I. SITUACION INTERNACIONAL
El empantanamiento yanqui en Irak
Los duros golpes que la resistencia iraquí asesta diariamente al imperialismo yanqui han ido empantanando a éste en ese país y han impedido que pudiera cumplir con los objetivos que se propuso al invadirlo. Nunca, desde el inicio de la invasión a Irak, hace ya tres años, las fuerzas de ocupación lograron controlar todo el país, ni reconstruir las destrucciones de la guerra, ni restaurar los servicios esenciales (energía eléctrica, agua, combustibles, etc). Oficialmente el gobierno yanqui reconoce haber perdido 2.433 efectivos desde la invasión. Hay centenares de desertores y uno de cada cuatro excombatientes está enfermo física o mentalmente.
También en Afganistán las tropas de ocupación –yanquis y de otros países– no han podido afianzar su dominio. Regiones enteras del país están en manos de la guerrilla opositora.
La guerra contra la nación y el pueblo iraquí y contra la nación y el pueblo afgano son cada día más impopulares en los EE.UU., Gran Bretaña, Italia y otros países agresores. En los EE.UU. crece el movimiento que exige el retiro de las tropas yanquis. Se realizan manifestaciones semanales de protesta en muchas ciudades. La fascistización que empujó el gobierno de G. W. Bush con el pretexto de la guerra “contra el terrorismo” (espionaje de llamadas telefónicas y correos electrónicos; secuestros y detenciones arbitrarias de personas; cárceles clandestinas, traslado ilegal y secreto de presos a diferentes países, etc) han contribuido a su creciente desprestigio.
Como siempre la guerra le sirve al imperialismo yanqui para buscar salidas a sus graves problemas económicos: su economía compra más que lo que vende, consume más que lo que produce, su gobierno gasta más que lo que ingresa y toda la nación vive por encima de sus posibilidades. Es una potencia que vive a crédito.
La sobrevaluación del dólar, que opera como moneda patrón en todo el mundo, ha creado una situación económica potencialmente explosiva.
A todo eso se une el crecimiento de las luchas de los trabajadores y el gigantesco movimiento de los inmigrantes contra las medidas discriminatorias que ha implantado o quiere implantar el gobierno yanqui (muro en la frontera con México, expulsión de miles de indocumentados, etc.). El paro y la manifestación de millones de trabajadores extranjeros, principalmente latinos, en Chicago, Los Angeles, New York y otras ciudades, el 1° de Mayo, conmovieron al imperio yanqui.
Paralelamente el triunfo de Mahmud Ahmadinejad en Irán, su decisión de enriquecer uranio creando la posibilidad de que ese país tenga armamento atómico, y el triunfo del movimiento Hamas en Palestina, han desequilibrado la relación de fuerzas en el Medio Oriente. Ha quedado de manifiesto la hipocresía de las grandes potencias que toleran, y en algunos casos bendicen, que países como Israel, Paquistán o la India, tengan armas atómicas y le prohíben a otros –como hicieron con la Argentina– que avancen en el desarrollo de la industria atómica.
Todo esto ha estimulado las tendencias belicistas en el imperialismo yanqui. Este multiplica sus provocaciones en el Medio Oriente y en el Caribe (realizando maniobras de guerra que amenazan a Cuba y Venezuela). Es la dialéctica del imperialismo. Como sucedió en su momento con Hitler. La lógica de su política agresiva lo lleva a replicar al repudio popular con nuevos actos de agresión. Por eso hoy el mundo se encuentra en vísperas de acontecimientos que pueden tener consecuencias tremendas para la humanidad. Pero es correcto recordar, como acaba de hacer en Viena el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez, que, todos los imperios, “como decía el camarada Mao Tsetung, terminan siendo un tigre de papel, un gigante de papel, un Goliat de papel, y nosotros los revolucionarios debemos ser pequeños tigres de acero, grandes tigres de acero”.
El imperialismo yanqui prepara nuevas provocaciones y agresiones
Hay muchos elementos que indican que los Estados Unidos e Israel han culminado los planes para la agresión militar a Irán. El imperialismo yanqui, Gran Bretaña, Francia y Alemania están unidos en este proyecto. Es una coalición bélica muy poderosa. El plan incluiría –ante una réplica iraní– un ataque atómico. Parten de que ninguna potencia (ni Rusia, ni China) irían a la guerra nuclear para defender el régimen de los ayatollahs iraníes. La experiencia de la guerra de Malvinas y la de Irak, entre otras, muestra el peligro de creer que rusos y chinos ayudarán a Irán si se va a una guerra. El principal factor que frena a los yanquis es la decisión de Irán de enfrentar un ataque yanqui y de luchar hasta las últimas consecuencias si esto sucede.
Una gran tarea de solidaridad internacional
Esto crea graves peligros para la paz mundial.
La solidaridad con la heroica lucha del pueblo iraquí, con el pueblo afgano y con el pueblo palestino siguen siendo tareas fundamentales que nos exige el internacionalismo proletario y son parte del combate por la liberación nacional y social de nuestra patria y nuestro pueblo. Debemos detener con la movilización mundial de los pueblos todo intento del imperialismo de atacar a la república iraní
Cambios en la política internacional
El mundo fue conmocionado por el alzamiento democrático del pueblo de Nepal que obligó a la monarquía de ese país a reestablecer el régimen democrático. El PC maoísta de ese país, que en pocos años de lucha armada controla más del 70% de su territorio (73 de sus 75 distritos) jugó un gran papel en ese movimiento de masas. “Es el maoísmo que retorna”, escribió el Corriere della Sera (18/5/6). También ha crecido la fuerza de los maoístas en la India, cuyo primer ministro, Manmohan Singh, declaró en abril que los rebeldes de inspiración maoísta “son la mayor amenaza a la seguridad interna jamás afrontada por nuestra nación”. El Financial Times advirtió sobre el riesgo inmediato y posible que los maoístas “tomen la guía del movimiento radicalizado en la India y China”.
