Desde antes del 30/12, hubo charlas, actos, folletos, volantes. En la vigilia del 29 en Plaza de Mayo se pintaron zapatillas con los nombres de los chicos. Durante el 30, se realizaron actividades propuestas por el conjunto de familiares, sobrevivientes y amigos. La muestra de fotos “Vidas robadas, sueños en Marcha” tomó las vallas de la Casa Rosada, mientras una radio abierta en Once exigía justicia.
En la Catedral hubo una homilía a cargo del cardenal Bergoglio, quien reiteró que Buenos Aires “no lloró suficiente a Cromañón… necesita paz, pero no la paz de la cosmética que tapa todo, sino la paz de la justicia”. También habló de “los intereses escondidos, cómplices de esta tragedia”, y llamó a “luchar por justicia”.
El acto en la Plaza
Ante miles de personas, ante las pancartas con las caritas de los que murieron aquella fatídica noche, se realizó el acto, que contó con más de 150 adhesiones. Organismos de derechos humanos, organizaciones barriales, partidos políticos, algunas personalidades del rock y la cultura, organizaciones estudiantiles y obreras, respaldaron y se solidarizaron con esta jornada. Quienes luchan contra la impunidad: Padres de Khevis; Comisión Carlos Fuentealba-Neuquén; desde Paraguay Coordinadora de Yacui Bolaños, casos de gatillo fácil; Asociación Civil Martín Castellucci. Una vez más, voces con bronca y emoción gritaron durante más de 15 minutos los nombres de las víctimas, seguidos con un “¡Justicia!”. Luego se leyó el documento consensuado por los distintos grupos, un verdadero aporte a la lucha contra la impunidad.
La marcha de Plaza de Mayo al Santuario
Cuadras y cuadras con más de 15.000 personas. Los cantos contra Chabán, Ibarra y la maldita corrupción daban fuerza a cada paso. Frente al Congreso, se escuchó “¡que se vayan todos!”. Partidos de izquierda acompañaron el recorrido, entre ellos, se destacó una importante columna del PCR y la JCR.
Ya en Once, se presentó la murga de sobrevivientes “Los que nunca callarán”, y se pasaron las fotos con los rostros de los pibes. Sus nombres se volvieron a escuchar justo a la hora en que comenzó la masacre en el 2004.
Esta jornada fue el resultado del trabajo en unidad de los 5 grupos que integran el Movimiento que consensuaron documentos e iniciativas para el día de la asunción de Ibarra y la liberación de Chabán, y para el 30/12.
Una jornada de unidad y lucha
El 7 fue un punto de inflexión en el avance de la justeza de la causa frente a la opinión pública de la ciudad. Continuó con la exposición de fotos en la Plaza de la República; con la Conferencia de Prensa frente a Tribunales, con motivo de la condena a un comisario y a un principal de la Superintendencia de Bomberos a cuatro años de prisión efectiva y la inhabilitación perpetua. Tuvo muy buena recepción del camión parlante por distintas zonas del centro de la ciudad, el día 29.
Al corrupto Ibarra, principal responsable político, a quien los familiares, rotándose, con su presencia y la foto de sus hijos en cada sesión de la Legislatura, le marcan a fuego su criminal responsabilidad, sólo le resta decir el 30 que los padres “necesitan un responsable”.
Nuestro Partido, y la JCR, que acompañaron desde la misma noche a los familiares y sobrevivientes, y forma parte del movimiento, compartió tanto esfuerzos en la preparación y en la jornada, como el dolor y la satisfacción del trabajo realizado.
