El 28 de agosto comenzó el juicio por el asesinato de nuestro hermano Javier Chocobar y los originarios nos convocamos para continuar exigiendo justicia. Fue un encuentro de emociones porque fue un día esperado por nueve largos años.
Mientras los asesinos caminan tranquilos por la calle nosotros ya no tenemos un hermano. Tenemos la esperanza de que el poder judicial va a juzgar a Amin, Gómez y Valdivieso. Aun así nosotros no vamos a olvidar que nuestro hermano murió defendiendo el territorio porque aún no reconocen nuestros derechos.
Chocobar no fue ni el primero ni el último. Fue uno de los pocos que fue visible, mientras que a otros tantos el poder los invisibilizó. Nuestra lucha continúa como lo hicieron nuestros ancestros. Somos parte de la tierra y por eso continúa la lucha. Los asesinos se declaran inocentes y nos quieren acusar a nosotros de violentos.
Javier Chocobar presente ahora y siempre. Si el Estado no acciona como debe ser, estas injusticias continuarán. Si un hermano cae, mil nos levantaremos.
Jallalla Pachamama.
Originarios en Lucha
Hoy N° 1733 05/09/2018