Se han producido otros cambios importantes en la política mundial. Cambios que influirán en nuestro continente y en nuestro país.
El primero es el triunfo de la derecha en las elecciones alemanas, lo que recrea la posibilidad de una alianza yanqui con Alemania que lidere la política europea.
Simultáneamente el triunfo del centro izquierda en Italia (que puede acelerar el retiro de las tropas italianas de Irak) se une al fortalecimiento socialdemócrata en España y otros países de Europa.
Un hecho relevante de la política mundial han sido las grandes rebeliones juveniles en Francia, que le torcieron el brazo al gobierno de este país en sus intentos de avanzar en la flexibilización laboral. Grandes luchas obreras se han producido en Alemania, Italia, Francia y otros países europeos.
Rusia, fortalecida por los elevados precios del petróleo y el gas, el oro, los diamantes y el níquel, de los que es gran productor mundial, ha endurecido sus posiciones internacionales frente a los Estados Unidos. Ha desarrollado una avanzada defensa antimisilística y posee misiles de ataque casi imposibles de detectar a tiempo con los medios actuales. Cercada por el imperialismo yanqui, que la ha desplazado de sus posiciones hegemónicas en las repúblicas del Báltico, Ucrania, Georgia y algunas repúblicas asiáticas, Rusia se ha acercado a China. La provocativa gira del vicepresidente yanqui Dick Cheney por las repúblicas bálticas y países asiáticos que fueron parte de la ex URSS, ha demostrado el creciente grado de enfrentamiento ruso-yanqui. Rusia y China acompañan a EE.UU e Israel en las críticas a la política atómica iraní en el Consejo de Seguridad de la ONU, pero, hasta ahora, se oponen al uso de la fuerza para impedir el enriquecimiento de uranio por Irán.
China sigue siendo la locomotora de la economía capitalista mundial. Se ha transformado en la mayor fábrica del capitalismo. Sus monopolios y su capital financiero penetran profundamente en la economía de muchos países. Como sucede en la Argentina, en donde se apropió por monedas de una de las principales minas de hierro de América del Sur e invierte en puertos y ferrocarriles para facilitar la exportación a su país de poroto y aceite de soja (de los que es gran comprador). Ha penetrado profundamente en el comercio minorista y capitales estatales chinos controlan uno de los principales bancos del país, el HSBC.
China, cercada por bases, soldados y misiles yanquis (con bases en Corea del Sur, Japón, Taiwán, Filipinas, Sudeste asiático, Afganistán) procura ganar tiempo hasta que supere económica y militarmente a los EE.UU., lo que se estima sucederá entre el 2010 y el 2015.
La restauración capitalista en China ha ido acompañada, como es lógico, con la más feroz desigualdad social y la superexplotación de centenares de millones de campesinos y obreros. Las privatizaciones y la flexibilización laboral han producido el despido de más de 30 millones de trabajadores. La lucha de clases se ha agudizado, como previó Mao Tsetung en medio de la Revolución Cultural Proletaria previendo que ésta fuese derrotada. Mao Tsetung y sus enseñanzas viven en el corazón de los millones de obreros y campesinos pobres e intelectuales revolucionarios de China. Durante el 2005 China ha sido sacudida por más de 84 mil rebeliones obreras y campesinas. Algunas de ellas armadas. La clase obrera ha jugado un rol relevante en esas luchas. Entre ellas se destacó, en abril del 2005, la lucha de los doce mil obreros de la firma electrónica japonesa Aniden, que establecieron un comité preparatorio y exigen la formación de un sindicato libre.
Auge de luchas en América del Sur
En América Latina se mantiene el auge de luchas populares, democráticas, antiimperialistas y antiterratenientes, como señaló nuestro X Congreso.
Golpeado por el repudio que tuvo su política en la cumbre de Mar del Plata, el gobierno norteamericano ha ido maniobrando para revertir la situación global en el continente. Se apoya especialmente en su alianza con el gobierno de Uribe en Colombia, busca firmar acuerdos de libre comercio por separado, país por país, para superar el repudio al ALCA y trata de impedir nuevos triunfos electorales de gobiernos que pretendan forcejear contra su presión y chantage. Especialmente se esfuerza por impedir el triunfo de candidatos adversos en Perú y en México.
El triunfo de Evo Morales en Bolivia representó un golpe serio al imperialismo yanqui. Principalmente porque el movimiento popular boliviano, que tiene gloriosas experiencias de lucha, y que últimamente volteó dos gobiernos e impuso la nacionalización de los hidrocarburos, el llamado a una reforma constitucional y medidas de reforma agraria, se ha seguido fortaleciendo. Madura en ese país una situación revolucionaria en la que aparece como un hecho relevante la participación protagónica de los pueblos originarios. Las consecuencias que traerá para el movimiento revolucionario continental la incorporación a la lucha revolucionaria de las grandes masas aimaras, quechuas, guaraníes y de otras nacionalidades y etnias son inmensas.
El triunfo de Evo Morales, la reciente reunión de Evo, Chávez y Fidel en La Habana, y las medidas de nacionalización de los hidrocarburos y de reforma agraria anunciadas por Evo, han fortalecido el eje de Cuba, Venezuela y Bolivia y demostrado el discurso engañoso de los llamados gobiernos “desarrollistas democráticos”, o “neodesarrollistas”, de Lula, Tabaré Vázquez y Kirchner.
Debemos reforzar nuestra participación en el movimiento bolivariano de solidaridad con Venezuela, nacionalmente y en todos los zonales del Partido y la JCR, lo mismo que nuestra participación en los movimientos solidarios con Bolivia y Cuba.
