En la lucha revolucionaria nos encontramos con dos tipos de contradicciones, como enseña el maoísmo. Una es la contradicción con el enemigo, y otra, las contradicciones en el seno del pueblo. Son contradicciones diferentes que deben resolverse con métodos diferentes…
Si uno pregunta sobre estas cuestiones, de palabra, pareciera que todos estamos de acuerdo. Pero, en la práctica, no es así. Si subestimamos la vigilancia revolucionaria, si no damos pasos en la preparación y no jerarquizamos el trabajo entre los sectores patrióticos y democráticos de la FFAA, lo que aparece como dominante es que se subestima al enemigo. Así que tenemos que cambiar.
Este es el tratamiento que le tenemos que dar a la contradicción con el enemigo. Porque la lucha con el enemigo es sin piedad. Pero las contradicciones en el seno del pueblo y en particular las contradicciones en el seno del Partido exigen otro tratamiento.
Mao Tsetung en Acerca de la Contradicción, señala: “La contradicción entre las ideas correctas e incorrectas es el reflejo, en el seno del partido, de la lucha de clases”. Si en el partido no hubiera contradicciones, y lucha ideológica para resolverlas, la vida del partido tocaría fin, sería un partido sin alma.
Las contradicciones en el seno del Partido, la lucha de líneas, se resuelven con un método democrático, partiendo del deseo de unidad, mediante la crítica y la autocrítica, para poder alcanzar así, una unidad en un plano superior. Y así tiene que ser una y otra vez. Porque si no, es al revés: entre nosotros golpes implacables y con el enemigo, más suavecito… Pongamos las cosas en su lugar: con el enemigo es a muerte, y entre nosotros nos podemos enojar. Nos enojamos muchas veces, nos vamos a seguir enojando, pero discutimos, sobre la base de un primer sentimiento de un comunista que es unir, no diferenciarse. A partir de unir, crítica y autocrítica para ir a una unidad superior. Es difícil, pero vale la pena intentarlo…
¿Por qué camino van a avanzar las masas hacia la revolución?
El otro gran tema es ¿Por qué camino van a avanzar las masas hacia la revolución?
El Cordobazo de 1969, el Argentinazo de 2001 y la rebelión agraria de 2008 fueron grandes puebladas que bocetaron cómo va a ser la insurrección en nuestro país y nos dejaron planteadas enseñanzas y desafíos.
Como nos enseña el leninismo, a la insurrección no se llega solo con la acción espontánea de las masas, la insurrección se prepara, y ahí viene el papel que tiene que jugar el PCR como partido de vanguardia para que la clase obrera pueda jugar su rol.
Esto, en las condiciones internacionales actuales, de derrotas de las revoluciones en el mundo, es mucho más complejo y requiere una profunda discusión. Sobre todo, porque hay un bombardeo todo los días de que “el mundo cambió”, “que ya no hay faro rojo”, etc., con el objetivo de llevar al escepticismo a la juventud. Quieren demostrar que la revolución es un imposible; “lo posible, y lo sensato” sería el kirchnerismo por ejemplo, que con esa política trabaja entre los jóvenes.
Nosotros decimos orgullosos que somos comunistas y que peleamos por la revolución. Y decimos que es posible porque es necesaria: es la única forma de resolver los sufrimientos, los padecimientos y las urgencias de nuestro pueblo. Y tenemos una infinita confianza en nuestra línea y en el potencial revolucionario de la clase obrera y el pueblo argentino.
Nosotros analizamos las condiciones internacionales, no para explicar que no se puede y adaptarnos a este sistema podrido, sino que las analizamos para partir de la realidad objetiva en nuestra lucha revolucionaria.
¿Acaso no estamos hoy en mejores condiciones que los bolcheviques de Lenin en 1917, donde triunfó la revolución cuando el proletariado sólo tenía como antecedente la breve experiencia de La Comuna de París? Hoy en cambio tenemos la certeza que la revolución es posible y que la sociedad por la que luchamos se hizo realidad y significó un gran avance para toda la humanidad.
