Sorpresa, mucha sorpresa, generó la masividad y combatividad del encuentro de productores agropecuarios de FAA realizado en Arroyo Seco el martes 6. Para los organizadores fue una clara señal de que la gente no está dispuesta a soportar la política de “castigo infinito” del gobierno nacional hacia el sector.
Los oradores, además de señalar “que estaban agotados los intentos de diálogo”, cuestionaron en duros términos a una parte de la dirigencia del agro por considerar que está más preocupada en las elecciones de octubre que en resolver los acuciantes problemas del sector.
La mayoría de las propuestas estuvieron orientadas a retomar las medidas de fuerza, por lo que se resolvió: 1) impulsar un nuevo paro agropecuario con cese total de comercialización para la última semana de enero o la primera de febrero, 2) realizar una protesta en Villa Eloísa a concretarse cuando el Rally Dakar pase por esa localidad, 3) enviar la solidaridad a los trabajadores de Paraná Metal de Villa Constitución, que están en lucha contra los despidos.
Estas iniciativas fueron llevadas por los directores de FAA Omar Barchetta y Pablo Orsolini a la reunión de la Mesa de Enlace del día 7. Las demás entidades la desestimaron, ya que consideraron, como sostuvo Biolcatti, que “era una locura” hacer un paro en verano, por lo que la Mesa de Enlace, sin acuerdo de FAA, decidió dar al gobierno una tregua hasta marzo. Esta postura, que coincide con el coqueteo del mencionado Biolcatti con hombres del gobierno como Moreno, generó bronca en el seno de los federados, que se expresó en la declaración emitida por Barchetta, Peretti y Carlos Paillole del Consejo Directivo de FAA, Ana Galmarini del Movimiento de Mujeres en Lucha y los representantes de los Autoconvocados del sur santafesino, donde se ratificó todo lo resuelto por la asamblea de Arroyo Seco.
Forjar la unidad popular
Finalmente, se convocó a una reunión para el próximo 15 de enero en Villa Mugueta, donde se invitará no sólo a los productores, sino al conjunto de los sectores de la producción y el trabajo, afectados por la crisis.
Se trata de una convocatoria importante ya que está orientada a forjar la unidad popular a través de las multisectoriales, el verdadero motor de los levantamientos de 2001 en el sur santafesino. Sin dudas que el camino escogido por los productores chicos y medios es el correcto, ya que estamos en presencia de una crisis que comenzó con el campo, pero terminó extendiéndose a los pueblos y ciudades del interior afectando a chacareros, trabajadores, camioneros, comerciantes, agroindustria, etc.
