Los trabajadores organizados en el sindicato United Steelworkers (USW) del sector petrolero de EEUU vienen realizando una huelga desde comienzos de febrero, contra la flexibilización laboral.
Los trabajadores organizados en el sindicato United Steelworkers (USW) del sector petrolero de EEUU vienen realizando una huelga desde comienzos de febrero, contra la flexibilización laboral.
La huelga afecta a refinerías de Ohio, Indiana, California, Kentucky, Houston, Texas, y Washington entre otros. El enfrentamiento se da con algunas de las principales empresas petroleras como Shell, Marathon, Tesoro, BP y LyondellBasell, y afectan a más del 10% de la industria petrolera yanqui. La Royal Dutch Shell es, además, representante de las llamadas “Big Oil”, las grandes empresas de petróleo como Exxon Mobil, Chevron y Tesoro, por lo que esta huelga es el preanuncio de un conflicto de mayor escala.
Los trabajadores denuncian que los paros comenzaron cuando Shell se negó a ofrecer propuestas serias para resolver las preocupaciones del USW sobre la seguridad, excesivas horas extraordinarias y niveles inseguros de dotación de personal.
El convenio laboral cayó el último día de enero y las patronales petroleras se niegan a tratar uno nuevo, con los reclamos de los trabajadores. En las manifestaciones y piquetes frente a las refinerías, los petroleros reflejaron su bronca: “Para ellos, las ganancias son más importantes que las vidas”, dijo Bill Patton, un ajustador de tuberías en Marathon Oil. “Es una mentira”, dijo Leslie Dillon en la línea de piquetes, comentando sobre el letrero de seguridad que se ve al entrar a la refinería. “He sido bombero y paramédico por 16 años y he transportado cadáveres de ahí”. Una enorme explosión en la refinería aquí en 2005 mató a 15 trabajadores e hirió a más de 100 trabajadores y residentes cercanos. “Nuestra mayor preocupación es la fatiga”, dijo Chris Sharpe, que trabaja en la unidad de coquización en LyondellBassell y es vicepresidente del local del sindicato. “Se rehúsan a emplear más gente, así que estamos forzados a trabajar 13 días seguidos, 12 horas al día, seguido de un día de descanso. Así ha sido desde el Día de Acción de Gracias”.
Por un convenio justo
El sindicato United Steelworkers (USW) está haciendo circular un petitorio en el que explicita “Estoy a favor de los trabajadores petroleros del USW en sus esfuerzos por conseguir un contrato justo que proteja la salud y seguridad de los trabajadores y las comunidades. La industria petrolera es la más rica del mundo, pero su codicia y su negociación de mala fe ha estancado los esfuerzos para mejorar las condiciones de trabajo. La industria se ha negado a abordar problemas graves de salud y seguridad, incluyendo: La aparición diaria de incendios, fugas, emisiones y explosiones. Falta de personal en las refinerías que obliga a los trabajadores a un exceso de horas extras. Prácticas de programación, brutales y peligrosas. Contratación de contratistas externos.
Esta huelga es la primera con alcance nacional en el sector petrolero desde 1980. Los trabajadores con su lucha evidencian cómo las grandes petroleras descargan sobre los trabajadores la baja del precio del petróleo. En los últimos tiempos, se ha vuelto una práctica normal de la “recuperación económica” yanqui la contratación de empresas tercerizadas para realizar los trabajos. Con eso, economizan millones en beneficios sociales como previsión y vacaciones. Eso se tornó el principal punto en la negociación, ya que las patronales pretenden incorporar la tercerización al nuevo convenio. n
