El Partido Comunista Revolucionario de la Argentina acaba de celebrar exitosamente su 13° Congreso, el primero luego del fallecimiento de nuestro querido camarada secretario general Otto Vargas. El Congreso se constituyó con delegadas y delegados del Partido de todas las provincias y zonas, el Comité Central, la Comisión de Control y la delegación de la Juventud Comunista Revolucionaria. Participaron además invitadas e invitados.
Fueron tres días de una intensa discusión protagonizada por todas y todos los camaradas, en comisiones y en plenario, se discutieron las Tesis sobre Situación internacional y nacional, Balance, Programa y Estatuto.
Enriquecidas con gran cantidad de aportes, modificaciones y agregados, fueron aprobadas por el 13 Congreso las Resoluciones sobre la Situación internacional y nacional, Balance, Programa, así como agregados en el Estatuto partidario. Trabajaremos para que las resoluciones aprobadas sean patrimonio del conjunto de las y los camaradas del Partido y la JCR, y son la guía para nuestro accionar en los tiempos que se avecinan.
El 13° Congreso finalizó con la elección del nuevo Comité Central y de la Comisión de Control del PCR.
Con gran emoción, cerramos este 13° Congreso cantando el himno de las y los trabajadores de todo el mundo, La Internacional, nuestro ya clásico “Somos los hijos del Cordobazo, los herederos de Mao y el Che”, y dando vivas a Otto Vargas y al PCR.
Presidencia efectiva y honoraria
El Congreso, tras elegir su presidencia efectiva, comenzó con un minuto de aplausos en homenaje al camarada Otto Vargas, fallecido el 14 de febrero de 2019.
A continuación, se designó la presidencia honoraria del 13° Congreso:
Marx, Engels, Lenin, Stalin y Mao, los cinco maestros del proletariado internacional. El Che Guevara y Otto Vargas.
Los mártires del PCR en la lucha revolucionaria, César Gody Álvarez, René Salamanca, Ángel Manfredi y Manuel Guerra, “y en ellos a todos los que han caído peleando por la revolución”.
Los mártires del PCR en la lucha antigolpista, mencionando a Daniel Winer y a Enrique Rusconi, y en ellos a todas y todos los camaradas muertos en esta lucha.
Los héroes de la Revolución de Mayo, los caídos en la gesta de Malvinas y los mártires del Argentinazo del 2001.
Formaron parte de la presidencia honoraria, además, todas y todos aquellos que dieron su vida en la lucha popular, y las y los que fallecieron en la primera línea de lucha contra la pandemia de Covid.
Además, las y los camaradas de nuestro Comité Central fallecidos desde el 12 Congreso: Otto Vargas, Antonio Sofía, Clelia Íscaro, Claudio Spiguel, Oscar Monzón y Rolando Navarro.
Junto a ellos, el camarada Mártires López, Fredy Mariño y la camarada Keiko, recientemente fallecida. Por todos ellos se brindó un minuto de aplausos.
Palabras de apertura del camarada Jacinto Roldán
Camaradas es una gran alegría que podamos realizar este congreso nacional de nuestro Partido. Este Congreso lo realizamos en un momento político que es difícil, complicado. Un momento político en el que se van produciendo cambios a mucha velocidad en el mundo, en América Latina y en nuestro país. Es necesario discutir y ubicar el momento político y jerarquizar la salida que peleamos. Hay fuerzas políticas que cuyo norte son las elecciones. Y nosotros, le damos una gran importancia a las elecciones en relación al objetivo que peleamos. No a las elecciones en sí.
En este proceso hemos tenido muchas complicaciones y dificultades. Sufrimos la pérdida de queridos camaradas que fallecieron en este periodo. Con la pandemia la situación era grave. Pero nosotros no paramos. Seguimos. Y esto no fue sencillo.
Crecieron los sufrimientos de las masas, a lo largo y ancho del país, de la mayoría de los que habitan nuestro suelo. Estuvimos a la cabeza de las luchas y crecieron los movimientos en los que estamos.
Ubicar al Partido como motor de los movimientos de masas donde estamos, ha sido, es y seguirá siendo un debate grande. Algunos piensan que los movimientos de masas en los que estamos son apéndices del Partido. Pero en esos movimientos, además de nosotros, hay compañeras y compañeros con distintas filiaciones políticas e ideas, que comparten con nosotros la lucha.
Si nosotros creemos que por decreto vamos a resolver la dirección de un movimiento, nos equivocamos.
Y esto también repercute en nuestros aliados y con quienes golpeamos juntos. En el peronismo está el kirchnerismo, la Cámpora, el Movimiento Evita y otros sectores. Tenemos que tener un seguimiento de nuestras relaciones, porque nuestra relación en los frentes que compartimos es unidad y lucha. Hoy nos unimos contra enemigos comunes y disputamos la dirección política de las masas. En este período hemos ido ubicando con más claridad esta relación. ¿Con qué línea avanzamos y con qué línea no?
