1. Un 8 de marzo masivo y opositor
Levantaron las banderas de la lucha contra su doble opresión, agravada por la política macrista. Crecen los reclamos para un paro activo y multisectorial.
El 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer Trabajadora, el país fue conmovido por actos y marchas impresionantes. Y por un tercer paro nacional de mujeres, que también se efectuó en más de 60 países. Fue extraordinaria la multitud que desbordó la Plaza y la avenida de Mayo, y las diagonales. Hubo una gran columna de mujeres trabajadoras con compañeras de la CCC, la CTEP, Somos Barrios de Pie, la CGT y las dos CTA.
Fue una jornada que levantó las banderas de la lucha contra la doble opresión que sufren las mujeres, junto a otros sectores discriminados por su diversidad de género. Y fue un masivo repudio a las políticas macristas que han agravado enormemente esos sufrimientos.
Están a la cabeza de la lucha contra el brutal crecimiento del hambre –en familias que suman tres millones de personas y sus hijos–, su discriminación laboral, la violencia de género, los femicidios y demás banderas de lucha.
Los Cayetanos van a una conferencia de prensa, en la que la CCC lleva las decisiones de su gran Plenario Nacional, de continuidad del plan de lucha, frente a la sordera del gobierno frente al hambre y los demás reclamos.
La impresionante movilización y el paro de mujeres, el paro nacional docente con grandes marchas y actos, han dado impulso al reclamo de los cuerpos de delegados, comisiones internas, sindicatos, corrientes sindicales y centrales de trabajadores, reclamando un paro nacional activo y multisectorial que enfrente el hambre, el ajuste, la entrega y la represión macristas.
2. El genocidio silencioso del hambre
Hay 3.400.000 hambreados por un gobierno arrodillado ante el FMI, mientras el país produce alimentos para 400 millones de personas.
Marcos Peña, el jefe del Gabinete de Macri, declaró que “hacen las cosas bien porque, de lo contrario, sería faltarle el respeto al FMI”. Para no faltarle el respeto al FMI empujaron al hambre a tres millones y medio de personas, y a que la mitad de los niños y jóvenes estén mal nutridos, que muchos más no puedan estudiar ni conseguir trabajo y sean empujados a la esclavitud de la droga y la trata. La jubilación no cubre ni la mitad de las necesidades de nuestros mayores. El macrismo se arrodilla ante el FMI provocando un genocidio silencioso de los mayores, las familias pobres y los pibes.
Con la recesión provocada por la política macrista, las automotrices imperialistas, GM, Fiat, Renault, VW y otras, que ganaron fortunas, descargan la crisis con despidos y suspensiones masivas y provocan el cierre de cientos de Pymes. Miles de trabajadores van a la calle, crecen sus luchas, en muchos casos de obreros y patrones de Pymes.
La política macrista agravó la crisis de la mayoría de las economías regionales y destruye la industria y el comercio nacionales. Lo denuncian organizaciones como Coninagro y la UIA.
Macri miente descaradamente. Dijo que “ya está bajando la inflación”. Cuando en marzo y abril vienen sus tarifazos al gas, el agua, la electricidad. “Estabilizamos el dólar”, mintió el ministro Dujovne, y en pocos días hubo tres nuevas subas de la moneda yanqui. La suba del dólar y el aumento de las tasas de interés, provoca aumentos en todo lo que consume el pueblo y agrava el cierre de fábricas y comercios.
Después del hachazo a los salarios, Macri quiere paritarias ajustadas “a la inflación futura y sin cláusula gatillo”, presionando con el chantaje de los despidos.
3. El desgaste de Macri y el entrevero de Cambiemos
Espionaje macrista y yanqui para el chantaje y la corrupción.
El desgaste político de Macri y su gobierno va convirtiendo a Cambiemos en una bolsa de gatos. Carrió acusando a Franco Macri (padre de Mauricio) y a Calcaterra (primo y socio de Mauricio) entre los grandes corruptos, en el gobierno anterior y ahora. El radicalismo de Córdoba rechaza la candidatura de Negri, lo quiere llevar a Mestre. Los tres gobernadores radicales desdoblaron las elecciones de sus provincias, para que no los arrastre el bajón de Macri. “Por ahora el radicalismo continuará en Cambiemos”, amenazó Federico Storani.
Los escritos presentados al Congreso por el juez que investiga al operador judicial D’Alessio, amenazan con un nuevo escándalo político. En la casa de D’Alesio se encontraron expedientes secretos, armas, dispositivos de espionaje y documentos oficiales, que señalan la actuación ilegal de servicios de inteligencia macristas y extranjeros en negocios clave. Involucran a funcionarios, jueces, fiscales y periodistas en chantajes por dinero y otros delitos.
La brutal represión a los feriantes de San Telmo (Capital Federal), como otros hechos, muestran la verdadera cara del macrismo, que refuerza el aparato represivo para su objetivo de sacar al pueblo de las calles.
El crecimiento del malhumor, la bronca y las luchas, hacen que el desgaste de Macri arrastre a los que están “pegados” a él, como Vidal, que ya no tendría su reelección asegurada. Esto fue tema de reuniones de las cúpulas del PRO y Cambiemos.
4. Un frente para derrotar a Macri en las calles y las urnas
Elecciones a gobernador, las enseñanzas de Neuquén. En las calles y en las elecciones, acumulamos fuerzas para dar vuelta la tortilla.
La lucha en las calles, con jornadas históricas como este nuevo 8 de Marzo de las mujeres, sigue imponiendo las emergencias y las necesidades del pueblo en el escenario político, y castigan duro al macrismo.
La calle también influye en las elecciones. El pueblo neuquino derrotó al candidato de Cambiemos, Horacio “Pechi” Quiroga: salió tercero con solo el 15% de los votos. El macrismo se había ilusionado por el triunfo de Cambiemos en las elecciones de Neuquén del 2017, ahora quedó tercero. Se impuso el MPN, con el 39,9% de los votos, Es el partido que gobierna la provincia desde hace 63 años. Ganó con un poderoso aparato y cinco listas colectoras. Es una fuerza conciliadora con el macrismo, del que recibió apoyo.
Unidad Ciudadana Frente Neuquino, la fuerza encabezada por Ramón Rioseco, en la que participa el PTP, fue segunda con 96.172 votos (26%). Con un gran esfuerzo de compañeros, amigos y aliados, el frente jugó un papel fundamental para la derrota macrista, lo que deja enseñanzas.
La unidad en un gran frente para derrotar a Macri en las calles y las elecciones, exige unir lo que es distinto, respetando las diferencias. Diferencias que se expresen en elecciones internas, que permitan la conformación de las listas en forma democrática, y un programa que aborde el hambre y demás reclamos populares. No para volver al pasado sino apuntando al futuro. Un frente sin sectarismos, público y equitativo para todas las fuerzas que lo integren.
Se realizó el Congreso Nacional del PJ. Aprobó la formación de un frente nacional y popular, con fuerzas políticas y sociales, para derrotar a Macri. Una delegación llevó los saludos del PTP (ver pág. 4).
En las calles y en las urnas, para dar vuelta la tortilla con otra política y otro gobierno, el PCR acumula fuerzas para acabar con la dependencia y el latifundio oligárquico, y su Estado podrido, cada vez más mafioso y corrupto, y conquistar la patria nueva, en la que los trabajadores, los campesinos y el pueblo sean los dueños del poder.
Escribe Ricardo Fierro