El 19 de agosto, la empresa Lear volvió a producir después del locáut patronal, más allá de la amenaza que hizo de cerrar la fábrica. Acató la resolución de la justicia para que ingresen los delegados. Recordemos que éstos habían sido despedidos, y luego “despromovidos” por el sindicato con su plenario trucho, antidemocrático e ilegal. Acá también la Justicia falló a favor de la Comisión Interna. Ese martes la patronal y la patota del Smata quisieron aislar a los delegados de los trabajadores. Al hacerse público esto, los tuvieron que dejar caminar la fábrica. Pero no conformes con eso los jerarcas del Smata, con Pignanelli a la cabeza, hicieron el miércoles una asamblea ilegítima donde no participaron todos los trabajadores y no les permitieron a los delegados hacer su descargo.
Repudiamos esta actitud del gremio que le hace el trabajo sucio a la patronal yanqui y le deja vía libre para que la empresa haga lo que quiera con sus trabajadores. Lo que no entendemos es por qué los delegados sacaron -antes de esa asamblea- una posición planteando que no iban a presentarse.
Desde la CCC y la 1º de Mayo repudiamos la actitud del gobierno represivo, de la patronal yanqui y del Smata de no respetar las leyes de nuestro país, e impedir que los trabajadores decidan en asamblea democrática y resolutiva cómo continuar y así garantizar su fuente de trabajo. Por eso es importante el paro de 36 horas, en las calles y movilizados para no seguir pagando el ajuste.