II. SITUACION NACIONAL
Después de tocar fondo en el 2002, en la que fue una de las peores crisis de la historia nacional, producida la drástica devaluación y la consiguiente caída del salario real, la economía argentina se recuperó. Fue ayudada por una situación internacional sumamente favorable para nuestro país porque se revirtió el ciclo económico internacional y se produjo un aumento –sostenido en el tiempo– de los precios internacionales de las materias primas. Así tuvimos un período prolongado de crecimiento. La clave de éste fueron: un dólar alto, salarios bajos durante un tiempo prolongado y la reducción relativa del precio de los servicios, lo que permitió a los capitalistas recuperar la tasa de ganancias en los sectores productivos. El dólar alto favoreció principalmente a los monopolios exportadores y también protegió el mercado interno para la sustitución de importaciones Esto estuvo unido a la mejora de los precios internacionales de nuestras exportaciones (agropecuarias, petroleras, mineras, pesqueras, acero y aluminio, entre otras). Entre esas exportaciones se destacan las sojeras. La Argentina se convirtió en un gran productor de soja, desplazando para ello a la ganadería, a otros cultivos y deforestando. Actualmente se siembran más de 14 millones de hectáreas de soja y la Argentina es gran exportador de poroto de soja y el primer productor mundial de aceite de soja (China es su principal comprador).
La coyuntura internacional permitió tener un saldo comercial favorable. Desde ya que la subsistencia del latifundio y la alta monopolización de nuestra producción, puso límites a estas exportaciones (que sólo crecieron un 57% desde la devaluación).
El gobierno de Kirchner aprovechó esa situación y practicó, desde que asumió la presidencia, una política de fuertes impuestos para acumular superávit fiscal con la finalidad de pagar fielmente la deuda externa y poder realizar una política de compra de gobernadores, intendentes y legisladores, a través de subsidios del gobierno nacional, obras públicas, etc.
Pese a tener facilitada la situación de la deuda externa por dos años de default y el canje posterior de parte de la deuda a intereses más bajos y plazos más largos, la deuda externa total era de 118. 230 millones de dólares al 31/11/05 La deuda externa sigue pesando como una losa sobre las posibilidades de crecimiento de la economía nacional. Se demuestra una vez más que esa deuda es como la deuda del mensú con el yerbatero explotador: por más que pagamos nunca nos liberamos de ella y es uno de los instrumentos principales que utiliza el imperialismo para mantenernos sometidos.
La mitad de la deuda pública interna (equivalente a 62. 154 millones de dólares) es en pesos y el 85% (equivalente a 53.608 millones de dólares) es ajustables por el CER (el índice que marca la inflación) por lo que con una inflación del 10% anual, el ajuste equivaldría a unos 18.600 millones de pesos que se llevan los usureros y pagamos todos los argentinos a través de la inflación.
Una mínima parte de los trabajadores registrados (sólo el 9% del total de los asalariados) ha logrado recuperar lo perdido desde la devaluación, pero todavía existe una gran masa de trabajadores en blanco que ha quedado retrasado, por lo que el promedio de los salarios de los trabajadores en blanco es de $ 1.072, pese a que, según el INDEC, la canasta familiar supera los 2.200 pesos. Pero como resultado de la política de flexibilización laboral y la crisis, existe una masa (el 46% de los asalariados) cuyo salario promedio apenas llega a $ 390, por debajo de la canasta de indigencia. En cuanto a la mayoría de los trabajadores estatales tiene salarios que no alcanzan la canasta de pobreza de $ 900. Todo esto demuestra que el abaratamiento en términos reales del salario es una de las claves de la recuperación económica kirchnerista. El gobierno ha tenido la ayuda, para poder mantener a la inmensa mayoría de los salarios por debajo de la canasta familiar e incluso del salario de pobreza, de la CGT y de gran parte de la CTA. En el 2005 algunas direcciones sindicales fueron rebalsadas por las bases en varios gremios y empresas. Pero el acuerdo de Kirchner con Moyano y la dirección de la CGT (incluídos los llamados “gordos”) le permitió al gobierno poner un fuerte tapón a las luchas. La cifra del 19%, en cuotas, como tope del aumento salarial a otorgar en los nuevos convenios, acordada entre el gobierno y los jerarcas sindicales, es la garantía para el kirchnerismo de mantener baratos los salarios. Mantener el costo laboral bajo es la clave de toda la política de Kirchner. Por eso se preocupa tanto por el precio de la carne.
La desocupación sigue siendo muy elevada. Y en los centros urbanos (ya que los rurales no se investigan) en el primer trimestre de este año, según anunció el propio Kirchner el 16/5/06, subió al 11,4%. Es decir: la desocupación urbana total, según las propias estadísticas oficiales, llega a cerca de 1.800.000 personas. Si se consideran desocupados –como efectivamente lo son– a los Jefes y Jefas de Hogar con prestación laboral, la desocupación llegó al 14,1%.
Según las estadísticas oficiales 4 de cada 10 argentinos vive en casillas de chapa y cartón, techos de zinc y pisos de tierra, con napas contaminadas, sin agua corriente ni cloacas. 16,3 millones de personas viven por debajo de la línea de pobreza y 4,6 millones de ellas por debajo de la de indigencia.
La situación global de la juventud y los jubilados se ha agravado.
Existen 720 mil jóvenes fuera del sistema escolar y 730 mil jóvenes de más de 15 años que no saben leer ni escribir.
Una enorme masa de trabajadores de más de 60 años, en el caso de las mujeres, y de 65 en el caso de los hombres, ha quedado fuera del sistema jubilatorio. Los aumentos de Kirchner al mínimo de las jubilaciones y pensiones han servido para recuperar el mínimo que se cobraba antes de la devaluación. Pero esto se ha hecho a costa de aplanar la pirámide de jubilaciones y pensiones: antes del 2001 el mínimo lo cobraban 700.000 jubilados; ahora lo cobran 2.100.000.
