En una entrevista que le realizó el medio digital FiloNews, el presidente Alberto Fernández se mostró a favor de la legalización de la marihuana y dijo que no tenía problema en abrir el debate “sin hipocresías”. Sin empezar por discutir una política integral para sacar a los pibes del consumo es todo hipocresía y no hay punto de partida posible. Hoy el principal problema es cómo enfrentamos las drogas y el alcoholismo en los barrios, sustancias que arrasan con la vida de los pibes.
Lamentablemente, el presidente se sumó al concierto de voces que hoy subestiman el daño que el consumo de marihuana genera en los jóvenes. Ponen el eje en el supuesto “consumo recreativo” y ocultan una realidad evidente: el consumo de marihuana genera adicción, causa serios problemas cognitivos cuando comienza a consumirse desde temprana edad y sigue siendo puerta de entrada a otras sustancias más peligrosas.
Valoramos que, desde el cambio de gobierno en 2019, en la Sedronar haya avances importantes tanto presupuestarios como en el abordaje y en la mirada del problema de las adicciones. Pero sin una política integral que resuelva trabajo, educación, deporte y cultura, siempre va a ser insuficiente.
Para nosotros/as la droga es una estación de llegada de una cantidad de sufrimientos y problemas que atraviesa la juventud en nuestro país: la falta de trabajo, la imposibilidad de acceder a deporte, educación, salud y cultura. Peleamos por modificar esta realidad en la lucha por las condiciones dignas de vida, creemos que los jóvenes tienen que ser protagonistas de esto, y partimos de fortalecer los espacios de organización colectivos.
También creemos que hay que frenar la persecución y criminalización de los consumidores, pero no desde una perspectiva de “liberalización del consumo de sustancias”, sino desde una perspectiva que apunte a desalentar su uso, fomente la prevención y el tratamiento de quienes son víctimas del consumo. Esa es una responsabilidad del Estado.
Coincidimos con la Comisión Nacional de Adicciones de la Pastoral Social que afirmó ante las declaraciones del presidente: “Es inexplicable que hoy se hable de hipocresía al momento de hablar de la legalización de la marihuana (y otras drogas) en el contexto de pobreza e indigencia que viven cientos de miles de adolescentes y jóvenes que no pueden aspirar a una capacitación seria o a un trabajo digno, fruto de décadas de postergación”.
A su vez, no somos ingenuos. Atrás de las campañas legalizadoras está el interés de monopolios imperialistas que buscan lucrar con el consumo de sustancias y avanzar en la legalización de otras drogas más peligrosas.
Ante la ausencia de un futuro digno para los pibes y las pibas, la salida que nos ofrecen las clases dominantes es la esquina y la droga, para escapar de los problemas que viven todos los días. Entendemos que la droga es una herramienta de dominación y control sobre los jóvenes para mantenerlos callados, para que no se organicen y luchen, para dormir su rebeldía y su potencial revolucionario. Por eso estamos en contra del consumo de cualquier droga y peleamos para que el Estado se haga cargo del problema.
Juventud Comunista Revolucionaria
Hoy N° 1881 15/09/2021
