Con la muerte del camarada Rocha, la clase obrera y el pueblo argentino perdieron a uno de sus más esclarecidos dirigentes revolucionarios. Como dijo el querido primer secretario del PCR, Otto Vargas, en su homenaje, “despedimos a un comunista, a un revolucionario, a un compañero que casi desde la niñez, adhirió a la causa del comunismo y dedicó toda su vida a la revolución”.
Jorge Rocha había nacido en Pehuajó, provincia de Buenos Aires, donde se afilió a la FJC en su juventud. Fue presidente de la Federación Universitaria Argentina en 1968, y uno de los dirigentes juveniles de la ruptura con el PC revisionista, y de la fundación del PCR. Fue su secretario de Organización desde pocos meses después de creado el PCR, hasta su fallecimiento el 2 de septiembre de 2008.
Reproducimos extractos del discurso del camarada Rocha en ocasión del acto por los 40 años del PCR, realizado en el Luna Park el 5 de abril de 2008 (los subtítulos son de hoy).
Con las banderas del marxismo leninismo en alto
Cuando fundamos el Partido en el ’68 muchos nos vaticinaron una pronta desaparición. Otros directamente nos amenazaron con hacernos desaparecer de la política argentina. La dirección del Partido Comunista desató en aquel entonces, una gran campaña de desprestigio sobre nosotros. Se nos acusaba, como se decía entonces, de haber caído en la charca del enemigo, en la charca de la burguesía. Nos acusaban de ser jóvenes divisionistas que no sabíamos lo que era construir un Partido. Y efectivamente éramos jóvenes y no sabíamos lo que era construir un Partido. Siempre pensamos que lo nuestro era, como fue, una rebelión de soldados y sargentos, una rebelión juvenil en defensa del marxismo leninismo. Una rebelión protagonizada por miles de compañeros esperanzados en construir un partido político revolucionario de la clase obrera, un partido para luchar por la revolución de liberación nacional y social y por el socialismo en nuestro país…
Teníamos muy claro que la dirección del PC argentino había traicionado la causa revolucionaria de los trabajadores y al marxismo-leninismo. Y teníamos muy claro que ante esa realidad, era una necesidad de la clase obrera construir un nuevo partido. Un partido que mantuviera en alto las banderas del marxismo-leninismo y que las integrara a la realidad concreta de nuestra revolución. Un partido que se fundiera con las masas obreras y populares y que se esforzara por dirigirlas en la lucha por la revolución. En un momento además, en que en el plano internacional se producían grandes acontecimientos y en el que en el país crecía el odio contra la dictadura de Onganía.
Y teníamos muy claro también que ese objetivo, como siempre lo indicó el Che con su palabra y con su ejemplo, no sería conquistado por los trabajadores y el pueblo sobre un lecho de rosas. Porque sabíamos muy bien que la historia de la lucha de clases había enseñado por demás, que las clases dominantes nunca abandonan por las buenas sus privilegios, nunca abandonan por las buenas la opresión y explotación a la que someten a los obreros y al pueblo…
Fue así entonces compañeros, que con Otto a la cabeza nos lanzamos a construir este Partido que hoy conmemora sus 40 años de existencia. Que los conmemora con orgullo. Con el orgullo de no haber arriado jamás las grandes banderas que fundamentaron su existencia. Las banderas de servir al pueblo, las banderas de la revolución democrática, popular, agraria, antiimperialista en marcha ininterrumpida al socialismo. Las gloriosas banderas del marxismo leninismo.
Al maoísmo llegamos después
Es sabido que cuando fundamos nuestro Partido no éramos maoístas. Al maoísmo llegamos varios años después. Y fue con sus aportes que recién pudimos realizar un análisis marxista del proceso que llevó a la derrota del socialismo en la Unión Soviética en 1957. Acontecimiento que iba a marcar en profundidad el período histórico que nos ha tocado vivir. Así también con el maoísmo pudimos comprender la trascendencia de la teoría de la continuación de la revolución en las condiciones del socialismo. Teoría que dio claridad y nuevas perspectivas a millones de comunistas que habían quedado sumidos en las tinieblas luego de la derrota del ’57.