Los proyectos electorales del kirchnerismo
Kirchner quiere aprovechar las condiciones económicas relativamente favorables para plantear su reelección, o la elección de Cristina Kirchner, para las elecciones presidenciales del 2007. Le preocupa que no se desborde en exceso la inflación a la que lleva inexorablemente su política de emitir pesos para sostener el dólar alto. Pero considera que logrará contenerla y mantendrá un ritmo de crecimiento económico alto. Simultáneamente ha cooptado, con subsidios y prebendas, a los jerarcas sindicales de todo los pelajes, a gobernadores, intendentes y dirigentes del peronismo que hasta hace muy poco fueron menemistas, duhaldistas o de la línea de Rodríguez Saa, y a una amplia franja transversal (repitiendo el viejo intento de Alfonsín y la Alianza) que va desde los ex montoneros y la mayoría del CTA, hasta parte del radicalismo, Patria Libre y el PC (Congreso Extraordinario). Este último, en una brusca pirueta oportunista, pasó de un supuesto principismo “marxista-leninista” a apoyar sin condiciones a Kirchner.
Pese a que Kirchner, en octubre del 2005, tuvo sólo el 26% de los votos (por lo que su fortalecimiento en esas elecciones fue relativo) su propaganda y los medios adictos han sembrado la idea que tuvo el 40%. En realidad sus listas fueron votadas por 1 de cada 4 empadronados. Pero las elecciones de octubre le sirvieron para “pasarle la topadora” al duhaldismo y otras corrientes peronistas y para derrotar a una oposición dividida. El kirchnerismo se convirtió en la principal fuerza política de las clases dominantes. No tiene oposición burguesa a la vista en condiciones de derrotarlo en el 2007. En el mejor de los casos esta oposición trata de reunir fuerzas para disputar en el 2011.
Kirchner, después de varios fracasos, busca la revancha con un gran acto partidario el 25 de Mayo. Fracasó cuando quiso cerrar la Plaza de Mayo a la protesta popular y en su intento de sacar al movimiento de desocupados de la calle. Fracasó en impedir la destitución de Ibarra por la masacre de Cromañón. Fracasó cuando quiso organizar un acto oficialista el 24 de marzo en la Plaza de Mayo. Fracasó cuando quiso impedir el acto patriótico del 2 de Abril por Malvinas. Fracasó el acto oficialista el Primero de Mayo que quisieron organizar Depetri y el “Barba” Gutiérrez.
Ahora, el 25 de Mayo, con todo el apoyo del aparato estatal y con muchísimo dinero volcado en todo tipo de prebendas y subsidios, va por la revancha. Estratégicamente su línea reformista –una variante del viejo desarrollismo– va a fracasar, porque su política mantiene y agrava los males estructurales de la economía argentina: la dependencia al imperialismo y el latifundio. Pero tácticamente no lo subestimamos.
Kirchner representa a sectores de burguesía intermediaria de grandes monopolios y a terratenientes que son los grandes beneficiados por su política. Es el caso de Aluar (monopolio ligado históricamente a Rusia y principal beneficiario de las desgravaciones impositivas), Techint, ligado al capital financiero italiano (beneficiado por numerosas concesiones) Cerro Vanguardia de capitales ingleses y Pan American (petrolera de la British, inglesa y de Bridas, rusa); Repsol; los principales grupos pesqueros a los que Kirchner está ligado personalmente; los grupos financieros de Esquenazi, Britos (Banco Macro), HSBC (chino-inglés), Credicoop, entre otros; los terratenientes laneros (como Benetton) y el complejo sojero. Ha beneficiado fuertemente al imperialismo chino (concesión de Sierra Grande, Ferrocarril Belgrano, puerto de Timbúes, entre otros). El kirchnerismo arrastra también a sectores importantes de burguesía nacional.
A la vez Kirchner tiene un grupo de negocios propio que utiliza los contratos, las nuevas empresas reprivatizadas y las “cajas” del Estado para acumular. Su antiyanquismo es funcional a los intereses de otros imperialismos.
Simultáneamente tiene problemas con otros grupos rusos (como editorial Perfil, últimamente con Eurnequián y no han sido buenas sus relaciones con Putin), con el imperialismo francés, y se han agravado sus contradicciones con los terratenientes ganaderos vacunos.
Kirchner tiene acuerdos y contradicciones con Chávez y con Fidel. Últimamente, por las medidas de Evo Morales y por las presiones yanquis, esas contradicciones se han tensado.
Como sucede en todo país dependiente disputado por varios imperialismos, en ocasiones hemos tenido que golpear juntos con fuerzas ligadas a éste o aquel imperialismo. Esto es correcto siempre que se tenga claro que golpeamos junto con fuerzas que estratégicamente son enemigas y mantengamos nuestra independencia. Así pasó cuando golpeamos durante la dictadura junto a la Iglesia y a los yanquis para impedir la guerra contra Chile; y en Malvinas cuando golpeamos con los rusos contra los yanquis. Así pasó cuando golpeamos con el kirchnerismo contra Bush y el ALCA en Mar del Plata, y en temas como la lucha por la despenalización del aborto, o contra determinados candidatos en la universidad, o en la lucha contra gobiernos como el de Sobish. Esto no debe mellar el filo de nuestra línea principal que es opositora, sino que debe articularse –lo que no es fácil– con ella.