Hemos discutido mucho. La discusión franca y abierta de las ideas políticas ayuda. Tener opiniones distintas no mata a nadie. Trenzar, tendencializar y hacer cosas por fuera de los organismos es para un partido socialdemócrata. Nosotros tenemos que tener una actitud de honestidad revolucionaria para plantear las cosas que pensamos, nos escuchemos y las discutamos.
En este Congreso tenemos que analizar aciertos y errores, para poder precisar esos errores y avanzar, pero también para defender los aciertos.
Porque en esta relación de aciertos y errores también está la dialéctica. Nada es todo bueno o todo malo. La experiencia más avanzada que tuvimos en el movimiento obrero, el Smata Córdoba, también tuvo aspectos buenos y malos. Esto no es distinto en el movimiento de desocupados, o en la FNC.
Nunca habíamos tenido un instrumento como la Federación Nacional Campesina para nuestro trabajo en el campo. Hemos avanzado en el campesinado pobre y medio. Esto es importante desde el punto de vista estratégico, porque es el aliado principal del proletariado y se incorporan no sólo a la lucha sino también al Partido y están presentes.
Crecen los factores de guerra y aumenta la rebelión de los pueblos
Se agudiza la disputa interimperialista, crecen los factores de guerra y aumenta la rebelión de los pueblos. Esta rebelión se hace sentir en todos lados.
El 22 de febrero se produjo la invasión del imperialismo ruso a Ucrania. Han pasado más de ocho meses del mayor despliegue militar posterior a la Segunda Guerra Mundial.
Ahora el imperialismo yanqui dio a conocer una nueva estrategia de seguridad nacional de los Estados Unidos en donde considera que el mundo avanza hacia un nuevo bipolarismo entre Estados Unidos y China. Es un documento que ubica a China como principal rival estratégico para las próximas décadas. Y coloca a Rusia como una potencia más de escala regional que global, y como una amenaza inmediata a un orden internacional, pero que no tiene la capacidad para poder cambiarlo. Este es el momento que estamos transitando.
Si hablamos de la Argentina, en el gobierno hay tres sectores: está Cristina Kirchner, está Alberto Fernández y está Sergio Massa. Estos tres sectores, en su relación con los imperialismos, se caen para un lado. A nosotros no nos conviene poner adjetivos antes de investigar. Son tres sectores, que tienen contradicciones entre ellos y acuerdan con el ajuste.
Si vemos América Latina, avanzan las luchas. El pueblo en Bolivia derrotó en las calles el golpe fascista. La lucha del pueblo chileno y las elecciones que llevaron a Boric al gobierno, así como procesos de lucha en Colombia, Ecuador, Perú y otros países. Con las luchas los pueblos obtienen conquistas.
Para resumir, los pueblos de América Latina están en lucha, crece la disputa interimperialista y el imperialismo yanqui ha sido golpeado.
En nuestro país se agrava la situación de las masas
En nuestro país se agrava la situación de las masas. En el 2019 el pueblo votó para salir del infierno macrista. Y tuvo ilusión en el nuevo gobierno. Pero hoy crecen los sufrimientos de las masas, y ahora se judicializa la protesta y se reprime a los que luchan, como se ha visto en la reciente represión a los hermanos mapuches en Villa Mascardi (Río Negro).
Otra cuestión importante es atender a las dificultades que tuvimos para funcionar en la pandemia. Una de las opciones era que nos comunicáramos por zoom. Tuvimos un hecho que grafica cómo operan los servicios, con lo sucedido con la camarada Julia Rosales. Le allanaron la casa sobre la base de un seguimiento de los teléfonos.
Por lo tanto, los servicios, el Estado, el enemigo, en este período, su función es acumular datos, y cuando deciden, hacen esto que hicieron. Esto lo planteo no para que no hablemos por teléfono, sino para que no le facilitemos al enemigo los datos que les sirvan para golpearnos.
Tenemos que discutir para avanzar. Ver cómo abordamos los avances tecnológicos, porque la contradicción es que me someto a esos avances, o quedo aislado. Tenemos que sacar enseñanzas de lo que hemos vivido.
En esta situación, creció la canasta familiar, el salario no alcanza. Por eso crecen las luchas por paritarias, por tierra, techo y trabajo, los movimientos de desocupados, los ocupados, los campesinos, las mujeres, los originarios, la juventud, las luchas por la soberanía nacional y las luchas por las libertades democráticas.
Todo esto nos convoca a la discusión de las Tesis para este Congreso. Tengan en cuenta que tuvimos que actualizar estas Tesis, ya que las primeras las hicimos hacia 2017. Y escribirlas no fue un paseo. Fue un gran trabajo. Además, estuvo la tarea de diseñarlas, imprimirlas y distribuirlas para que lleguen a todo el Partido. Son trabajos que no se ven, pero son importantes para garantizar que todo el Partido y su JCR discutamos la política y podamos trabajar para llegar con nuestras posiciones a las masas en toda la Argentina.
