Hace 5 años abríamos las puertas de “la Angostura”… Las puertas de un proyecto cultural que busca albergar las distintas producciones de artistas e intelectuales de Rosario, y de más allá también.
Hace 5 años abríamos las puertas de “la Angostura”… Las puertas de un proyecto cultural que busca albergar las distintas producciones de artistas e intelectuales de Rosario, y de más allá también.
Con esfuerzo pero sobre todo con convicción fuimos armando, entre todos, a La Angostura… y cuando decimos “armando” es en el sentido más literal posible: desde construir los bancos y las sillas, haciendo trabajos de electricidad, plomería y pintura, recibiendo las donaciones que varios de ustedes, queridos amigos y vecinos, fueron arrimando a la vieja casona de Pasco al 500.
“Armando” a través del trabajo manual y del trabajo intelectual que siempre intentamos unir con todos los que han pasado y pasan para colaborar… para atender durante los espectáculos (siendo siempre los primeros en llegar y los últimos en apagar las luces), para limpiar, cebar mates, y también para, al mismo tiempo, discutir qué tipo de cultura y país queremos.
No existe otra manera de construir un centro cultural que se autosostiene económicamente más que desde lo colectivo. Es por eso que en este 5º aniversario no nos queremos olvidar de nadie: de los talleristas que además de brindar lo que saben hacer en sus espacios jamás han dudado cuando hemos convocado alguna actividad gratuita; de los artistas que los fines de semana eligen este espacio para mostrar sus producciones, los comercios del barrio que siempre aportan publicidad, los vecinos que se suman y nos apoyan… como María con sus bizcochos, Marta con sus tortas, Enrique ofreciéndonos siempre algo de su verdulería… y todos y cada uno de los que, en verano cuando nos tomamos merecidas vacaciones nos piden que abramos rápido porque el Centro Cultural le da vida al barrio.
Hemos intentado en estos cinco años, poner en alto nuestra bandera: la de la defensa de una cultura nacional, popular y antiimperialista. Ese lema es el que nos llevó a tener un norte y a hacer actividades que creemos necesarias como el festival en solidaridad con los obreros de la ex Mahle, los festejos por los 200 años de la Revolución de Mayo en la Sala Lavardén y de la creación de la Bandera Nacional en el Monumento, los del Día de la Soberanía, en Puerto General San Martín, los ciclos de cine sobre Malvinas con la presencia de los excombatientes.
Por La Angostura han pasado, en este tiempo, muchísimos artistas. Algunos con muchos escenarios como Suma Paz, Rafael Amor, Ramón Ayala y otros que recién pisan los primeros. Algunos más académicos y otros más improvisados. Distintos estilos, distintas propuestas, distintas edades… porque siempre pensamos que la clave es sumar, lejos de cualquier sectarismo. Y, al mismo tiempo, con la idea de forjar un vínculo entre los artistas y la gente, sabiendo que “el artista” no es alguien que está allá arriba o más allá de. Del mismo modo, pretendemos que el trabajo de los artistas e intelectuales tenga su reconocimiento, desde lo económico y desde la participación de la gente que tiene la necesidad de encontrar algo ahí… por eso no es casual que en los espectáculos siempre se genere ese clima tan especial y el silencio, que todos agradecen.
No es fácil el autosostenimiento, llegar a pagar el alquiler y los impuestos… sobre todo cuando para abajo no gotea casi nada del presupuesto para cultura. Pasan los gobiernos de distintos signos partidarios en la ciudad, en la provincia y en la nación, cada uno con un “modelo” de país y de cultura con los cuales podemos estar o no de acuerdo, pero la realidad para todos los que sostenemos espacios culturales independientes es la misma: nunca nos toca una migaja de la torta que se reparte. Luchamos por el presupuesto que nos corresponde porque es nuestro y nos pertenece, sin que ello implique que nadie nos imponga las ideas o las banderas.
Nunca fue nuestro objetivo ser un lugar comercial por eso logramos que La Angostura esté inscrita como una “Asociación civil sin fines de lucro” donde todo lo que se recauda está destinado a sostener el espacio. Esa fue una gran conquista.
Sabemos que para los grandes cambios que nuestro país precisa, no basta con uno o muchos centros culturales pero estamos convencidos que algo estaremos aportando si uno o muchos centros culturales acompañan las necesidades del pueblo…
¡Por más Angostura… Por más centros culturales… Por un presupuesto digno para la cultura!
Así le expresamos a cientos de amigos, vecinos y artistas que nos saludaron y participaron de dos días de fiesta aniversario. Presentamos las actividades de los talleres, clown y acrobacia en tela por alumnos de la Escuela de Arte Urbano y un recital de jazz, blue y candombe del músico Caburo, acompañado por Marcelo Arce. Acompañó estas actividades un video institucional que trataba de sintetizar estos cinco años en imagen y nombres de todas las personas que aportaron para que este lugar exista.
