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18 de abril de 2012

Durante su visita a varios países de América Latina entrevistamos a Julia, coordinadora especial para nuestra región de la International League of Peoples’ Struggle (ILPS, Liga Internacional de Lucha de los Pueblos).

Filipinas: semifeudal y semicolonial

Hoy 1415 / Habla Julia, de la Liga Internacional de Lucha de los Pueblos (Filipinas)

—¿Qué tipo de país es Filipinas, y qué tipo de gobierno tiene?
—Filipinas es un archipiélago de 7.107 islas, ubicadas en el Océano Pacífico, al sudeste de Asia, al sur del Japón, cerca de Hong Kong y cerca de Indonesia. Tiene unos 80 millones de habitantes –la mayoría de la etnia Malay–, y otros 9 millones viven fuera del país. Más del 85% son católicos; un 4% son protestantes y otro 5% musulmanes, en el sur.

—¿Qué tipo de país es Filipinas, y qué tipo de gobierno tiene?
—Filipinas es un archipiélago de 7.107 islas, ubicadas en el Océano Pacífico, al sudeste de Asia, al sur del Japón, cerca de Hong Kong y cerca de Indonesia. Tiene unos 80 millones de habitantes –la mayoría de la etnia Malay–, y otros 9 millones viven fuera del país. Más del 85% son católicos; un 4% son protestantes y otro 5% musulmanes, en el sur.
Filipinas es un país semifeudal y semicolonial. El 75% de la población son campesinos sin tierra, muy subordinados y reprimidos por los terratenientes. Semicolonial porque, aunque físicamente los EEUU no están en Filipinas, la relación de dominación es muy fuerte; hay soldados norteamericanos haciendo ejercicios militares con el ejército del gobierno. Actualmente no hay bases norteamericanas –las bases aérea y naval que tenían en Clark y Subic fueron desmanteladas en 1991 debido a la lucha popular–, pero los EEUU controlan económica, política, cultural y miltarmente a las Filipinas.
Desde que no somos colonia de España somos un país formalmente “independiente”, pero los EEUU imponen las políticas del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, y el país es totalmente dependiente de esos organismos. Nuestra economía depende totalmente de las importaciones de productos industriales y de las exportaciones de materias primas.
Los terratenientes quieren mantener este tipo de relación, que les resulta muy beneficiosa. Entre el 1% y el 2% de la población son alcaldes, diputados, senadores, funcionarios, militares; ellos controlan todo el gobierno y el sistema, y a la vez son también terratenientes. No les interesa industrializar las Filipinas, porque no sería beneficioso para su sistema feudal.
Los españoles dominaron Filipinas durante 373 años: es el único país de Asia que fue colonia española y que tiene mayoría católica. Durante la colonia hubo muchas rebeliones. En 1898, España firmó con EEUU el Tratado de París, por el que le vendía Guam, Puerto Rico, Cuba y Filipinas por 20 millones de dólares. Por entonces, la lucha de los revolucionarios estuvo a punto de lograr la victoria contra los españoles; por eso a España le convino vender esas posesiones. Así Estados Unidos pasó a ser la potencia dominante en Filipinas.
La lucha popular siguió contra la dominación norteamericana. Entre 1898 y 1911 hubo una guerra popular; más de un millón de filipinos fueron muertos por las fuerzas de EEUU: el general Smith ordenó matar a toda la población mayor de 10 años. Se lo considera el primer Vietnam, la primera guerra imperialista de EEUU fuera de su territorio. Los terratenientes pasaron a aliarse con los Estados Unidos: el sistema de haciendas (de caña de azúcar y otros productos agrícolas) permaneció igual que antes.
En la segunda Guerra Mundial, el Japón ocupó Filipinas durante cinco años. Durante la guerra destruyeron la capital Manila y muchas ciudades provinciales. Al término de la guerra, los EEUU volvieron a Filipinas para “desarrollar” el país. Desde la descolonización de España, los presidentes fueron siempre títeres de Estados Unidos, y después de la segunda Guerra eso siguió así hasta ahora: todas las políticas están dirigidas a proteger los intereses de la burguesía y los terratenientes, y el pueblo sufre pobreza, represión a las protestas y asesinatos de activistas, especialmente durante la dictadura de Ferdinando Marcos que duró desde el ’65 hasta el ’86.