El rol del Partido
Un punto del balance de este Congreso es el rol del Partido en los movimientos en los que participamos. Otro punto es en qué centro de concentración obrera avanzamos, en qué lugares del campesinado pobre hemos crecido, en un país como el nuestro.
Si hablamos del trabajo entre los profesionales, veamos por ejemplo cómo durante la pandemia un conjunto de profesionales dieron un aporte muy importante para enfrentarla. Nuestro trabajo es escaso entre los profesionales. Tenemos que ver cómo crece, porque es una necesidad. Y tenemos que ganar a más intelectuales, en un Partido que les sea habitable, para ellos y para todos.
En este periodo avanzamos. No fue parejo. El PCR y su JCR son más conocidos. Esto no quiere decir que dirigimos todo lo que necesitamos.
Es necesario que todo el Partido y la Juventud jerarquice la relación entre la situación internacional y nacional. Porque lo que pasa acá está vinculado a lo que pasa en el mundo, y lo que pasa en el mundo repercute acá.
El trabajo entre las masas y la construcción del PCR
La dirección de un Partido revolucionario debemos luchar permanentemente por la unidad. Para pelear por la unidad hay que pelearse con dos, no con uno solo. El tema es cómo se da la lucha para unir. Para empezar a unir, hay que escuchar. Tenemos que escucharnos y discutir con franqueza.
Y acá estamos, para discutir y para ver cómo avanzamos. Para ver cómo vamos siguiendo un curso que nos permita jugar un rol decisivo desde el punto de vista de lo que peleamos, avanzar en la confluencia de las luchas y acumular fuerzas revolucionarias para cuando se abra una situación revolucionaria.
Estando a la cabeza de las luchas, peleando el protagonismo de las masas, seguimos existiendo porque hemos mantenido en alto las banderas.
Hemos sufrido persecuciones. Hemos derramado sangre. También sufrimos traiciones. Y los que traicionaron siguen operando. Transitamos un camino que ha sido duro y difícil.
Marcamos una huella, porque el comunismo y el maoísmo existen en la Argentina porque existe el PCR.
Tenemos una discusión, en torno a cómo avanzar en la construcción del PCR ¿Es arraigando en las masas o por fuera de las masas? Para ser capaces de ser vanguardia en una revolución que le permitan a la clase obrera y el pueblo conquistar el poder político. Destruyendo este Estado oligárquico imperialista, y terminar con el latifundio y la dependencia del imperialismo.
La dependencia y el latifundio son dos males que tenemos. Si no se termina con esto no resolvemos los problemas de fondo. La correlación de fuerzas es como es. No es como queremos. No es que sacamos un documento y ahí salen las masas y hacen la revolución. Necesitamos arraigar entre las masas.
Para las tareas que tenemos por delante, en un mundo que va a ser convulsivo, donde no vamos a aguas tranquilas, sino a aguas tumultuosas, este Congreso nos tiene que servir para discutir y sacar enseñanzas de los procesos para poder avanzar en un grado superior.
Vamos a discutir en las comisiones estas tesis que son muy importantes, tanto sobre la situación internacional y nacional como sobre el balance, tanto en general como en particular en cada lugar. Y tenemos que discutir el Programa, porque entiendo que tenemos que tenerlo como punto de referencia frente a las situaciones que van apareciendo. Tenemos fundamentos y argumentos suficientes en el Programa para abordar este período.
En este Congreso, además de la dirección, vamos a salir con resoluciones que son la línea que va a presidir el accionar del Partido en el próximo periodo. En una Argentina, que como dice un camarada es un país “overo”, con situaciones distintas en cada provincia.
Por eso la necesidad de integrar la línea maoísta general a cada provincia. La línea es una para todo el país y hay que integrarla. Integrar la línea general con lo específico. Y los camaradas del lugar tienen más conocimiento de lo que pasa en el lugar, del que no vive allí.
El PC decía que la línea se aplica. El revisionismo juega y aprieta. Nos meten ideas. En la Argentina ¿qué es izquierda y qué es derecha? Izquierda son los que luchan y están al frente. Pero nosotros no somos sólo luchadores. Defendemos una teoría porque decimos que estamos convencidos que para avanzar en la lucha por la revolución se necesita teoría revolucionaria. Se necesita integrar y tener un conocimiento profundo de lo que hacemos.
Como señala Mao Tsetung: “Ningún partido político que impulse un movimiento revolucionario podrá alcanzar la victoria si no tiene como guía una teoría revolucionaria, un conocimiento de la historia y una comprensión profunda del movimiento práctico”.
Las tareas que tenemos por delante son muy exigentes, y no se resuelven sencillamente. La discusión nos va ayudar a salir de este Congreso dispuestos a seguir peleando por lo que nos formamos cuando fundamos este Partido, la revolución.
Hoy N° 1936 26/10/2022