El 2007 se cerró en Grecia con una histórica huelga general el 12 de diciembre, en defensa del sistema de jubilaciones y pensiones. Apenas dos meses después de su reelección, el gobierno derechista de “Nueva Democracia” emprendió en octubre su ofensiva privatizadora. Con el pretexto de la “crisis del sistema previsional”, el gobierno griego se propone elevar la edad jubilatoria, reducir aún más el monto de las pensiones, disminuir los aportes patronales, e “invertir” las reservas de los fondos de pensión en el mercado de capitales.
El fin último de la burguesía de Grecia —como en toda la Unión Europea— es destruir el sistema público de bienestar social y reemplazarlo por la consabida receta neoliberal de las compañías de retiro privadas, controladas por los grandes monopolios bancarios de la UE.
Debido a sus políticas de robo sistemático a los fondos públicos de pensión (es decir al pueblo trabajador), el gobierno griego debe a esos fondos 8.700 millones de euros. Las patronales les deben otros 8.200 millones. Mientras tanto, más de un millón de griegos e inmigrantes trabajan sin seguridad social.
La oposición socialdemócrata apoya la política neoliberal, y la cúpula de la central sindical no hace nada por organizar la resistencia. Por eso, la jornada de huelga y movilización del 12 de diciembre prometía ser otra de tantas manifestaciones “testimoniales”.
Pero esta vez los trabajadores griegos hicieron sentir su repudio a toda esa cháchara sobre la “necesidad” de “reformar el sistema previsional”, y transformaron la jornada en una de las huelgas más masivas de los últimos tiempos, con concentraciones y marchas en toda Grecia, principalmente en Atenas, el Pireo, Tesalónica y Patras.
La KOE (Organización Comunista de Grecia), y especialmente su frente sindical (la Unión del Pueblo Trabajador) jugaron un importante papel en la organización de los jóvenes mediante la formación de comisiones abiertas en los sindicatos, barrios y lugares de trabajo.
La gran movilización levantó también su reclamo en contra de la privatización de Olympic Airlines a manos de los grandes monopolios europeos y sus socios locales, y contra las maniobras antidemocráticas del gobierno que pretende hacer pasar una ley electoral tramposa.
02 de octubre de 2010