Luego del XX Congreso de 1956, cuando la contrarrevolución en Rusia llevó a que todos los partidos comunistas de América Latina empujaran la vía pacífica, en contra de la lucha armada, se hizo la gloriosa Revolución Cubana en 1959. Pese a esas condiciones internacionales, el pueblo cubano hizo posible el triunfo de la revolución en el patio trasero del imperialismo yanqui.
¿El PTP sirve para afirmar este camino?
En la Conferencia de 2010 analizamos los cambios que se habían producido en la situación política de la Argentina y, en virtud de esos cambios, definimos pelear por la personería del PTP para dar batalla al kirchnerismo también en el terreno electoral. En la conferencia se aprobó pero, en la práctica, tuvo mucha resistencia. Mucha resistencia. Mucha discusión.
¿Planteamos lo del PTP porque abandonábamos nuestros objetivos revolucionarios o justamente para afirmar un camino de triunfo para esos objetivos revolucionarios buscábamos los caminos de aproximación que nos permitieran en cada momento llegar a las grandes masas?
Nosotros nunca confiamos en que por la vía de estas elecciones tramposas se pueda lograr la liberación nacional y social. Nunca pensamos eso. Nunca le prometimos a las masas que sus problemas se resolverían votando “diputados obreros”. Por el contrario, siempre dijimos que la clase obrera y el pueblo sólo se liberarán por vía de la revolución. Lo que sí pensamos es que la revolución la hacen las masas y que si esas masas, que desde 2001 nunca abandonaron las calles, mientras seguían en la lucha, también buscaban opciones electorales, nosotros no le debíamos regalar la política, en ese terreno, a las clases dominantes.
Hubo y hay mucha discusión. Hubo ideas equivocadas que contraponían elección con revolución. O la idea de que, cuando hay reflujo, se participa de las elecciones y, cuando hay auge, se las boicotea. Pero la enseñanza es que el partido del proletariado siempre tiene que tener posición electoral. En todo caso el voto bronca era una posición electoral que se correspondía con el “que se vayan todos”. Participábamos de las elecciones con esa posición.
Pero cuando el centro de las masas que están en las calles, es ver a quien votan, para tener un papel activo no podemos tener la misma posición…
Un buen momento para crecer
Quiero decir que del 12 Congreso para aquí hemos avanzado. Este es un buen momento para crecer y poner a foco que es urgente prepararnos, y preparar a las masas para una situación que se puede precipitar. Es un buen momento para pegar un salto en las fuerzas del Partido y avanzar en su organización.
Tenemos una concepción de lucha por el poder que nos exige pensar en grande. Y para pensar en grande nos tenemos que proponer construir un gran Partido que se mueva entre las masas como pez en el agua, que sea el impulsor de un gran movimiento revolucionario en las fábricas, los barrios, las zonas agrarias, las escuelas, entre los intelectuales y que sea el impulsor de un gran frente popular, patriótico y democrático.
Tenemos con qué. Tenemos la línea aprobada en el 12 Congreso. Somos un Partido que en 46 años de historia no ha traicionado nunca al proletariado. Como dijo Roque Romero el 1° de mayo: “somos un Partido que puede mostrar todo lo que escribió, no tenemos nada que esconder. Si hasta nuestros errores y el análisis que hicimos de ellos están publicados”.
Somos un Partido que tiene como ejemplo a sus mártires y héroes. Todos aquellos que con su silencio derrotaron la tortura y la cárcel de los enemigos del pueblo y se mantuvieron, hasta el último aliento, fieles a su clase y a su Partido y salvaron al Partido. También tenemos queridos camaradas que hemos perdido, que han fallecido en estos años. Todos ellos, nuestros mártires y nuestros muertos son nuestras banderas y no los vamos a traicionar.
Estamos orgullosos de las compañeras y compañeros que han tomado la decisión de hacer suyo este Partido que lo único que ofrece es un puesto para el combate de los explotados y de los oprimidos para su liberación. Repito: El Partido Comunista Revolucionario lo único que ofrece es un puesto para el combate de los explotados y de los oprimidos para su liberación.
¿Les parece poco? Es lo mejor que cada uno de nosotros tenemos. Lo mejor de nuestras vidas.
hoy N° 2082 22/10/2025