La jornada de lucha, la cuarta en estas últimas semanas, consistió en un paro general de 24 horas, el retiro de las firmas en los artículos, y una movilización, que arrancó frente a la sede de Aedba (Asociación de Editores de Diarios de Buenos Aires), en Carlos Pellegrini y Corrientes, frente al Obelisco, donde se cortó la 9 de Julio, y prosiguió a las oficinas del diario La Nación, Editorial Atlántida y Ámbito Financiero. Los trabajadores de prensa están peleando, por primera vez en 27 años, una paritaria en forma unificada. Mientras las cámaras empresarias ofrecen un miserable 24 por ciento en cuotas y sobre el básico, y $150 por colaboración, los trabajadores de diarios, revistas, agencias de noticias y sitios puntocom han acordado un reclamo de 35 por ciento de aumento, un mínimo de $7.000 de básico, $1.000 por colaboración, y $1.500 por guardería.
La marcha, coinciden todos, fue la más grande que se recuerde en la historia del gremio. Más de 1.500 compañeras y compañeros se juntaron frente a la sede de Aedba. Allí se veían pancartas y carteles del personal de diarios como Clarín, La Nación, Tiempo Argentino, Página/12 y Perfil, los de agencias nacionales como Télam, DyN, y NA, y los de las agencias internacionales ANSA, EFE, y AP, que se plegó a un paro por primera vez en Sudamérica. Las puntocom estaban representadas por los compañeros de Infonews, Minuto Uno, Infobae, y las editoriales, como Atlántida-Televisa, con carteles como “Gente… que quiere cobrar las horas extras” o “Para Ti Mamá: 1.500 pesos por guardería); Los de las revistas de La Nación, con contundentes pancartas: “Club La Nación 2×1: dos trabajadores, un sueldo”).