El Producto Bruto Interno de nuestro país hace once años que no crece y la producción por habitante es cada vez menor, hoy, en términos reales, es igual al per cápita de hace cuarenta años. El único sector en crecimiento fue el de granos y oleaginosas, en el cual se llegó a cosechas récord. La crisis que hoy vivimos viene agravándose desde Mayo del año 2018, cuando el nefasto gobierno de Macri provocó la crisis cambiaria del dólar y la economía volvió a entrar en fase recesiva. Esto es un reflejo evidente del fracaso político e histórico de las clases dominantes de la Argentina en sus distintas variantes.
Al llegar el gobierno del Frente de Todos se tomaron medidas correctas de ir al encuentro del problema de la población más pobre, por eso se sacó la Ley de Solidaridad Social de fines del año 2019, que permitió asignarle ingresos a sectores de la población que Macri había llevado a la pobreza, tanto trabajadores ocupados como jubilados, en cuatro años se agregaron 4 millones de pobres, lo que estuvo mal es hacer una moratoria previsional que perjudica a los jubilados y beneficia a los monopolios, aquellos que durante los últimos quince años «levantaron ganancias con pala», como suele decirse.
En el mes de marzo se instaló con fuerza la pandemia y hubo que ir a cuarentena, fue correcto poner la salud como problema principal, entonces sobrevino una crisis mayor de la economía. Los datos de la situación económica nacional al mes de agosto son alarmantes: la industria manufacturera cayó un 22,1%, el comercio 16,2%, la construcción 63,4%, el sector de hoteles y restaurantes se derrumbó en un 73,5%. Al mismo tiempo la inflación sigue licuando los ingresos de los trabajadores y jubilados y como consecuencia se agravó notoriamente la pobreza y la indigencia. En el caso de los trabajadores estatales hay provincias donde hace un año que no reciben aumentos salariales.
El gobierno emitió moneda para ayudar a la población, según el informe de la ANSES del mes de julio, el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) llegó en todo el país a 13.411.301 personas, de las cuales entre Jujuy, Salta, Tucumán y Catamarca se registran 1.086.345 personas asistidas, o sea un 8 % del total, porcentaje que es parecido al total de lo que representa la Región NOA en el Producto Bruto Interno, aún así, la ayuda sigue siendo insuficiente.
En cuanto al Programa de Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP), en el tercer mes se llegó a asistir a 328.000 empresas, cubriendo la mitad de los sueldos de 3 millones de trabajadores, en la cuarta ronda se cubrieron 200 mil empresas y a 1,8 millones de trabajadores, la baja se debe a que algunas empresas pudieron producir con relativa normalidad.
En cuanto a monotributistas y autónomos se cubrió a 427 mil cuentapropistas, la mayoría pequeños y medianos comerciantes y el Estado puso para ello 50 mil millones de pesos. Esto no hubiese ocurrido si seguía el gobierno de Macri, como tampoco habría un impuesto a las grandes fortunas como el que se está por aprobar en la Cámara de Diputados.
La crisis social se agrava a diario, el desempleo llegó en el mes de Agosto al 13,1% de la Población Económicamente Activa (PEA), aumentó un 30% en apenas tres meses y entre los meses de Abril y Junio, entre 3,5 y 4,5 millones de personas se sumaron a la desocupación porque perdieron sus puestos de trabajo, temporal o definitivamente, a los que se suman los jóvenes que van superando los 15 años y pasan a ser parte de la Población Activa desde el punto de vista demográfico y no encuentran donde trabajar.
El consumo privado, que genera alrededor del 70% del Producto Bruto Interno (PBI) cayó el 6,6% durante el primer trimestre y un 22,3% en el segundo trimestre, la producción de bienes y servicios de 2020 resulta incluso menor a la de 2006, la inversión de capital productivo es menor que la del año 2004, cuando teníamos 7 millones menos de habitantes.
Una medición realista de la pobreza y la indigencia
El INDEC difundió que para no ser pobre en el mes de Julio se necesitaban $ 44.521 y para no ser indigentes $18.322 para una familia de cuatro miembros, estas son cifras que no reflejan la realidad. Para este tema nos guiamos por la medición que elabora la Junta Interna de ATE INDEC que en su Informe periódico dice que al 31 de agosto pasado, para no ser pobre se necesitaban en Gran Buenos Aires $ 72.707 y para no ser indigentes $ 23.835 y para la Región NOA, calcula la Canasta Básica Alimentaria en $ 20.975, que es lo que necesita para superar la línea de la Indigencia y la Canasta Básica Total en $ 63.249, para superar la línea de pobreza, siempre tratándose de consumos mínimos y no óptimos.
Tomando estas cifras podemos decir que la pobreza supera el 55 % de la población y está por arriba del 60 % en algunas regiones o Provincias. Lo más doloroso es que oficialmente se reconoce que el 60 % de los pobres son jóvenes.
En el caso de Jujuy, con una población de aproximadamente 200 mil niños en edad hasta los 14 años, sobre un total de Población del año 2020 de 771 mil habitantes, según la proyección oficial, son pobres 120 mil niños y dentro de ellos al menos 14 mil son indigentes, es decir no llegan a cubrir a diario sus necesidades mínimas de alimentación. Lo grave es que esta realidad de sufrimientos sigue creciendo.