Pero lejos de hacer de estos desarrollos del marxismo leninismo una defensa doctrinaria, nuestro Partido se esforzó por integrarlas a nuestra realidad. Fue así que a partir de comprender el cambio de color que se había operado en la Unión Soviética y en China, pudimos desentrañar primero la penetración económica y política en nuestro país del imperialismo ruso, y la del imperialismo chino después…
Desde nuestra fundación ha pasado ya mucho tiempo. Nuestro Partido ha crecido y se ha desarrollado. Es un hecho que desde entonces nuestro Partido se ha mantenido unido, superando los golpes, las intrigas y maquinaciones de los enemigos de todo color y pelaje. Y nos hemos mantenido unidos porque nos hemos esforzado por practicar el marxismo y no el revisionismo. Porque nos hemos esforzado por practicar un estilo democrático como garantía de una verdadera centralización consciente. Porque sabemos que en el Partido se expresan contradicciones que son un reflejo de las que existen en la sociedad, y conscientes de ello nos hemos esforzado por abordarlas siempre luchando por la unidad…
El desafío: cambiar la correlación de fuerzas en el movimiento obrero
Avanzar en el cambio de la correlación de fuerzas en el movimiento obrero, será decisivo para avanzar en la unidad popular, para atraer hacia el lado del pueblo a una parte de las fuerzas armadas del enemigo y para avanzar en las posibilidades de triunfo de la lucha por dar vuelta la tortilla en la política argentina. Y es para este gran objetivo que necesitamos también, miles de nuevos afiliados a nuestro Partido y a nuestra Juventud. Miles de nuevos lectores para nuestro semanario y un espíritu financiero como el que hemos tenido para este acto, porque juntando pesito tras pesito es como lo hemos podido realizar.
Esa ha sido la enseñanza del desenlace de la lucha contra la dictadura de Onganía, del desenlace de la lucha antigolpista y de la lucha antidictatorial. Y sobre todo compañeros, esta ha sido la gran enseñanza del Argentinazo. Tuvimos fuerzas para tumbar a un gobierno pero no pudimos imponer un gobierno patriótico y popular. Y así entonces es que se sucedieron luego los cambios de personajes, los cambios de beneficiarios en las disputas de los de arriba. Pero es un hecho que lo que no ha cambiado y sigue imperando es el sistema con que los monopolios, los terratenientes y los imperialistas oprimen y explotan al pueblo argentino…
El proceso abierto afrontará, tarde o temprano, su desenlace. Y es también esta perspectiva la que nos impone afrontar dicho desenlace sin las debilidades con que afrontamos los anteriores. Porque la fortaleza de las clases dominantes estuvo entre otras razones, en esta debilidad de las fuerzas populares. Y esa debilidad fue que la clase obrera no jugó su papel dirigente al frente de todos los sectores populares, en la necesaria alianza obrera-campesina…
Y esto es posible. Es posible por la situación nacional e internacional. Porque existe una corriente muy grande de jóvenes obreros que lo exigen y porque tenemos de donde aprender. Nos lo enseñan desde la historia Salamanca y Antonio. Nos lo enseña la experiencia desarrollada en desocupados y jubilados, que ha transformado a la CCC en una verdadera organización de masas. Nos lo enseñan las crecientes experiencias de los originarios y entre los campesinos pobres y medios. Nos lo enseñan las mejores experiencias desarrolladas en el movimiento obrero por numerosas organizaciones partidarias y de la juventud, experiencias que nos están señalando el camino. Y será posible si nos apoyamos en la inagotable capacidad combativa de nuestra clase obrera y en el temple de nuestro Partido, de la Juventud y de la CCC…
Por todo esto compañeros, marchemos con decisión a cumplir este gran objetivo del período actual. ¡Vivan las luchas de la clase obrera y el pueblo! ¡Viva la Corriente Clasista y Combativa en el movimiento obrero! ¡Viva el camino del Argentinazo! ¡Viva la revolución de liberación nacional y social en marcha al socialismo! ¡Viva el PCR!
hoy N° 2074 27/08/2025