Noticias

16 de junio de 2011

Extractos de un reportaje de Gabriel Levinas a Diana Kordon, reproducido de plazademayo.com

La política de cooptación de los Kirchner

Hoy 1373 / Cómo pasó Bonafini a ser operadora del gobierno

La compañera Kordon es integrante de Liberpueblo, coordinadora del Eatip, destacada luchadora en el terreno de los derechos humanos, y una reconocida psiquiatra que, entre otros logros profesionales, ha obtenido la Beca Guggenheim –junto a Lucila Edelman- por su investigación en la atención psicológica de familiares de desaparecidos.

La compañera Kordon es integrante de Liberpueblo, coordinadora del Eatip, destacada luchadora en el terreno de los derechos humanos, y una reconocida psiquiatra que, entre otros logros profesionales, ha obtenido la Beca Guggenheim –junto a Lucila Edelman- por su investigación en la atención psicológica de familiares de desaparecidos.
Diana Kordon cuenta en el reportaje que a comienzos de la dictadura “estaba haciendo denuncias y acompañando a algunos familiares, por la represión que muchos nos habíamos enterado que ocurría cuando comenzó la dictadura, y en ese andar, me presentaron a algunas madres que después fueron del núcleo fundador de Madres de Plaza de Mayo… Creo que un año después se enteraron de mi profesión (médica psiquiatra), entonces me pidieron si yo podía atender a algunas de las madres en una situación difícil, y posteriormente apareció la problemática de la información a los hijos de desaparecidos, como problema que había que abordar. En ese sentido, algunos años después invité a Darío Lagos, Lucila Edelman, Elena Nicoletti y algunos otros colegas y formamos el equipo de asistencia psicológica de Madres de Plaza de Mayo. Con este equipo, estuvimos con las Madres hasta el año ‘90, en el que, en buenos términos, pero ya con diferencias de apreciación alrededor de la situación, decidimos de común acuerdo alejarnos”.

Los cambios en Hebe de Bonafini
En otro tramo del reportaje, la compañera Kordon afirma, con relación a los cambios en Hebe de Bonafini: “a mí me parece que lo que cambia la calidad es el ensamble y el hecho de que Hebe pasara a ser operadora de este gobierno. Eso me preocupa: porque tampoco estoy de acuerdo en que primero el problema era Schoklender, ahora el problema es Hebe y punto. No. Acá hay un problema que el que tiene más poder, tiene una determinada responsabilidad. Hay un tema que es que o estás con el gobierno o sos macrista, o estás con el gobierno, o estás con la derecha; y a mi me parece que este discurso único va totalmente más allá de Hebe, porque hay una absoluta coherencia con algo que se estimula desde los Kirchner. Considero que se produjo una simbiosis Kirchner-Hebe, y la gravedad está en la política de cooptación de los Kirchner. Creo que es un tema fundamental porque ellos se han apropiado de una lucha que nunca fue de ellos y no es pequeño detalle. No es que Kirchner estuvo de acuerdo de entrada con la propuesta de Patricia Walsh de anular las leyes de punto final y obediencia debida, sino que ellos nunca abrieron la boca, nunca hablaron en la provincia de Santa Cruz sobre la problemática de derechos humanos.
Obviamente ellos tenían que legitimar su gobierno, después de los episodios de diciembre de 2001, después de las asambleas populares, después de que Duhalde tuviera que adelantar las elecciones por el asesinato de Kosteki y Santillán, necesitaban garantizar -los sectores que mandan, por decirlo de alguna manera- gobernabilidad y yo creo que el gran descubrimiento de los Kirchner fue que los derechos humanos, que eran banderas muy caras al pueblo argentino, podían servirles como pivote para esa legitimación. Porque ustedes saben que no ha habido una lucha en todo el mundo contra la impunidad y los genocidas, como hubo en la Argentina. Fue una lucha extraordinaria.
Los Kirchner se montan en eso y empiezan a operar, como también lo hicieron con otros sectores, porque intentaron cooptar a todo el mundo, y la cooptación, va acompañada de cooptación económica. Y ponen la plata del Estado sin el menor tipo de control, ni de límites. Yo no me quiero meter en temas económicos, porque no los manejo, pero $1.200 millones es muchísimo. Y esto no es un detalle. Y repartir todo tipo de puestos, no es un detalle. Ocultar y exigir el ocultamiento de temas muy graves de derechos humanos que son de este período, tampoco es un detalle. Por eso yo digo que hay silencios que también fueron exigidos: ¿por qué el gobierno no se comprometió en la denuncia e investigación del caso Julio López? Esos son problemas gravísimos: Luciano Arruga, el Indoamericano, ese caso condensa un problema porque es el mismo lugar en donde estaban los obradores para el armado de las casas de las Madres”.
Levinas le comenta que “Cuando yo fui a presentarle a Hebe casos de violación de DDHH –como el de los pueblos originarios–, ella me dijo que eso no le interesaba, que su tema era otro”. Sobre esto DK afirma: “A mi me parece respetable que Hebe diga: ‘yo me ocupo de este tema’, y por lo tanto, que ella dijera que con el tema de los pueblos originarios, por ejemplo no se ocupaba. Lo que no me parece aceptable es que las veces que han reprimido a los pueblos originarios no se diga nada.
De todos modos, en ese proceso, Hebe fue modificando muchísimas cosas: ella fue denunciando situaciones represivas hasta que llegó el gobierno de los Kirchner. Desde ese momento, Hebe nunca más: con los presos de Las Heras, de Santa Cruz, con lo que hizo Peralta, con la represión a los trabajadores del Casino o a los trabajadores del Hospital Francés. No se trata de que Hebe diga alguna palabra o que salga en algún papelito o información de las Madres, unas líneas; se trata de que Hebe tenía y tiene el peso como para producir acciones que, en realidad, tiendan a frenar esa situación. Eso es lo que Hebe no ha hecho, porque algo que manche a este gobierno no puede ser. A mi me parece que ése es el pacto que cuestiono y que hago como primer gran responsable al gobierno, y subsidiariamente, a Hebe y Schoklender.