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02 de octubre de 2010

Avanza en Mendoza la campaña solidaria con el pueblo de Chile tras el terremoto. Dos jornadas que hicieron más fuertes los lazos con nuestro hermano pueblo trasandino.

Jornadas solidarias con el pueblo chileno

Hoy 1314 / Entrevista a dirigentes del Partido Comunista (AP) de Chile

El día viernes 16 y el sábado 17 se realizaron dos actividades con el fin de comprender la situación en la que vive nuestro hermano pueblo chileno y juntar alimentos y ropa para intentar palear un poco las necesidades que están padeciendo.
Se realizó una charla en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNCuyo el viernes, y el sábado se organizó un recital donde el costo de la entrada eran alimentos no perecederos y ropa. La organización estuvo a cargo de el Modacuna, la CEPA, la CCC, la JCR y el PCR.
En la charla expusieron Eduardo Artés (secretario general) y Luis Caravena, dirigente del Partido Comunista Chileno Acción Proletaria PC(AP), a quienes les pudimos realizar una entrevista.

¿Cuál es el motivo que los ha traído a Mendoza?

EA: Estamos acá a partir de una invitación fraternal de nuestros compañeros del PCR para participar de una actividad que hubo en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNCuyo, en la cual tratamos la situación política actual, el ultra neoliberal de Sebastián Piñera y a su vez del desastre natural del terremoto dentro del marco de la política proimperialista que se ha desarrollado todos estos años en Chile, contraria a los intereses de la mayoría.

¿Cuál fue el impacto del terremoto y qué papel jugó el Estado chileno?
EA: El impacto del terremoto es una cosa terrible, los más golpeados son los sectores populares y los sectores medios. Es un terremoto que ha dejado a cientos de miles de compañeros sin vivienda, hay cientos de personas muertas. Además del desastre natural, quedó claramente establecido que un Estado gibarizado, pequeño, un Estado neoliberal, no da respuestas a una emergencia de estas características. Incluso la anterior presidenta, Michele Bachelette dio una cantidad de señales erráticas, no tenía elementos técnicos para estar en comunicación con lo que estaba sucediendo en el país. Después de un día entero, había una cantidad de señales que solamente confundían a la gente y las hizo ser presas de la muerte por no dar la información del tsunami en forma oportuna. Es un Estado que ni siquiera es capaz de dar la alarma a tiempo.

Con la asunción de Piñera como presidente ¿Qué cambió?
EA: Fundamentalmente hay que decir que Piñera tiene una visión ultra neoliberal en relación a cómo responder al tema del terremoto. Busca fundamentalmente reactivar la monopolización de la economía, aún más. En relación a la reconstrucción de las viviendas, busca a tres empresas monopólicas. Genera 10 mil millones de pesos para entregar a estas tres empresas que venden materiales de construcción. Y entrega 15 mil millones de pesos para una empresa que construye viviendas de muy mala calidad de madera. Y este dinero no va a parar a contratos de trabajadores, tampoco para la pequeña y mediana empresa de Chile, va a parar a la empresa monopólica. O sea, hay una idea en Chile de generar un negocio a partir de la catástrofe que afectó a millones de chilenos. La cifra es de 1 millón 200 mil casas afectadas, esto significa millones de chilenos de los sectores más empobrecidos que se está viendo afectada, y se le exige que resuelva el tema de la alimentación y todo, comprar las viviendas, etc. de manera privada, planteando que el problema de las viviendas es un problema entre privados. O sea, casas que eran relativamente nuevas o departamentos que se cayeron, les dijeron que tienen que resolverlo con la empresa constructora, sin reconocer el papel subsidiario en la compra de las viviendas sociales y por lo tanto, diciendo que es un problema entre privados, y el Estado no tiene nada que hacer ahí. Es decir, se demuestra en la práctica una visión de generar recursos y ganancias hacia los grupos económicos monopólicos.

