1. ¡Fuera las tropas yanquis y el operativo Frontera!
Jujuy repudió a Macri. Fue a instalar una base militar con los yanquis que amenaza al pueblo argentino y boliviano y se adueña del litio.
Macri viajó a Jujuy a inaugurar el operativo militar Frontera Norte, con 500 efectivos del Ejército. Los pueblos originarios repudiaron “la instalación de una base militar en La Quiaca, con el Ejército de Estados Unidos” en territorios de sus comunidades. Se denunció la entrega del litio. Hubo un bloqueo popular al aeropuerto y una gran movilización a la Casa de Gobierno provincial, con la participación de la CCC, el PTP y el PCR. Tilcara, lugar donde se realizó el acto macrista, se llenó de carteles de repudio a su presencia y hubo un masivo escrache popular. Macri tuvo que irse del acto en un helicóptero.
En el Congreso de Estados Unidos, Ileana Ros-Lehtinen, representante del partido Republicano (el de Trump) en el Congreso Nacional yanqui, calificó a Evo Morales de “ese matón”, dijo que Evo “restringió los derechos básicos del pueblo de Bolivia”, que “expulsar a la DEA, USAID y al embajador yanqui y su amabilidad (de Evo) con regímenes deshonestos son una prueba más de la amenaza que plantea su régimen”. Afirmó que Bolivia es una amenaza a “la estabilidad y la seguridad de nuestros aliados en el hemisferio y más allá”, porque “ha atacado consistentemente a los Estados Unidos y nuestros esfuerzos por defender los valores de la democracia en la región y en todo el mundo”. Sostuvo que “su régimen socava nuestros propios intereses de Seguridad Nacional”. Y reclamó: “El pueblo boliviano necesita nuestra ayuda”.
El operativo militar Frontera Norte, de Macri y Estados Unidos, es una amenaza al pueblo argentino, instala las tropas yanquis sobre el litio jujeño y es una provocación a la nación hermana de Bolivia.
2. Un reguero de luchas enfrentan al macrismo
Se realizó un exitoso 12 Encuentro Nacional de Originarios. Las luchas populares enfrentan el ajuste, la entrega y la represión de Macri y el FMI.
El 12 Encuentro Nacional de Naciones y Pueblos Originarios se realizó el fin de semana pasado en Alberdi (Tucumán), con alrededor de 400 personas de numerosas regiones del país.
El Encuentro se plantó opositor al gobierno de Macri, que profundiza el genocidio silencioso de los pueblos y naciones originarias, usurpando sus tierras y expulsándolos a las villas y asentamientos. Hubo un amplio intercambio de experiencias de lucha por el empadronamiento de sus comunidades, por conquistar los dominios de sus tierras y recuperar el INAI, hoy con autoridades puestas a dedo por Macri. Además, denunciaron la militarización de las fronteras en territorios de comunidades originarias.
Luchan los originarios. Luchan los obreros del Astillero Río Santiago en defensa de su fuente de trabajo y por la soberanía naval, junto a la pelea contra los despidos en reparticiones estatales, a los que se sumaron 150 cesantías en Fabricaciones Militares. Luchan los trabajadores de la salud y de la educación. Hay luchas de los mecánicos, metalúrgicos, de la alimentación, camioneros y otros gremios contra despidos y suspensiones, por salarios y contra las sanciones a sus gremios. Luchan los Cayetanos por las 5 leyes que reclaman frente al hambre y la desocupación. Luchan los jubilados por el robo que les hicieron y por conquistar asignaciones dignas. Luchan los campesinos por su derecho a producir y a la tierra. Luchan los jóvenes por ni un pibe menos por la droga. Y lucha esa gigantesca marea verde de las mujeres que ha asombrado al mundo con sus movilizaciones por sus derechos.
3. Las mentiras, la realidad y los “Cuadernos”
La política macrista agrava la crisis social y económica, y las revelaciones de la corrupción desnudan las lacras de la dependencia y el latifundio en un país disputado por varias potencias imperialistas.
