La compañera Liliana Ruiz expresa que con orgullo “tenemos que decir que todas las compañeras están al pie del cañón. Con sus miedos, discusiones, abren sus casas para que funcione el comedor o merendero. Eso implica discusión con su propia familia. Pero para muchas es más importante dar de comer a la gente y la leche a los niños, porque la situación se agravó. La gente que iba a trabajar en los countries y casas de Pilar, hoy no puede ingresar a trabajar: los mismos propietarios no los dejan entrar porque saben que el virus está circulando mucho en los barrios populares”.
La dirigente de la CCC de la zona norte cuenta que esta lucha contra el hambre les permitió crecer. En este período de pandemia pasaron de estar en cinco distritos a estar en siete. Hoy la CCC está presente en Escobar, Pilar, Malvinas Argentinas, San Isidro, Tigre, José C. Paz y San Miguel. Cuenta que incluso muchos compañeros se pasaron a la CCC por las formas de trabajar que tenemos: “esto de discutir democráticamente los roles, las tareas, desde otros lados se ve con admiración”.
Los comités de crisis
Liliana cuenta que al comienzo, había mayor coordinación de los comités de crisis, sin embargo, están trabajando integralmente en los municipios de José C. Paz, San Isidro, Escobar y Pilar. “Son con los municipios que más estamos trabajando en conjunto, con postas de El barrio cuida al barrio, sobre todo en Escobar y en Pilar. Además, en medio de la pandemia pudimos terminar varias escuelas en el distrito de Malvinas Argentinas, en Tigre y en San Miguel”.
Liliana cuenta que en Malvinas Argentinas nunca arrancó el comité de crisis: “el municipio viene trabajando solo, y nosotros venimos a full con nuestros comedores y merenderos. En total, estamos atendiendo a más de 3 mil chicos. En José C. Paz pasamos de uno a tres merenderos y dos comedores”.
Respecto a los aportes a los comedores por parte de los municipios, la compañera cuenta que es desparejo. “Por ejemplo en San Isidro, el municipio les da gas, los frescos (verduras y carne). En José C. Paz pasamos a estar en contacto con la Secretaría de Economía Social, ahí nos ayudan con productos secos. En Malvinas nos venían ayudando con secos, pero dicen que por la ayuda del IFE, por la tarjeta Alimentar, y la Asignación por Hijo, la gente ya debería estar cubierta con eso. Pero la realidad no es así, porque en uno de los comedores en Malvinas, atendemos a más de cien familias: hace fila la gente para poder retirar su comida. En Pilar recibimos ayuda. Allí, una de las concejales anunció el proyecto que se llama María Romero –por una militante que trabajaba en un comedor y que falleció repentinamente-, que consistirá en una ayuda de seis mil pesos a las compañeras que están en los comedores”.
Trabajo de la CCC
Cuenta Liliana: “Nos hemos afianzado en los barrios. Hemos hecho la jornada por la expropiación de Vicentin, los compañeros pasaron a discutir también por qué el impuesto a las grandes fortunas. Se mantienen las reuniones virtuales. Se han hecho jornadas de vacunación. Están muy activos, muy comprometidos los compañeros.
Estuvimos tres meses sin el camión de la mercadería pero hoy gracias a la lucha hemos conquistado las meriendas que llegaron de Nación. Un subsidio para comprar alimentos que es un alivio. Tener esta ayuda en este momento, para las compañeras es muy valioso. Y lo maravilloso de nuestra organización es que todo lo que llega va al barrio”.
La situación se agrava
“Las compañeras en los comedores y merenderos son las que escuchan el drama de todas las que pasan por ahí. Vamos dando pasos con muchas de ellas, ayudando a salir de la situación de violencia. Hemos recuperado a una chica que estaba siendo abusada por su cuñado. Pero todos los días aparecen distintos dramas que con lo que vivimos hoy, recrudecen porque aumentó el consumo de droga y alcohol.v
“Entendemos que el gobierno tomó algunas medidas que ayudaron y que fueron lentas. Pero estamos tratando de dar respuesta lo más que se puede: todos los días te están viendo si podés armar un merendero”, finalizó.
Hoy N° 1825 29/07/2020