¿Cuál fue la respuesta del pueblo frente a este terrible panorama?
LC: Primero, dejar en claro que se llegó al terremoto con una desorganización popular. Estos años de neoliberalismo ha significado destrucción del tejido social, de la organización popular, por lo tanto la capacidad de respuesta del pueblo desde el primer instante ha sido bastante débil, sin embargo, desde el PC(AP) hemos lanzado una campaña de pueblo a pueblo, desde las organizaciones sociales que están en pie, donde nosotros estamos y en las que no estamos, pero tenemos una ingerencia menor. Desde allí mismo dar ayuda a aquellos sectores o lugares que están más afectados por el terremoto, pasando por encima de las organizaciones o de las gestiones del propio Estado. Ahora, en este instante, debido a que ha sido una cosa insuficiente lo que ha hecho el gobierno ultra neoliberal y fascista nostálgico, que es el gobierno de Sebastián Piñera, ya está habiendo una movilización y una organización que comienza a potenciar y a construir desde los afectados mismos.
Los reclamos, las marchas, inclusive con detenciones en Talcahuano, Oronel, en toda la zona del terremoto, se están sucediendo diariamente, y lugares como Rancahua, Santiago, Linares, Talca hay organización de gente que tiene sus edificios dañados, con marchas con banderas negras, con sus departamentos, con sus lienzos, se han ido integrando cada vez más, sectores que estaban viviendo una vida bastante individualista de la pequeña burguesía, que también ha sido afectada por este fenómeno.

¿Cómo juega el PC(AP) en este contexto?
EA: Lo primero, que nosotros dejamos todo en manos de los compañeros en la organización y en la movilización, en la exigencia al Estado neoliberal de Piñera el cumplimiento y resolución de los problemas. Aquí no se trata de echarle la culpa a la naturaleza. Hay un Estado que debe responder. Y para eso Chile y las riquezas que tiene el país están en condiciones, realmente, de encarar la reconstrucción en forma exitosa. El tema es que esto debe ser colocado al servicio de los trabajadores, no como hoy día que a unos cuantos grupos monopólicos que aún, en estas condiciones, pretenden sacar grandes ganancias.

¿Desean agregar algo más?
LC: Sí, como este gobierno de la nueva derecha o de la vieja derecha nostálgica pinochetista hoy en el gobierno, ha implementado una serie de medidas desde el punto de vista internacional. Incluso de dar señales que ya no es necesario seguir ayudando al pueblo de Chile, que ya está todo resuelto y eso es todo una mentira, que lo que pretende es justamente que los chilenos afectados por el terremoto y los chilenos en general, sean sumisos en relación a la economía; es decir, una rebaja de las cajas de alimentos que se estaba entregando a los sectores más afectados de manera que, a esa gente que tiene la casa destruida, que están sin trabajo, los dejan librados a generar recursos para comprar el alimento.
El gobierno dice que ha habido un aprovechamiento por parte de la gente en percibir estas cajas de alimentos que vienen de diferentes partes del país. Se les ha planteado que ya no necesitan de esa ayuda y que deben generar dinero y gastar y pedir préstamos de manera que puedan vivir. Aquí se dan las máximas de las ganancias, sin importar el sufrimiento, el empobrecimiento que sufren millones de chilenos. Se busca echar a andar una economía, bajo el lema de la máxima de las ganancias. En las zonas donde están afectadas por el terremoto en un momento determinado el litro de leche pasó de costar 1 dólar a 2 dólares. Y ese aprovechamiento que hacen los monopolios económicos de los supermercados no son restringidos por el gobierno, pero sí el aprovechamiento que supuestamente hace la gente de una canasta de alimento que se le entrega dos veces a la semana. Y ahí demuestra la máxima que tiene el sistema neoliberal por sobre los anhelos, deseos, aspiraciones y demandas de un pueblo entero.
EA: Yo quisiera agradecer a los compañeros del PCR de la Argentina de esta oportunidad de encontrarnos con ustedes, la oportunidad de estar con compañeros estudiantes acá en esta manifestación para dar a conocer nuestros puntos de vista. Hemos encontrado en ellos no solamente una comunión en lo ideológico y en lo político, sino también una actitud realmente de hermanos a la hora de atendernos, a la hora de compartir y esto nos deja comprometidos a estrechar más aún los lazos. Tenemos muchas cosas en común, tenemos desafíos en común. El desafío más importante es lograr que nuestro pueblo, que nuestros países, alcancen realmente la libertad, la democracia popular en la perspectiva del socialismo. Así es que un abrazo para el pueblo argentino, para la clase trabajadora argentina, para el campesinado, para los estudiantes, en fin, particularmente para nuestros camaradas del PCR de la Argentina.