Después de haber mentido durante casi tres años que “lo peor ya pasó y estamos creciendo”, Macri confesó ante la CNN (cadena de TV yanqui) que la Argentina es “frágil” y “débil”, la economía “va a caer este año” (él dice que solo un 1%). Y de nuevo las mentiras: nos salvamos con “una buena cosecha y el turismo”, y con “el apoyo que recibimos de todos los países más importantes del mundo a través del FMI”.
Tres de cada cuatro argentinos saben que el pacto de Macri con el FMI es un salvavidas de plomo. La inflación sumó en un año 31%, y más aún en alimentos. Con los aumentos miserables en los planes sociales, salarios y jubilaciones: ¿Cuántas familias más apenas alcanzan a una comida por día y cuántas más caen en la pobreza?
Mientras tanto, la timba financiera macrista, que manejan el FMI, los bancos y capitales imperialistas, en un solo día, con la corrida al dólar, le sacó casi 1.000 millones de dólares al Banco Central, que ahora está mendigando más préstamos al imperialismo chino. Además, para hacer “buena letra” con el FMI, por un decreto, Macri, le sacó a las provincias $65.000 millones.
Mientras, las luchas se multiplican, y el destape del entramado de la corrupción de ex funcionarios públicos y empresarios deja en evidencia la disputa por la hegemonía en el bloque de las clases dominantes.
El macrismo trata de utilizar el destape de la corrupción reduciéndolo al periodo del gobierno kirchnerista, ocultando su propia corrupción y las penurias que está llevando al pueblo argentino. Y promueve un escenario que trata de correr la rebeldía popular en ascenso.
Un sector de los K, que son parte del bloque dominante, pretende tapar todo lo que se robaron, y en su disputa por recuperar la hegemonía del bloque dominante se montan en dos cuestiones: que hoy el golpe principal de las luchas es contra la política reaccionaria del macrismo. Y que el pueblo con sus luchas se fue adueñando de las calles y le fueron poniendo otro color a la situación política.
Pero lo que queda en evidencia con el destape de la corrupción son las lacras de esta Argentina dependiente y latifundista. Y también revela la feroz disputa entre los grandes grupos económicos “nacionales” y los imperialismos a los que están atados o asociados, atrás de lo cual, en gran medida, está la guerra comercial entre Estados Unidos y China.
4. Saquemos a la Argentina del Fondo
Macri trata de dividir y liquidar a la oposición para imponer su política. En marcha con su campaña contra el pacto reaccionario de Macri con el FMI, y el PTP y el PCR, luchan para conquistar otra política y otro gobierno.
Macri trabaja para dividir y liquidar a la oposición social y política a su política de ajuste, entrega y represión: con poderosos multimedios (como Clarín), usa los fondos del Estado, chantajea con carpetazos de los servicios y “multas” absurdas, a gremios por sus huelgas, y ahora a la CCC por un acto en la Plaza de Mayo. ¿Le va a cobrar a los herederos de los patriotas del 25 de Mayo de 1810, que pisaron las plantitas para abrir el camino a la independencia?
Pese a todas las provocaciones del gobierno, se van reagrupando fuerzas sociales y políticas en núcleos opositores. Con la bronca y la fuerza que viene desde abajo, se abre paso la unidad para lucha, y la necesidad de la unidad política para derrotar a la política de Macri y el FMI, recogiendo los reclamos del pueblo en un programa que sostenga otra política, sin volver atrás.
En marcha da pasos echando raíces, ya está en Córdoba, La Plata, Mar del Plata, se lanzó el 14 en Berazategui, se presenta en Quilmes el 1/9, y avanza en otras provincias y localidades. Echa raíces preparando el lanzamiento de una campaña contra el pacto de Macri con el FMI.
El PTP, integrante de En marcha, sigue dando pasos en la campaña por sus personerías, ahora con la herramienta de la campaña contra el acuerdo de Macri y el FMI. El PCR, encabezando las luchas, trabaja para la unidad en la lucha, impulsando la campaña contra el acuerdo de Macri y el FMI. Es el camino para prepararse y preparar al pueblo, para todos los escenarios que pueden darse, en las luchas y en las elecciones. Es el camino de acumular fuerzas para derrotar la política macrista, y conquistar otra política y otro gobierno, popular, nacional y democrático.
Escribe Ricardo Fierro