Kirchner tiene una línea de doble discurso. Su filosofía es “gatopardista”: que algo cambie para que todo siga igual. Esto se revela en todos los terrenos: en los derechos humanos en donde mantiene y ha aumentado el número de luchadores sociales procesados y demostró, en Las Heras, con su intervención directa (a través del Ministerio del Interior) su falta de escrúpulos para reprimir al movimiento obrero; en el terreno de la deuda externa, en donde pagó más de lo necesario y presenta esto como “desendeudamiento”; en quiénes son los beneficiados por su política (un puñado de monopolios y empresarios amigos); en el incumplimiento de sus promesas a las empresas recuperadas; en su demagogia de prometer “una nueva política”, para terminar abrazado con todos los protagonistas de la llamada “vieja política” que pretendió barrer el Argentinazo. En síntesis: sostiene los pilares de todo lo que dice combatir.
Para poder desenmascarar la demagogia kirchnerista tenemos que realizar una gran tarea de esclarecimiento político (propagandístico y agitativo) y golpear sus costillas flojas, especialmente el tema salarial y el del costo de vida. Las masas, bombardeadas por una enorme propaganda oficial, pese a todo, han ido avanzando en calar el doble discurso kirchnerista. Desde ya que esto no será fácil mientras duren las condiciones actuales que le permiten al gobierno disponer de grandes sumas para su política demagógica.
Trabajamos para reagrupar a las fuerzas democráticas, populares, patrióticas y antiimperialistas, con la dirección de la clase obrera, en un frente capaz de derrotar esa política kirchnerista e imponer un gobierno patriótico y popular.
Las luchas
En los últimos meses se han producido grandes luchas. Hay provincias y regiones estremecidas por grandes combates de masa. Los medios nacionales las ignoran pero se multiplican. Se ha demostrado falsa la teoría de los partidos electoralistas de “izquierda” que, abrumados por los pocos votos que obtuvieron en las elecciones de octubre y sin valorar la enorme masa de abstenciones, votos en blanco y nulos, concluyeron que habíamos entrado en un profundo reflujo. Atravesamos un período complejo y difícil por el doble discurso kirchnerista, apoyado en una coyuntura económica favorable. Esto nos obliga a un gran trabajo de esclarecimiento y a cuidarnos de adjetivar sin explicar pacientemente la situación política. Pero son numerosos los casos que demuestran que las brasas del Argentinazo están encendidas y que el corte de rutas, las ocupaciones de fábricas y edificios públicos (incluso comisarías) y las puebladas, perduran como instrumentos cotidianos de combate. Entre las puebladas de los últimos meses destacamos la de Las Heras (Santa Cruz); San Vicente (Misiones); Rincón de los Sauces (Neuquén); el barrio Huiliche en Neuquén, donde los pobladores –en especial la juventud– enfrentaron a las fuerzas represivas desde las 13 hs de un día hasta las 9 hs del día siguiente, con el saldo de numerosos heridos en ambos bandos; en Berazategui, contra Edesur, en defensa de la salud y el medio ambiente.
El momento es difícil porque el gobierno tiene la iniciativa política. Pero en el camino de reagrupar fuerzas para luchar por un gobierno de unidad patriótica y popular, numerosos ejemplos muestran que es posible combatir y que se puede ganar si se trabaja para lograr todos los aliados posibles y se explotan las contradicciones del enemigo. No sólo en el terreno económico. También en el político, como se demostró en la lucha por la destitución de Ibarra, en el gran acto del 24 de marzo, donde se consiguió que fracasase el intento kirchnerista de impedir el acto central y se logró una impresionante manifestación de masas en todo el país, y en el acto por la recuperación de las Malvinas el 2 de abril.
La lucha contra las papeleras en el río Uruguay
La prolongada lucha del pueblo de Gualeguaychú contra las instalaciones de las papeleras en Fray Bentos, sobre el río Uruguay, es un ejemplo relevante de esas luchas. El gobierno entrerriano y el de Kirchner paralizaron la protesta contra esos emprendimientos confiados en que el triunfo del Frente Amplio en Uruguay cambiaría las cosas. El Frente Amplio se había opuesto fuertemente a la instalación de una zona franca de las dos papeleras en el puerto de Fray Bentos. “Creímos que, como venía un gobierno progresista con Tabaré, el diálogo iba a ser más fácil”, confesó Jorge Busti. Es conocido que el gobierno de Kirchner ayudó activamente al triunfo de Tabaré y creyó, por eso, que éste al asumir el gobierno, y con más fuerza que la que tiene ahora, replantearía el problema que le habían dejado firmado los partidos tradicionales de Uruguay. Pero Tabaré, colocado entre la espada y la pared, cedió. Ahora, según Jorge Busti, gobernador de Entre Ríos, “nos hacemos el hara-kiri todos los días, porque apoyamos la candidatura de Tabaré” (Reportaje en la revista Debate, 20/4/06).
Fue sólo la decisión del pueblo de Gualeguaychú, practicando formas de lucha (corte de rutas, grandes actos y marchas, democracia grande y horizontalidad en las asambleas, etc) que vienen del período previo y posterior al Argentinazo, el que permitió que el tema de las papeleras se mantuviera en el centro de la atención de todo el país y, que ahora, después de la reunión de presidentes y jefes de gobierno de la Unión Europea y América Latina, en Viena, fuese conocido en todo el mundo.
Es evidente que el imperialismo yanqui trabaja esta contradicción argentino-uruguaya para romper el Mercosur.
