Con la muerte del camarada Rocha, la clase obrera y el pueblo argen-tino perdieron a uno de sus más esclarecidos dirigentes revolu-cionarios. Como dijo el secretario general del PCR, Otto Vargas, en su homenaje, “despedimos a un comunista, a un revolucionario, a un compañero que casi desde la niñez, adhirió a la causa del comunismo y dedicó toda su vida a la revolución”.
Con la muerte del camarada Rocha, la clase obrera y el pueblo argen-tino perdieron a uno de sus más esclarecidos dirigentes revolu-cionarios. Como dijo el secretario general del PCR, Otto Vargas, en su homenaje, “despedimos a un comunista, a un revolucionario, a un compañero que casi desde la niñez, adhirió a la causa del comunismo y dedicó toda su vida a la revolución”.
Jorge Rocha era oriundo de Pehuajó, provincia de Buenos Aires, donde se afilió a la FJC en su juventud. Fue presidente de la Federación Universitaria Argentina en 1968, y uno de los dirigentes juveniles de la ruptura con el PC revisionista, y de la fundación del PCR. Fue secretario de Organización de su Comité Central desde pocos meses después de creado el PCR, hasta su fallecimiento el 2 de septiembre de 2008.
Reproducimos párrafos de algunos de sus escritos y discursos, reafirmando nuestro compromiso de seguir su lucha por la revolución de liberación nacional y social, el socialismo y el comunismo, a la que él entregó toda su vida.
El blanco de las luchas
No era ni es un pequeño detalle el tema de determinar con corrección el blanco de nuestras luchas, porque es en relación a determinar con corrección el blanco que es posible determinar con corrección quiénes son los enemigos y los amigos de la revolución en un período determinado (…)
“Nos atacaron por lópezreguistas, por seguidistas, pero nosotros no fuimos lópezreguistas ni fuimos seguidistas. Fuimos marxistas-leninistas-maoístas. Nosotros fuimos antigolpistas, patriotas y comunistas. Hemos comprobado que nuestra línea fue justa. Lo que aconteció después nos dio lamentable y sobradamente la razón. Las clases dominantes lograron, entre otros, un objetivo fundamental: cerrar el auge de luchas que abrió a fines de la década del ‘60. Nuestra línea nos permitió avanzar. Nos permitió luego enfrentar a la dictadura desde un primer momento, quedándonos en el país, fundiéndonos nuevamente con las masas peronistas y el pueblo, y nos permitió seguir el combate por la revolución.
Charla de 1998, publicada en el libro La trama de una Argentina antagónica (Editorial Agora, 2006).
El capitalismo dependiente
El Tercer Congreso de 1974 analizó que la caracterización de capitalismo dependiente secundariza la división que hizo Lenin entre países opresores y países oprimidos que, como decía él, es la división fundamental del mundo actual, independientemente de que los países oprimidos por el imperialismo tengan relaciones sociales predominantemente feudales, semifeudales o capitalistas. Confundiendo así los partidarios de dicha teoría las categorías de modo de producción, formación económico social –en la que coexisten varios modos de producción, siendo uno el predominante– y sistema imperialista mundial, en el que existen países opresores y países oprimidos”.
3º Seminario Internacional,
Quito, Ecuador, 19 de julio de 1999.
el camino del argentinazo
Estos son momentos para los audaces. Son momentos en que en la medida en que se parta de lo más sentido de la masa y se acierte en línea, y se tenga la audacia necesaria es posible avanzar y vencer, es posible dar un crecimiento a saltos. En este sentido este año ha demostrado que el camino del Argentinazo es necesario, y es posible, para imponer otra política y otro gobierno”.
Acto por el 33 aniversario del PCR,
enero del 2001.
integrar el maoísmo
Los aportes de Mao Tsetung –un gigante del pensamiento y la acción– a la lucha revolucionaria y al desarrollo del marxismo-leninismo, han sido de enorme importancia y mantienen plena vigencia histórica. Estudiarlos para integrarlos a nuestro proceso revolucionario es un arma indispensable para servir a nuestro pueblo. Para animarnos a escalar las alturas y a lograr la victoria.”
Homenaje a Mao Tsetung en el 25 aniversario de su fallecimiento,
septiembre de 2001.
apurar el paso
Cuando en 1996, nuestro secretario general, Otto Vargas, llamó a luchar por el Argentinazo y teorizó que el mismo sería un camino de aproximación a la revolución de liberación nacional y social, nos acusaron de utópicos y trasnochados. Pero el Argentinazo fue una realidad. Ahora nos vuelven a acusar de apresurados y violentos. Pero no hay peor mal que no escuchar el reclamo de las masas más oprimidas y hambrientas del país.
Acto en Ferro,
Buenos Aires, julio de 2002.
actualidad del leninismo
Muchas cosas han cambiado en el mundo desde 1917 hasta el presente. Pero la práctica de la lucha de clases en el mundo y en nuestro país nos demuestra que los análisis leninistas sobre el imperialismo y la característica de nuestra época, sobre sus contradicciones fundamentales, sobre la posibilidad del triunfo de la revolución en un solo país, sobre la revolución ininterrumpida y por etapas, sobre el papel del partido de vanguardia, sobre la tarea central y forma superior de toda revolución, que es la lucha por el poder a través de la lucha armada, sobre la relación de la táctica con los períodos de auge o reflujo, y otras cuestiones, trascienden las particularidades del proceso revolucionario ruso y mantienen plena vigencia histórica”.
Conferencia en el 85 aniversario de la Revolución Rusa,
noviembre de 2002.
se puede parar al gobierno K
No coincidimos con los que dicen que a este gobierno no lo para nadie, y si no que miren lo que está pasando con las luchas campesinas. No coincidimos con quienes dicen que los jerarcas son un mal eterno en el sindicalismo argentino ni con los escépticos que creen que la revolución es una utopía. Los nuevos vientos que soplan en América Latina y en nuestro país demuestran lo contrario”.
Acto por el 40 aniversario del PCR. Luna Park, abril de 2008.
