Las crisis son inevitables en la economía capitalista. Para suprimirlas hay que terminar con este sistema de producción y cambio. Siempre estallan súbitamente porque obedecen a la fuerza espontánea, ciega, del capitalismo. Néstor Kirchner (él gobierna al fin y al cabo desde el 2003) hizo lo mismo que Miguel Juárez Celman antes de la crisis de1889, previa a la Revolución del Parque. Juárez Celman veía una perspectiva de prosperidad indefinida y, en realidad, estaba “inflando un globo”, como dice E. Gastiazoro en el tomo III de su Historia Argentina. Kirchner no tuvo una política de previsión de la crisis y ésta lo sorprendió hablando boberías como lo del “efecto jazz”.
02 de octubre de 2010