El tema de las papeleras ha estimulado el combate por el tema ambiental en todo el país. Se está tomando conciencia de que estamos frente a un problema gravísimo. En particular el tema de la contaminación del agua y el tema sanitario son de urgente resolución en todo el país. Se ha puesto en debate, nuevamente, el tema de la contaminación de los ríos Riachuelo, Matanza, Reconquista, Luján y el propio Río de la Plata. Aparece en toda su magnitud la contaminación producida por las papeleras que existen en el país, algunas de las cuales, como la de Puerto Piraí, trabajan con los sistemas más contaminantes. Se generaliza el movimiento en defensa de la laguna de Iberá, contra la apropiación de miles de hectáreas en la zona por grupos extranjeros y el intento del gobernador de Corrientes, Arturo Colombi, y monopolios extranjeros, de desarrollar la forestación con eucaliptus en la región y construir papeleras. Se ha denunciado la gravísima contaminación que ha producido y produce Aluar y la contaminación de las explotaciones mineras de Catamarca, San Juan, Chubut, Santa Cruz y Río Negro. Se generaliza la denuncia de la deforestación descontrolada para transformar extensas zonas en campos sojeros. Las inundaciones en Salta y Chaco pusieron este tema en debate.
Las luchas contra el tope salarial fijado por el gobierno, las patronales y los jerarcas sindicales.
La lucha por el aumento salarial ha movilizado, en el último período a miles de trabajadores.
La propaganda estatal y lo que los millones de trabajadores ven a diario plantea que “hay plata”. ¿Adónde va que no beneficia a los de abajo? Surge nítidamente el problema de la distribución de la riqueza. Y esto empuja la lucha salarial.
Este combate se ha unido, en varios gremios y empresas a la lucha contra la tercerización, la precariedad laboral, la superexplotación, los contratos especiales como el de la UOCRA, etc. Los petroleros de Cerro Dragón y los de las Heras estuvieron a la cabeza de este reclamo. Tuvo repercusión nacional la heroica lucha de los obreros petroleros de esa zona, incluida la pueblada de Las Heras, que desnudó la situación real de la provincia de Santa Cruz y la política represiva que utiliza Kirchner cuando su doble discurso queda en evidencia. Luego salieron al combate los petroleros de Rincón de los Sauces, en solidaridad con los docentes de la provincia y por sus propias reivindicaciones, produciendo la gran pueblada de Rincón de los Sauces.
Los trabajadores del Astillero Río Santiago, que impusieron la elección democrática, sección por sección de su cuerpo de delegados, acaban de resolver, en asamblea general, un vasto plan de lucha en pos de miles de puestos de trabajo, con salarios y condiciones de trabajo dignas, cansados de las promesas que no se cumplen de la dirección de la empresa y del gobierno nacional y el provincial. Otro caso de doble discurso kirchnerista: hace tres años Kirchner dijo que el ARS sería “el polo de desarrollo de la industria naval nacional” y, hasta hoy, eso no se ha cumplido. Se quiere utilizar al Astillero como parte de negocios de los testaferros y amigos del gobierno. Por esto se movilizan los trabajadores del Astillero que esta semana, masivamente, marcharon a pie de Ensenada a La Plata.
Los docentes han librado grandes luchas en varias provincias para conquistar aumentos salariales que rompan el tope acordado por Filmus y Yasky. Los docentes de Neuquén, después de una huelga prolongada, con manifestaciones y cortes de ruta, han triunfado.
Triunfó la larga lucha de los trabajadores aeronáuticos y consiguieron un triunfo parcial los trabajadores del Hospital Francés. Triunfó la larga lucha de los trabajadores de las empresas tercerizadas del subte en la Capital. Triunfó la larga lucha de los obreros de la ex Duperial de San Lorenzo, luego de paros, cortes de ruta y ocupación de la fábrica. En Rosario hubo luchas importantes de aceiteros, portuarios, mecánicos, metalúrgicos, etc. Hubo luchas importantes de los obreros rurales en Río Negro, Tucumán, Jujuy y otras provincias. Está en lucha el SEOM de Jujuy que ha realizado una marcha a pie a San Salvador con el apoyo de los desocupados de la CCC, más de veinte cortes de ruta y un acampe frente a la Casa de Gobierno.
El tope salarial del 19%, acordado por el gobierno y los jerarcas sindicales, apunta especialmente a impedir un aumento substancial en el salario de los trabajadores estatales con la finalidad de lograr el superávit fiscal con el que se paga la deuda externa. La lucha contra ese salario de hambre se generaliza. Los trabajadores de ATE exigen 30% de aumento, rechazando el 19% en cuotas acordado por Andrés Rodríguez y el gobierno y el intento de la dirección de ATE de aceptar el 19% complementado con tickets canasta. Sigue la lucha de los docentes universitarios a nivel nacional por aumento de salarios. La lucha larga de los trabajadores de TELAM, contra los despidos arbitrarios del nuevo administrador y por aumento de salarios, tuvo gran repercusión. Están en lucha los trabajadores de la salud de Mendoza, Córdoba, Neuquén y otras provincias. Están en lucha los obreros del SEOM de Jujuy que han realizado paros combativos, manifestaciones, acampes frente a la Casa de Gobierno y otras medidas.
Sigue y se refuerzan las medidas de lucha de los obreros de la alimentación, del neumático y del Smata por aumento de salarios. Se preparan movilizaciones combativas para esta semana. Ahora se le suman los metalúrgicos de algunas seccionales.
Estas luchas están reforzadas por recientes fallos judiciales contra la tercerización laboral y la propuesta en el Congreso de leyes en esa dirección, proyectos que apuntan a modificar las leyes flexibilizadoras de los ’90. El tema de la tercerización laboral, que afecta a centenares de miles de trabajadores y del trabajo en negro, se ha transformado en una cuestión central de todo el movimiento obrero y la consigna igual convenio por igual trabajo debe ser una consigna de masas. La lucha de los petroleros ha sacado a luz que empresas como Repsol, o Pan American, que explotan las mayores reservas de petróleo, trabajan con puñados de trabajadores propios (en zonas fundamentales no superan algunas decenas) y realizan todo el trabajo con agencias y empresas contratistas que burlan todas las leyes laborales y someten a los obreros a condiciones infernales de trabajo y a sueldos de hambre.
