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23 de agosto de 2017

Herramientas jurídicas para las mujeres

Amas de Casa del País de Villa Gdor. Gálvez, Santa Fe

 
¿Por qué la actividad? La crisis que se profundiza con la política de Macri ha acrecentado las situaciones de violencia hacia las mujeres. Se ha hecho cotidiano que tengamos que salir a gritar ¡Ni una menos ni una más! La muerte de Anahí y la desaparición de Rosalía Jara y Nadia Rojas dan cuenta de lo que decimos. 

 
¿Por qué la actividad? La crisis que se profundiza con la política de Macri ha acrecentado las situaciones de violencia hacia las mujeres. Se ha hecho cotidiano que tengamos que salir a gritar ¡Ni una menos ni una más! La muerte de Anahí y la desaparición de Rosalía Jara y Nadia Rojas dan cuenta de lo que decimos. 
Todos los martes, en la sede de Amas de Casa del País de Villa Gdor. Gálvez funciona el “Grupo de Atención y Prevención en Violencia hacia las mujeres”, y en las charlas  lo que viene apareciendo en forma reiterada son las dudas e incertidumbres que generan en las mujeres los aspectos de la violencia vinculados a las cuestiones legales: “¿Dónde se hacen las denuncias?”, “¿La prohibición de acercamiento tiene fecha de vencimiento?”, “¿Si se vence hay que volver a denunciar al agresor?”, “¿Y la cuota alimentaria?”, “¿Hay asesoramiento legal gratuito para las mujeres en situación de violencia de género?”, etc. 
Nos pusimos en campaña, consultamos a una compañera que tiene mucha experiencia en el tema y decidimos hacer una charla-debate. Una semana antes armamos un volante y salimos a difundir la actividad por el barrio, escuelas y distintas radios locales. Con la participación de mujeres encuentreras, mujeres de Amas de Casa del País, representantes de la Secretaría de Género de Amsafe-Rosario, periodistas locales, algunos varones y la presencia de dos candidatas del FSP: Ana Dziadel -precandidata a concejala- y Chana Menéndez -precandidata a diputada nacional-, llevamos adelante la actividad. Durante más de tres horas, entre mates y cosas ricas para compartir, debatimos acerca de la violencia de género que sufrimos las mujeres, e invitamos a las y los participantes a hacer preguntas sobre las herramientas jurídicas de las que disponemos para reclamar ante un derecho vulnerado. Las leyes de protección integral y los proyectos de declaración de la Emergencia en Violencia contra las Mujeres -nacional, provincial y municipal- fueron los ejes de discusión.
En un clima de escucha se fueron compartiendo experiencias y planteando debates. Se leyó el concepto legal de violencia contra las mujeres y la abogada resaltó la “relación desigual de poder” que está en la base de estas conductas violentas que tienen como móvil nuestro género.
Las denuncias no son todas iguales, los hechos no siempre configuran delitos, hay distintas maneras de iniciar una causa según el tipo de conducta y algunas no tienen previsto ningún procedimiento judicial específico. Una deuda importante del Estado en nuestra provincia es la implementación de un cuerpo de abogados especializados para patrocinarnos en forma gratuita. Nos detuvimos a hablar de la violencia institucional, de la que somos víctimas muchas veces en las comisarias, en las fiscalías, en los juzgados y en otras instituciones, en las que nos sentimos maltratadas, se desconfía de nuestra palabra, se cuestionan nuestras conductas y se nos prejuzga; tenemos que esperar largas horas en lugares incómodos y no siempre se nos toman las declaraciones y a veces, por dudar de nuestros dichos, no se dictan las medidas que son indispensables para protegernos, poniendo en peligro nuestra integridad y a veces nuestra vida.
A pesar de todos esos obstáculos consideramos que es importante denunciar, incluso en los casos en los que sabemos que es difícil que se tomen resoluciones judiciales al respecto, porque muchas veces es un gran alivio para las mujeres poder contar lo ocurrido y porque siempre es necesaria la denuncia para dejar constancia de la reiteración de conductas por parte de un mismo agresor. Pero entendemos que no hay que estar sola, siempre decimos, andá acompañada por amigas, vecinas, familiares, o acercate a alguna organización ¡si estás decidida no te quedes sola!
Salimos del encuentro muy contentas, fortalecidas y convencidas de que juntas y organizadas, en la calle, luchando, es el camino para exigir al Estado la implementación de políticas públicas para prevención de la violencia de género contra las mujeres. Hemos avanzado mucho en la conquista de nuestros derechos, pero la violencia no cesa y hoy muere más de una mujer por día en manos de femicidas ¡Seguimos luchando y vamos por la Declaración de la Emergencia provincial y nacional!