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08 de junio de 2011


Este es el momento para apretar

Hoy 1372 / En las paritarias de la alimentación

A comienzos del mes de mayo el congreso de la Federación de la alimentación (FTIA) resolvió paros de dos horas por turno en todas las fábricas del país con bloqueos en las puertas, pidiendo para estas paritarias un 40% de aumento salarial. El salario de la categoría menor es de $2.880 mensual.
Arrancó con una movilización muy grande el 4 de mayo de todo el país, que marchó del Obelisco a las cámaras empresarias de la alimentación, quie dirige el nefasto personaje Dr. Funes de Rioja.

A comienzos del mes de mayo el congreso de la Federación de la alimentación (FTIA) resolvió paros de dos horas por turno en todas las fábricas del país con bloqueos en las puertas, pidiendo para estas paritarias un 40% de aumento salarial. El salario de la categoría menor es de $2.880 mensual.
Arrancó con una movilización muy grande el 4 de mayo de todo el país, que marchó del Obelisco a las cámaras empresarias de la alimentación, quie dirige el nefasto personaje Dr. Funes de Rioja.
Los paros fueron muy contundentes en cada una de las fábricas y en muchas se realizaron los bloqueos como en provincia de Buenos Aires, Córdoba, San Luis, Tucumán, Jujuy, Corrientes. Daer en Capital Federal tiró para atrás y no realizó bloqueos. Esta medida se hizo por tres días consecutivos, y asustó a los monopolios y al gobierno, que a pedido de estos dispuso rápidamente conciliación obligatoria. La dirección de la Federación aceptó, y las negociaciones quedaron en manos del secretario de la FTIA, Luis Morán, y de Rodolfo Daer. Como siempre, lamentablemente las acciones se decidieron por decreto, sin asambleas en las fábricas. Esa subestimación de los compañeros debilita las negociaciones, y se refuerza que todo sale “por muñeca” de algunos. Ya llevan 25 días metidos en el Ministerio de Trabajo.
Arcor, Kraft, Nestlé, Pepsico, y Molinos son las empresas que más facturan en la rama alimentación. Ganan miles de millones, y son los más “pijoteros”; ofrecen un 24% en tres cuotas (el tope acordado por Cristina Kirchner con Moyano).
Por otro lado, las comisiones internas de Kraft y Pepsico también juegan a aislar y a dividir. Sin asambleas llaman a raquíticos cortes lejos de la fábrica, poniendo el centro en la “burocracia sindical”.
Demasiado corazón ponen los miles de trabajadores, por necesidad, por la bronca ante la inflación, y por las ganancias de las empresas, por eso cuando ven una hendija luchan a fondo.
Cuando se amenaza con salir nuevamente al paro, ante el freno de las negociaciones, las empresas proponen un aumento a partir de mayo, en tres tramos, completando en enero del 2012 un 36.8%.
El jueves 2 de junio, la Federación y Daer convocan a un plenario con gran cantidad de congresales y comisiones internas. Allí aprueban con bombos y platillos la cifra propuesta por las cámaras, y dicen que tienen que firmar ese mismo día en el Ministerio de Trabajo. Al momento que estaban anunciando el “logro” en las fábricas, las patronales, encabezadas por Arcor, presentaron otra propuesta, que no tenía nada que ver con lo que habían anunciado. Allí se trabó todo. La Federación plantea paro de 24 horas, y el Ministerio de Trabajo vuelve a decretar conciliación obligatoria hasta el jueves 9 de junio, con lo que se convierte en una medida ilegal, con el sólo objeto de trabar la lucha de los trabajadores.
En este momento, que los grandes empresarios de la alimentación “la vienen levantando con pala”, como dicen los compañeros, es el momento de apretar y profundizar la lucha en todo el país.
Desde la Primero de Mayo seguimos proponiendo asambleas en todas las fábricas, para que los compañeros tomen en sus manos la pelea por un 40% de aumento, retroactivo a mayo y en un solo pago. Por el pago de los días de huelga, y por un nuevo convenio colectivo de trabajo.