Es necesario que empujemos nacionalmente, como lo está haciendo el SEOM de Jujuy, la lucha por pasar a planta permanente a los desocupados que están en la administración pública.
En las próximas semanas se va a una lucha electoral muy importante en el SUTEBA, en donde vamos en alianza con la Celeste a nivel provincial y muchos distritos y en otros, como Bahía Blanca, con otras alianzas.
El gobierno no ha podido sacar de las calles al movimiento de desocupados y jubilados. Esto es lógico en cuanto no ha podido resolver el problema de la desocupación y el hambre. Se han realizado combativas jornadas de lucha en todo el país, como la del 17 de abril, la del 26 de abril de jubilados y jóvenes y la del 15 de mayo, que también manifestó en solidaridad con la lucha de los obreros de Renacer. El movimiento de desocupados y jubilados tuvo una participación destacada en las grandes movilizaciones populares del 24 de marzo, el 2 de abril, el Primero de Mayo y en la solidaridad con empresas recuperadas y movimientos de lucha. En Tucumán, Salta, Jujuy, y Rosario, particularmente, ha habido numerosos cortes de ruta y marchas por el aumento del monto de los planes, la ayuda en tierras y fondos para nuevas construcciones de las cooperativas de vivienda, emprendimientos productivos, becas a los jóvenes y ayuda para el estudio, etc.
Recuperadas
Uno de los hechos más claros de los profundos cambios que acompañaron al Argentinazo fue el surgimiento de las llamadas empresas recuperadas. Ellas son un ejemplo del avance de la conciencia del movimiento obrero argentino. El Partido debe estudiar esa riquísima experiencia, como es el caso de La Esperanza, Renacer y Zanón. Hoy todas esas empresas enfrentan un nuevo momento difícil. Las expropiaciones decididas para algunas recuperadas en Capital y Provincia, al no haberse pagado, van a una definición. En el caso de La Esperanza los obreros luchan por un aumento salarial, totalmente posible de otorgar por el precio interno e internacional del azúcar, y alertan por un posible fallo de la Corte Suprema de la Nación que devuelva el ingenio al grupo Jorge-Figueroa y por un proyecto de ley de expropiación que ha ingresado a la Legislatura provincial. Se replantea la lucha para transformar al ingenio en una empresa estatal con control obrero de administración y gestión. En el caso de Renacer tanto el gobierno provincial como el nacional maniobran para impedir que se resuelva la expropiación. Lo mismo sucede en el caso de Zanón (agravada aquí por la presión del Banco Mundial). Ha trascendido que el gobierno tiene en carpeta un proyecto de modificación de la ley de quiebra que haría caer las leyes expropiatorias. El tema de las recuperadas debe ser instalado en el centro de la lucha del movimiento obrero (ocupados, desocupados y jubilados) porque se aproximan nuevos combates para garantizar el mantenimiento de esas fuentes de trabajo en poder de sus trabajadores. Es necesario desarrollar un gran movimiento nacional para mantener las expropiaciones conseguidas y obtener otras.
La lucha contra la carestía de la vida
Desde el 2001 hasta hoy la inflación fue del 77% pero los alimentos subieron un 106%. Al ser bajos los salarios, jubilaciones y planes sociales la carestía de la vida es sufrida principalmente por los hogares de los trabajadores (ocupados, desocupados o jubilados).
La política de controles de precio del gobierno es incapaz para resolver este problema. Lo demuestra el tema carnes. En vez de golpear con un impuesto especial a los 3.400 grandes terratenientes y productores que tienen 15 millones de cabezas de ganado, como han propuesto las Amas de Casa del País, el gobierno golpea por igual a consumidores, productores grandes, medianos y pequeños, carniceros, y todo tipo de frigoríficos y no logra bajar en forma sustancial el precio de la carne.
Tenemos que apoyar la campaña de Amas de Casa del País y otras organizaciones de consumidores, propietarios carniceros, Movimiento de Mujeres en Lucha, diputados y partidos populares, de imponer, en el marco de una reforma impositiva integral donde paguen los que más tienen, quitar el IVA de los precios de la canasta familiar y las tarifas de servicios públicos.
Encuentro de Mujeres en Jujuy
En octubre se realizará el nuevo Encuentro de Mujeres en Jujuy. Los últimos demuestran que por un lado se han transformado en acontecimientos de envergadura nacional y que en ellos participan todas las fuerzas y tendencias que trabajan en el movimiento de mujeres, por lo que el debate político e ideológico se ha intensificado, particularmente con los sectores que quieren llevar agua a la política gubernamental y, por otro, con la derecha de la Iglesia. El Encuentro en Jujuy requiere que, desde ya, todo el Partido y la JCR le preste atención y ayude al trabajo preparatorio de las compañeras.
Originarios y lucha por la tierra
En los últimos meses se han producido luchas importantes del movimiento de pueblos originarios que, en ocasiones, se han unido a los campesinos pobres exigiendo tierras o luchando contra el despojo de sus tierras.
Una movilización importante de originarios en lucha por la tierra se produjo en la zona de Aluminé, en Neuquén.
Desde hace semanas se desarrolla un combativo proceso de lucha en Villa Bermejito, provincia del Chaco, proceso que se originó por las inundaciones en la región, por el hambre y por el trato discriminatorio y gorila del intendente del pueblo que no deja entrar a los originarios a la municipalidad “porque dejan olor”, y los atiende, cuando lo hace, en la vereda. La movilización solidaria se extendió a Castelli, Pampa del Indio y otras localidades. Se une a la lucha contra la venta de más de 2 millones de hectáreas de tierras fiscales de la zona en los últimos diez años y el desalojo de numerosos campesinos pobres. Organizaciones como Fuerza Criolla plantearon que defenderán sus tierras a tiros, si es necesario.
