas continúan exigiendo la compra de edificios en condiciones dignas. Las sedes son todas alquiladas, los estudiantes no entran y en algunos casos se inundan y se electrifican las paredes por lo que hay que suspender las clases, ¿Dónde está la política “progre” de los K para los artistas?
Dibern, el secretario de Políticas Universitarias, arrancó diciéndole a los estudiantes que sólo se podía alquilar un nuevo edificio para Audiovisuales (el lugar que está en peores condiciones). Se rechazó esa primera propuesta, y en las últimas reuniones tuvo que proponer la compra del espacio para una nueva sede y el alquiler de lugares más grandes para el resto de las carreras.
Arquitectura
La semana pasada, miles de estudiantes y docentes de la FADU se volcaron a las calles contra el recorte y por más presupuesto. Se realizaron 11 clases públicas frente al Rectorado de la UBA con la participación de más de 1.000 personas, junto a decenas de clases públicas más en la Facultad. Se prepararon cientos de pancartas y remeras para llevar a la marcha del 16. Incluso, docentes y estudiantes de algunas cátedras destinaron el tiempo de su clase para preparar stenciles. Además, la AGD-FADU y el Ceadig editaron un boletín informativo sobre la situación.
Producto de toda esta movilización, el Rectorado tuvo que salir a decir que solucionaría alrededor de 150 de los cargos docentes recortados. Sin embargo, docentes y estudiantes siguen en lucha, porque quedan cientos de cargos docentes sin resolverse, al tiempo que reclaman a las autoridades de la Facultad que se cumpla con las 15 resoluciones sobre becas, comedor, curso de verano y juntas de carrera, entre otras.
Ingeniería
Al cierre de esta edición cumplía dos semanas la toma del Decanato, ratificada por más de 1.000 estudiantes en asambleas de curso y generales, en reclamo de un plebiscito sobre las PPS, parte de la Coneau. La toma del Decanato, que viene contando con la participación de cientos en clases públicas y otras actividades, ya es un éxito porque logró abrir en todos los cursos el debate sobre las Prácticas Profesionales y la Coneau. A la vez, los estudiantes resolvieron proponer a la Gremial Docente la realización de un plebiscito conjunto con el Centro de Estudiantes frente a la falta de respuesta al pedido por parte de las autoridades.
Filosofía y Letras
La semana pasada se sostuvo la toma en medio de una dura disputa con las autoridades de la Facultad, subordinadas al kirchnerismo. Argumentando explícitamente que no debía mezclarse el reclamo de los secundarios con el de la UBA y defendiendo la política educativa del gobierno nacional, las autoridades convocaron y se movilizaron junto a las agrupaciones K a la asamblea del lunes, intentando que se levante la toma. Sin embargo se encontraron con una asamblea masiva (más de 1.000 estudiantes) que no aceptó los intentos del kirchnerismo de instrumentar o desarticular la lucha.
Se votó que las autoridades participaran sólo si tenían alguna respuesta a los reclamos y luego se retiraran de la asamblea. La mayoría de las intervenciones criticaron la política del gobierno nacional. Finalmente se ratificó la toma en forma casi unánime.
Sociales
Con asambleas conjuntas de más de 1.000 estudiantes, seguía la toma de las 3 sedes de Sociales, por el edificio único. Fue muy importante la columna de la Facultad en la marcha del 16 de septiembre.
El rector y los decanos, contra las tomas
Sumándose a las maniobras del kirchnerismo contra las tomas en la UBA, el Consejo Superior votó una resolución contra la lucha de estudiantes y docentes. Fue publicada como solicitada en todos los medios con la firma del rector Hallú y los decanos de las 13 facultades. En ella no sólo se critican las tomas, sino que se defiende la política educativa del gobierno nacional, en particular sobre el presupuesto asignado para infraestructura, uno de los ejes del reclamo.