Confirmando la continuidad de la mentira kirchnerista en el gobierno de Cristina Fernández, el Indec bajo la “vigilancia” de los matones de Guillermo Moreno, mostró un nuevo aumento en el Indice de Precios al Consumidor (IPC) de sólo el 0,9% en enero de 2008.
Para llegar a esta cifra hubo diferentes retokes. Se disminuyó la ponderación del transporte urbano dentro del índice y se dio por rebajados a los combustibles en un 15%, aunque eso no ocurrió en la realidad. Los precios en turismo se dibujaron a un 8,5% menos que los del año pasado, lo mismo la ropa un 2,2% menos. Los gastos en salud figuran con un aumento muy inferior al de la realidad, también comer fuera de casa.
¿Para qué seguir? La realidad, como la denunciaron los trabajadores del Indec la semana anterior (hoy, número 1201), es que las cifras son arregladas de manera tal que apenas muestran un tercio de lo que sucede en la calle. Así según sus cálculos, durante 2007 el IPC aumentó entre 22,3% y 26,2%, mientras para el gobierno la suba fue de sólo 8,5%. Y el rubro de Alimentos y Bebidas, que es en el que más gastan los sectores de bajos ingresos y que mide la indigencia, aumentó en 2007 entre 36,4% y 39,5%, mientras el gobierno dice que el aumento fue de sólo 8,6%.
De esta manera, mientras el gobierno dice que los salarios aumentaron más que “su inflación”, la realidad es que aumentaron menos, perdiendo poder adquisitivo. También con “sus índices” el gobierno dice que disminuyó la indigencia, cuando la verdad es que aumentó el numero de indigentes por el aumento real del costo de la vida, y en particular de los alimentos. Así, todos los datos que da el Indec de Moreno cada vez están más alejados de la realidad.
02 de octubre de 2010