 

—¿Qué movimientos de lucha se formaron para liberar a Filipinas de esta situación?
—El principal es el Movimiento Democrático Nacional. Su principal demanda es la de una reforma agraria genuina, ya que sólo el 1 o 2% de la población es dueña de más del 70% de la tierra. También las corporaciones multinacionales tienen muchas tierras, donde hacen principalmente agricultura produciendo arroz, maíz, frutales, caña de azúcar, coco para la elaboración de aceite. También exportamos productos de la pesca de mar, y minerales (hay muchas multinacionales mineras). Todo es para exportación, principalmente a Estados Unidos, pero también a Japón, Canadá, Australia, mientras que muchas importaciones empiezan a provenir de China. China tiene un interés territorial próximo a Filipinas, en las islas Spratley, donde hay yacimientos de petróleo.
El Movimiento Democrático Nacional lucha por la soberanía del país. Es una continuación del movimiento de independencia contra la dominación española y luego contra la dominación extranjera en general. Su principal demanda es una reforma agraria genuina. También pugna por los derechos democráticos del pueblo, porque la explotación de los campesinos y trabajadores es muy grande, y también lo es la represión a campesinos, activistas, dirigentes, periodistas, religiosos, maestros, jóvenes. El régimen de Gloria Arroyo –la presidenta anterior– tuvo 1.200 desaparecidos y asesinados. Casi todos los asesinados eran miembros de este Movimiento.
Este Movimiento incluye muchas organizaciones: federaciones, confederaciones, alianzas. Su nombre es Bayan, que en español significa Pueblo. Es una confederación de organizaciones de trabajadores, campesinos, religiosos, jóvenes, mujeres, estudiantes, abogados, tra- bajadores de la salud, indígenas, organismos de derechos humanos, etc. También existen otras organizaciones para la lucha democrática; por ejemplo la de las mujeres, que se llama Gabriela (es el nombre de una heroína de la lucha por la independencia contra España). A nivel clandestino, también es destacable la lucha del Partido Comunista de Filipinas (PCF), el Nuevo Ejército del Pueblo (NEP) y el Frente Democrático Nacional de Filipinas. Hay muchas luchas en Filipinas contra el gobierno y contra el imperialismo, el feudalismo y el capitalismo burocrático. Porque el presidente, el gabinete, senadores, diputados, jefes militares y funcionarios del gobierno son también terratenientes, y utilizan el gobierno en beneficio propio, para mantener sus posiciones de poder.
En los últimos años se llevó a cabo la importante lucha de “Poder del Pueblo” (People’s Power) para expulsar al dictador Marcos en 1986, y luego para voltear a Estrada en 2001. Y en estos últimos años se produjo una lucha muy grande en la hacienda del actual presidente Aquino, un gran terrateniente azucarero. Los campesinos de la hacienda realizaron una huelga, durante la cual el Ejército del gobierno y el ejército propio de la hacienda asesinaron a siete campesinos, y otros están desaparecidos. La Corte Suprema había tomado la decisión de distribuir la tierra: los campesinos ganaron esa lucha, pero hasta ahora no recibieron nada porque la familia de Aquino exige una indemnización de mil millones.

 

Solidaridad y apoyo recíproco
La Liga Internacional de Lucha de los Pueblos es una alianza internacional que incluye organizaciones de trabajadores, campesinos, mujeres y otros sectores antiimperialisats de más de 40 países, para desarrollar la lucha contra el imperialismo y por la soberanía de todos los países y la solidaridad con las luchas de sus pueblos. Tiene 17 comisiones: Trabajo, Liberación Nacional, Inmigrantes, Mujeres, Jóvenes, Derechos Humanos, Indígenas, Religiosos, Salud, Presos Políticos, Movimientos de Gays y Lesbianas.
Esperamos que aquí, en América Latina, podamos desarrollar también nuestra Liga, para proyectar las luchas de América Latina también al nivel internacional, compartir y apoyar esas luchas.