El jueves 13, cerca de 130 obreros del pescado se movilizaron a la Capital Federal para respaldar a la delegación que se iba a entrevistar, por segunda vez, con el ministro Tomada y otros funcionarios.
El contingente solidario de la CCC de la Zona Norte del Gran Buenos Aires, que llegó marchando desde Retiro, cumplió un papel extraordinario para obligar a Tomada a recibir a los obreros del pescado. En forma total y parcial, se alternó el corte de la Av. Alem, se mantuvo el retumbo de las rejas del Ministerio y de los bombos y redoblantes y sin dejarse atemorizar por la policía, se fueron anulando una a una las maniobras del Ministerio y de los comisarios que piloteaban el operativo represivo.
Tomada tuvo que recibir las planillas con 6.800 firmas de obreras y obreros que a lo largo de casi 10 días se anotaron para recibir la suma de dinero prometida para diciembre y enero. También se le entregaron cerca de 120 firmas de personalidades de Mar del Plata y del país, exigiendo que se resuelvan los justos reclamos de los obreros del Pescado.
“Mañana nos ponemos a trabajar”
Un compañero le expresó a Tomada: “En la entrevista del 22 de noviembre usted nos dijo ‘mañana nos ponemos a trabajar’ y ahora nos vuelve a decir lo mismo”, quedando en claro una vez más que el gobierno tiene otros tiempos, otras urgencias y probablemente, otros patrones a los que obedecer.
En la entrevista se habló de la necesidad de registrar a los miles de trabajadores en negro de las “cooperativas”, pero el ministro no dijo con qué convenio. Esto es parte de una maniobra de sectores empresarios, que con la complicidad de la dirección traidora del SOIP, intentan registrar con el llamado Convenio PYME (Pequeña y Mediana Empresa). Este convenio, la viceministra Rial lo defendió ardientemente, denigrando con mentiras el Convenio 161/75 por el que todos luchamos. Este convenio fue cocinado hace unos 2 años por la actual conducción del SOIP, y las cámaras, siendo “anexado” por el Ministerio al Convenio 161/75 y le permite a los empresarios(como ya lo están haciendo Valastro-Giorno, Solimeno y otros monopolios) armar dentro de su misma empresa “empresitas independientes” de 80 a 100 obreros, a las que se las encuadra como PYMES. Los trabajadores quedan así “efectivizados” con un convenio flexible que no determina horarios topes de trabajo, que establece una garantía horaria baja y prácticamente incobrable.
Sometiendo bajo amenazas de despidos, se registraron con este sistema cerca de 115 trabajadores. Esta es la forma de “reciclar” una parte de las cooperativas negreras, porque, como dice La Capital del 16-12, “es un cambio de figura laboral que los empresarios están siguiendo para no recibir más presiones”.
La pulseada continúa el 20/12
La reunión finalizó sin ningún acta, con el compromiso de seguir el jueves 20, “con menos gente”; mientras que la Asamblea Autoconvocada está considerando la propuesta de realizar para la misma fecha una marcha en Mar del Plata, sosteniendo a la delegación en Capital.