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02 de octubre de 2010

La nueva película de Pino Solanas

Hoy 1289 / Chilecito y Famatina de pie frente a la Barrick

La presentación en la ciudad de Chilecito, de la excelente película de Pino Solanas “La tierra sublevada”, se constituyó en un hito esencial de la larga y heroica lucha de los pobladores y particularmente las mujeres de Famatina y Chilecito, que han logrado impedir con piquetes en lo alto del cerro Famatina, con temperaturas bajo cero, enfrentando provocaciones, represión y juicios intimidatorios, las tareas de prospección minera de la empresa Barrick.
Quinientos chileciteños pagaron su entrada y acompañaron con aplausos y silbidos todos los momentos de la película y particularmente de aquellos en los que son protagonistas.
La película, muy bien realizada, es contundente en la denuncia del saqueo de la gran minería a cielo abierto, de sus efectos contaminantes presentes y futuros y de la complicidad indignante de los gobiernos provinciales y de los Kirchner en el saqueo y la contaminación.
Significativa es la denuncia de que una de las minas más contaminantes, la de Bajo La Alumbrera, que incluye un aeropuerto propio con mil metros de pista pavimentada, es propiedad de la Universidad de Tucumán, la que entrega riquezas de decenas de millones de dólares a cambio de una compensación de 13.000.000 de pesos anuales y 1.300.000 para sobornar a cada una de las universidades nacionales.
Otro momento de indignación fue ver la entrega de Menem, Gioja, Massa, todos los funcionarios actuales y el veto de Cristina a la protección de los glaciares para permitir la explotación de oro y plata de Pascua Lama y Veladero en San Juan.
Pero sin duda, los momentos más conmovedores de la película, son los que dan cuenta de la lucha de pueblos perdidos, olvidados por los grandes medios de prensa, que sin recurso alguno han realizado verdaderas epopeyas para defender su tierra, sus modos de vida frente a monopolios internacionales todopoderosos dueños de recursos sin límite.
El debate presidido por Pino Solanas y todas esas mujeres, comerciantes, maestras, amas de casa, que subieron con sus hijos en brazos al escenario y prometieron ante todo el pueblo que no van a abandonar la lucha y pidieron que la lucha sea de todos, es revelador de la fuerza, con que se defiende la soberanía, aún en los mas lejanos lugares de la patria.