Según las cifras oficiales con el 90,95% de las mesas escrutadas, en el partido de La Matanza, el 69,3% del padrón votó ‘positivo’ para presidente. Los votos en blanco fueron del 7,59% y los nulos el 0,69%; suma que arroja el 8,28% del total del padrón.
Sobre el total del padrón, el 23% se abstuvo de ir a votar. Si a este porcentaje le descontamos el 15% del abstencionismo estructural y le sumamos votos blancos y nulos, el voto bronca arroja el 16,28%.
Los cálculos que muestra el gobierno sólo cuentan el voto ‘positivo’, dejando afuera al voto bronca. Si vemos los votos de Cristina sobre el total del padrón, resulta que en La Matanza no obtuvo el 54,62 sino el 42%, el voto bronca se posiciona en el segundo lugar con el 16,28% y Elisa Carrió en el tercero con el 11,05%.
Es llamativo que, en algunas escuelas como en la Nº 6, aparecieran dos mesas donde el número de los escrutados coincide con el total del padrón… ¿Ninguno de los 320 hombres tuvo impedimentos para votar?; ¿las 171 mujeres llegaron a tiempo para poder escrutar? En una de las mesas de la Escuela 154, contaron 314 votos, cuando el padrón era de ¡311! En varias mesas, los presidentes se negaban a contabilizar los votos nulos. Pudimos conocer estas maniobras gracias al despliegue realizado por el PCR y la CCC de La Matanza, que les permitió fiscalizar en 30 escuelas.
02 de octubre de 2010