El triunfo de Evo Morales en Bolivia está repercutiendo en las organizaciones de originarios en el país y es de prever un gran crecimiento de su actividad. El trabajo en ese movimiento no es sólo una tarea para las zonas agrarias sino también en las ciudades, como lo demuestra el ejemplo de Rosario en el barrio toba, en Berisso con los mocovíes, en Roca con los mapuches, etc.
En el último período es visible el despertar del movimiento del campesinado pobre en varias provincias, lo que se expresa en el surgimiento de organizaciones que los agrupan, el crecimiento del reclamo de la tierra y de la reforma agraria, y el intento de cooptar a esos movimientos por organizaciones afines al gobierno.
El movimiento estudiantil
Desde mediados del 2005 es visible la reactivación del movimiento estudiantil, tanto universitario como secundario. La lucha por la elección del rector de la UBA desnudó que la universidad actual, tanto la de Buenos Aires como las otras, siguen gobernadas por castas profesorales asociadas a diferentes grupos de las clases dominantes y que allí radica uno de los principales problemas que tienen que resolver el movimiento estudiantil y los sectores democráticos del profesorado y los graduados. Se ha abierto un proceso que, de tomarlo con fuerza el Partido y las fuerzas populares, provocará un profundo remezón en la universidad.
Por otro lado el estudiantado secundario protagonizó grandes luchas en el último período. En algunos colegios, en la Capital y varias provincias, se ha producido una profunda democratización que influirá, con seguridad, en todo el movimiento estudiantil, secundario y universitario.
El movimiento por la estatización de los hidrocarburos
La política entreguista del menemismo y de los gobiernos posteriores ha llevado al país al borde de una crisis energética. Las empresas petroleras han hecho inmensos negocios en estos años y han estafado al país impunemente. Con Enarsa el kirchnerismo prepara nuevos negociados en esta área. Crece la conciencia de la necesidad de impulsar un poderoso movimiento por la estatización de la producción petrolera y del gas y las usinas atómicas. Todo el Partido debe ayudar a desarrollar este movimiento igual que hicimos y debemos seguir haciendo con el movimiento contra la deuda externa.
Dar un vuelco del trabajo partidario hacia el movimiento obrero ocupado.
El Comité Central, la JCR y los comités zonales vienen discutiendo la necesidad de dar un viraje en todo el trabajo del Partido hacia las grandes empresas y el movimiento obrero ocupado. Hay zonas que han avanzado en este viraje. Otras están retrasadas o muy retrasadas. Particularmente ha dado pasos importantes la JCR.
Desde ya que un viraje hacia el movimiento obrero ocupado, sin abandonar las posiciones ganadas en el movimiento de desocupados y otros sectores claves para nuestra estrategia insurreccional, requiere medidas orgánicas concretas que generalmente son difíciles de realizar. Pero como hicimos cuando volcamos al Partido hacia el movimiento de desocupados lo primero es convencerse de la necesidad de realizar este cambio y ganar al Partido y a la JCR para realizarlo.
Tenemos que darle importancia al trabajo en gremios como la construcción, el transporte y, en lo inmediato, al gremio de la carne afectado por las medidas del gobierno.
El fortalecimiento del Partido
La clave del desarrollo futuro del movimiento obrero y popular está en el fortalecimiento del Partido. Han sido importantes las escuelas y jornadas de estudio realizadas durante el verano, especialmente en la JCR. También la campaña de actos por el 30° aniversario del golpe de Estado de 1976 y en recordación del camarada Gody Alvarez ha ayudado a discutir el tema del rol del Partido.
Ha culminado exitosamente el Mes de la Prensa. Superamos el objetivo nacional y tuvimos buenos ejemplos de colocación en algunas empresas. Se destaca el número de ejemplares vendidos en piqueteos en lugares de concentración que nos permitieron entrar o reforzar las fuerzas en algunas empresas importantes.
Se han dado algunos pasos en el trabajo de literatura y fue importante nuestra participación en la Feria del Libro, pero ésta es, aún, una asignatura pendiente en el Partido, lo que nos priva de una de nuestras principales armas de combate. Es necesario constituir fuertes comisiones de propaganda en cada zonal que nos permitan desplegar el trabajo de agitación y propaganda más necesario que nunca en estos momentos.
Hemos iniciado la campaña de reempadronamiento que fija el Estatuto del Partido, campaña que realizaremos hasta el fin de agosto. Y nos hemos propuesto un plan de reclutamiento. Allí donde se le ha dado importancia a esta tarea el Partido y la J. han crecido. En algunos zonales en forma importante. Es un buen momento para crecer.
Realizaremos la colecta financiera anual del 20 de junio al 31 de agosto. Tenemos que tender a mejorar los aportes calificados y nuestro trabajo de recursos y lograr que el conjunto de los camaradas y organismos hagan ese plan para desarrollar una campaña exitosa y masiva.
Están pendientes, en la mayoría de los zonales, la realización de las Conferencias que establece el Estatuto del Partido. Como consecuencia de la falta de discusión profunda de las contradicciones que surgen, necesariamente, en la actividad del Partido, como reflejo de las contradicciones de la sociedad y de la lucha, en muchas zonas han ido creciendo contradicciones que, de no encarárselas como se debe, siendo contradicciones en el seno del pueblo, se transformarán en contradicciones antagónicas. No es bueno tapar los debates en vez de promoverlos. Hay que garantizar que las diferencias de opiniones se discutan con la guía del principio maoísta de unidad-crítica-unidad. Las conferencias zonales deben ayudarnos a ello.
Comité Central del PCR,
20 y 21 de mayo de 2006