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18 de abril de 2013

Ingleses repudian a Thatcher

La muerte de la odiada ex primera ministra

Mientras los poderosos de Gran Bretaña y de los gobiernos de las grandes potencias preparan un fastuoso homenaje a la criminal de guerra Margaret Thatcher, el pueblo inglés expresa su repudio a este nefasto personaje.

Mientras los poderosos de Gran Bretaña y de los gobiernos de las grandes potencias preparan un fastuoso homenaje a la criminal de guerra Margaret Thatcher, el pueblo inglés expresa su repudio a este nefasto personaje.
Gobernantes como Obama, Merkel y Gorbachov han expresado su pesar por la muerte de Thatcher, destacando los “valores” de su gobierno. También expresó sus condolencias  el Papa. Mientras, la canción que más popularidad ha adquirido en Gran Bretaña es una sátira a la Thatcher titulada “Ding Dong, la bruja está muerta”, y se han conocido manifestaciones populares de festejo ante la muerte de la odiada primera ministra.
Para muchos ingleses, el gobierno de Thatcher fue “el peor de la historia”. El sábado 13, en Londres, sindicalistas, mineros, estudiantes y organizaciones sociales se ma- nifestaron repudiando las consecuencias de la política de Thatcher, que gobernó entre 1979 y 1990. Músicos y artistas se han sumado a las críticas, que ponen el centro en “Que no se destine dinero público a funerales pomposos” que se realizarán el miércoles 17, en momentos que el gobierno de Cameron aplica fuertes ajustes a los presupuestos de salud y educación. El conocido director de cine Ken Loach expresó “que se privatice su funeral, como le gustaba a ella privatizar todo”.
Hubo marchas en otras ciudades, y se espera para el 17 una gran movilización popular contra las políticas de quien fue la principal responsable de la muerte de 649 compatriotas durante la gesta de Malvinas, la que dio la orden del artero ataque al crucero General Belgrano fuera de la zona de exclusión, el 2 de mayo de 1982.
Desde la Argentina sumaremos nuestra voz reivindicando la soberanía argentina en las islas del Atlántico Sur, exigiendo al gobierno argentino que rompa los nefastos tratados de Londres y de Madrid, que imponen condiciones inaceptables por parte del colonialismo británico.